• La generación Z tiene la edad suficiente para comenzar a tomar decisiones financieras independientes.
  • La banca no tiene por qué aburrir: hay instituciones financieras que abordan las causas sociales.
  • Establecer un presupuesto mediante el análisis de tus gastos básicos y de estilo de vida es una excelente manera de comenzar.

Cuando se trata de banca, las pequeñas tareas pueden parecer fácilmente tareas abrumadoras en lugar de decisiones financieras importantes, pero si eres de la generación Z más vale comenzar a familiarizarte. ¿Configurar diferentes cuentas bancarias, administrar un presupuesto, ahorrar para gastos de emergencia? La mayoría de las escuelas no nos enseñaron a la generación Z cómo hacer esto.

Pero con la edad viene la responsabilidad y la oportunidad de aprender habilidades esenciales para la vida. Y seamos sinceros, generación Z, estamos envejeciendo: conseguimos los primeros trabajos, alquilamos los primeros apartamentos y tomamos las primeras decisiones financieras independientes que podrían afectar nuestras vidas, incluidas las referentes a la banca.

Si no tienes mucha experiencia con la banca y eres de la generación Z, aquí hay cuatro consejos que debes conocer antes de gastar otro peso.

1. Si tu primera cuenta bancaria fue creada por uno de tus padres, es posible que estés listo para abrir una segunda por tu cuenta.

Quizás tus padres abrieron tu primera cuenta bancaria cuando eras niño para enseñarte cómo manejar el dinero. Pero ahora que comenzaste la universidad o conseguiste tu primer trabajo, estás listo para comenzar a administrar tu dinero de nuevas maneras. 

Marguerita Cheng, planificadora financiera de Blue Ocean Global Wealth, dice que abrir una segunda cuenta bancaria puede ser una buena opción. Esta te ayudará a generar historial crediticio.

«Incluso cuando estás en la escuela, sí es apropiado que abras otra cuenta, no estás haciendo nada para faltarle el respeto a tus padres. Es muy valioso tener una cuenta», dice Cheng.

2. Si eres nuevo en la banca, ten en cuenta los saldos y las tarifas mínimas

Las cuentas bancarias son un lugar seguro para almacenar tu dinero y facilitan el seguimiento de los gastos a través de extractos bancarios. Pero si no prestas atención a los detalles específicos de la cuenta, es posible que debas pagar comisiones mensuales. 

Las comisiones mensuales varían entre las diferentes instituciones financieras. Deberás prestar atención a las comisiones de mantenimiento mensuales, por sobregiro y por transacciones fuera de la red, que son algunos de los cargos más comunes.

Algunos bancos renuncian a las comisiones de mantenimiento mensuales si tienes una cierta cantidad en tu cuenta diariamente. Otros no te cobrarán nada. 

3. Puedes acercarte a un banco que cumpla con tus necesidades, no necesita ser tradicional

No tienes que conformarte con un banco grande si no se alinea con tus valores o prioridades.

Puedes acercarte a los llamados neobancos, que tienen algunas ubicaciones físicas, pero generalmente, trabajan exclusivamente en línea.

4. Si estás estresado por hacer un presupuesto, comienza analizando tus gastos

Un presupuesto tiene que ver con el equilibrio. Tienes que crear un sistema de administración del dinero que funcione mejor para ti.

Cheng dice que puede comenzar a presupuestar analizando tus gastos básicos y de estilo de vida

Los gastos básicos son cosas esenciales en las que necesitas gastar dinero, como el alquiler, las facturas, la gasolina y la comida. Algunas cantidades pueden ser una cantidad mensual fija que es la misma todos los meses, como el alquiler. Otros gastos pueden ser una estimación basada en algunos meses, como comida o gasolina. 

Los gastos de estilo de vida son cosas no esenciales que te hacen sentir bien, como salir a comer, salir con amigos o entretenerte. Cuando estás aprendiendo a hacer un presupuesto, esta es el área donde es más probable que puedas implementar cambios futuros.

Puede que valga la pena cambiar algunos gastos relacionados con el estilo de vida. Como si no estuvieras viendo una transmisión servicio ya porque tu programa favorito fue cancelado. O, si comes mucho fuera, considera preparar más comidas caseras. 

Cuando realices ajustes en los gastos de estilo de vida, asegúrate de seguir estableciendo metas alcanzables. No te deshagas de las compras que te traen alegría. Si te gusta comprar una taza de café para pasar el rato con amigos, no te deshagas de ese placer para ahorrar dinero.

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