- Cruise, de GM, sigue adelante tras el abandono de Argo, de Ford.
- Tras años de investigación y desarrollo, Cruise se ha embarcado en la comercialización.
- Según Mark Reuss, Presidente de GM, la rentabilidad aún no es el indicador del éxito de Cruise.
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En un momento en el que los servicios de taxi autónomo como Argo, de Ford, cierran, Cruise, de GM, planea estar en el negocio de la conducción autónoma a largo plazo, dijo Mark Reuss, presidente del fabricante,
De hecho, el equipo de conducción autónoma de GM está en la fase de comercialización de su servicio de robo-taxi. Esto tras un exitoso proyecto piloto nocturno en San Francisco a principios de este año.
Cruise pretende ofrecer viajes en Austin y Phoenix y planea expandirse a más ciudades el año que viene.
Al mismo tiempo, Cruise sigue desarrollando su vehículo autónomo Origin. Según sus ejecutivos, abre más oportunidades comerciales para la empresa, como el reparto y el transporte compartido.
Sin embargo, ser comercial no significa ser rentable. El funcionamiento de Cruise le cuesta a GM 2,000 millones de dólares al año. Mientras tanto, los expertos y directivos de la industria del automóvil advierten de que la tecnología está aún en pañales y faltan años para su comercialización masiva.
En respuesta a los escépticos, Reuss afirmó que Cruise puede ampliar su oferta porque el equipo se ha mantenido centrado.
«No creo que sea una buena idea —sobre todo en proyectos de investigación— entrar y salir de ellos», afirma Reuss. «Acabas perdiendo un montón de impulso».
La CEO de GM, Mary Barra, dijo a los inversionistas el mes pasado que la compañía continuaría con su actual ritmo de gasto en Cruise. GM y Cruise no han dicho cuándo empezará a dar beneficios la unidad de coches autónomos.
Es el enfoque opuesto al de su rival Ford, que el mes pasado abandonó Argo, su unidad de conducción autónoma que perdía dinero. Esto hizo saltar las alarmas de los inversionistas en el sector de los vehículos autónomos, y las acciones de las nuevas empresas del sector se vieron afectadas.
Los analistas del sector dicen que se espera que el cambio en las valoraciones impulse una oleada de consolidación en el sector de las nuevas empresas de conducción autónoma el año que viene.
Para Reuss, la rentabilidad no es el indicador adecuado del éxito de Cruise, al menos por ahora. En su lugar, los diseñadores e ingenieros se centran en cumplir los criterios de seguridad y comodidad a medida que se amplía el servicio.
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