Para mí es muy grato comentar que el Factor Wellbeing está sonando fuerte en México. Es una tendencia global que arrastra al país con gran fuerza y que consiste en poner especial interés por el bienestar de los colaboradores, dentro y fuera de las organizaciones.
La pandemia provocó un incremento en la atención sobre el tipo de liderazgo que se aplica, ahora especialmente porque la mayoría de las personas enfrentamos algún tipo de trauma postpandémico.
¿Qué estamos haciendo bien para darles seguridad a nuestros colaboradores?, ¿cómo, tras la pandemia, generamos un ambiente de confianza, estabilidad, certidumbre?, ¿los costos que generan estos esfuerzos son sostenibles?, ¿qué provecho se saca de todo ello?
Las respuestas son fáciles de explicar, pero, aunque existen métodos científicos comprobados, aplicarlas puede resultar complicado si no se tiene la convicción que primero está la persona.
El año pasado, a pesar de estar inmersos en la pandemia, el Instituto de Ciencias del Bienestar y la Felicidad y Business Insider lanzamos el programa que denominamos precisamente Factor Wellbeing en el que evaluamos la cultura de bienestar de más de 60 organizaciones con una metodología propia que denominamos BEAT.
Quedamos sorprendidos por la alta participación, pese a la emergencia sanitaria, pero particularmente por los buenos resultados que arrojaron gran parte de ellas.
Las buenas noticias no paran ahí, ya teníamos inscritas a casi 30 organizaciones cuando todavía no hacíamos el anuncio oficial de la segunda versión de Factor Wellbeing.
Son señales de que las organizaciones y sus líderes están preocupados por dar un enfoque de bienestar a sus proyectos y a sus colaboradores; por generar ambientes positivos, abandonar ese tortuoso enfoque de mirar las debilidades para concentrarse en las fortalezas; en fin, por alinear los propósitos de la organización con los de sus colaboradores para que el trabajo resulte significativo, el estar seguros que le estamos aportando algo positivo al mundo.
¿Qué revisaremos en Factor Wellbeing este año?
Esta año evaluaremos además la atención que se brinda a la salud mental de los colaboradores, a su bienestar financiero, el manejo de equipos híbridos, tanto en casa y como en el centro de trabajo; flexibilidad laboral; cultura de diversidad, y equidad e inclusión, en un afán de hacer más robusta la evaluación, pero también más acordes con estos tiempos.
Como hemos dicho en este espacio, está comprobado que una organización que promueve el bienestar de sus colaboradores provoca un espiral de productividad que beneficia a todos.
No se trata de cumplir con normas laborales, sino convencerse que el mundo necesita un cambio y el centro de trabajo es donde más horas pasamos.
El bienestar, eso que nombramos como Factor Weillbeing, es indispensable para tener éxito duradero en cualquier organización. Tenemos que abordarlo si queremos en verdad transformar el mundo positivamente.
Las opiniones publicadas en esta columna son responsabilidad del autor y no representan ninguna posición por parte de Business Insider México.