¿Quieres ser feliz al instante?: “ponte tu perfume favorito” o “cambia la pantalla de tu celular”, dos soluciones que puedes encontrar en internet y redes sociales.
La gran mayoría de las personas sabemos que “las fórmulas mágicas no existen”, sin embargo, pululan las recomendaciones de todo tipo de sortilegios para llevarnos a un bienestar de ensueños.
Debemos preguntarnos, si resulta tan fácil, ¿por qué tanta gente se queja de su suerte?
Estoy segura que hacemos falta un mayor número de personas capacitadas para ayudar a los demás a ser felices.
Con la misma certeza puedo decir que sobran comunicadores, influencers o gurús que predican métodos para la felicidad con la intención de hacer dinero, obtener “me gustas” o simplemente llenar sus espacios con temas que no los comprometen.
Sin embargo, hablamos de algo serio.
¿Ser feliz con algunos «trucos» de internet?
Es cierto, gran parte de las personas que son felices lo son sin darse mucha cuenta de ello. Sólo son felices.
Pero los que no se sienten satisfechos con su vida necesitan ayuda, requieren apoyo para cambiar la manera en la que ven el mundo. De ahí proviene la otra parte de los hombres y mujeres que alcanzan la felicidad.
La gran tragedia humana es que millones de personas nunca llegan a ser felices pese a que gozan de suficientes recursos para lograrlo.
Quienes buscan una solución a su incapacidad de ser feliz pueden encontrar en este tipo contenidos experiencias de fracaso que pueden hacer más frustrante su vida.
Si bien muchos de los materiales que se difunden por internet son muy creativos y eficientes para comunicar, debemos estar atentos a su veracidad, origen e intención.
Un primer paso es averiguar quién es el autor del material que escuchamos o leemos: ¿Es una persona o un medio de comunicación? ¿Es una organización o persona especializada en el tema o sólo un medio o informador que transmite lo que recibe? ¿Es reconocido y confiable?
Si se dice experto, ¿qué formación tiene?, ¿quién lo recomienda?, ¿en qué basa sus conocimientos o en qué escuela del pensamiento soporta sus verdades?
Si es un informador, ¿cuáles son sus fuentes?, ¿las cita correctamente?
Ante todo es importante que contraste la información que tienes con otra, con personas que conocen del tema, con tu sentido común.
Sinceramente, no dudo que ponernos nuestro perfume favorito nos puede ayudar a sentirnos mejor por unos instantes, pero está muy lejos de hacernos realmente felices.
La búsqueda de la felicidad
Economistas, como Richard Layard, de London School of Economics, hablan de que vivimos en una época de búsqueda de la felicidad; Aristóteles desde el siglo IV antes de Cristo ya lo afirmaba: la felicidad es el fin de todos los seres humanos.
Si estás buscando ese tipo de información, es una gran señal de que tienes una estima de ti y quieres mejorar la forma de cómo vives. Esa es una gran noticia y te animo a que continúes.
Déjame decirte que la felicidad es un tema que se le ha encargado a la psicología. En particular, la psicología positiva inauguró los estudios sobre cómo el ser humano puede alcanzar esa meta.
Pero en menos de 30 años se han encontrado otras pruebas aportadas por distintas ciencias que también abonan a nuestro bienestar integral.
Sin duda hay corrientes filosóficas, religiones, idearios y hasta disciplinas que te hacen sentir satisfecho, pero hay mucha información científica que te ayuda a vivir feliz.
Los instantes de alegría son grandiosos, pero la felicidad es para toda la vida. Búscala de la mano de la ciencia, que también está en internet.
Las opiniones publicadas en esta columna son responsabilidad del autor y no representan ninguna posición por parte de Business Insider México.