- La ivermectina es uno de los medicamentos más recetados para tratar el Covid-19.
- Sin embargo, no se han comprobado buenos resultados en los pacientes que lo han tomado.
- Estas son las disyuntivas sobre el uso de este tratamiento durante la pandemia.
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Una semana antes de Navidad, recibí la temida llamada de mi médico: «Tu prueba de Covid-19 resultó positiva». Era mi segunda vez con la enfermedad, así que pensé que sabía lo que venía después. El médico recitó el protocolo estándar para el aislamiento.
Pregunté si había algún medicamento que pudiera tomar para ayudarme con el dolor de garganta, los escalofríos y la congestión nasal.
De repente, se salió del guión. «¿Qué has oído sobre la ivermectina?», preguntó. Respondí honestamente: «Nada grandioso».
La disyuntiva en el uso de ivermectina
En 2020, los estudios preliminares sugirieron que la ivermectina podría ser un tratamiento efectivo para el Covid-19, pero los estudios de seguimiento revelaron que el medicamento no tenía ningún beneficio real ante la enfermedad.
La Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA, por sus siglas en inglés) no recomienda la ivermectina para tratar este padecimiento, aunque la agencia la aprobó para la rosácea, los piojos y ciertos parásitos en humanos.
También dio «visto bueno» a la pasta de ivermectina para la prevención de la dirofilariosis en algunos animales.
Mi médico insistió en que vio «muchos beneficios» de la ivermectina entre sus pacientes con Covid-19. Y no era el único.
Un subconjunto de médicos estadounidenses sigue convencido de que la ivermectina ayuda a las personas con Covid-19, principalmente porque han escuchado que lo hace, ya sea de colegas conservadores o de organizaciones marginales que promocionan la ivermectina como un tratamiento para este padecimiento.
Los expertos dicen que las recetas de ivermectina caen en un territorio ético turbio.
En el mejor de los casos, el medicamento es ineficaz para el Covid-19, aunque los ensayos clínicos todavía están estudiando si la ivermectina podría ayudar con el tratamiento de los síntomas leves a moderados.
En el peor de los casos, es peligrosa. La FDA advierte que grandes dosis de ivermectina pueden causar náuseas, vómitos, convulsiones, coma e incluso la muerte.
Recetas de ivermectina al por mayor
Pero los riesgos para la salud y la falta de evidencia no han frenado las recetas de ivermectina en Estados Unidos. Los médicos surtieron alrededor de 84,000 para el Covid-19… esto tan solo contando una semana en agosto de 2021, según una investigación de la Universidad de Michigan.
De julio a agosto del año pasado, los Centros de Control de Envenenamientos de Estados Unidos registraron un aumento dramático en las llamadas de personas que se automedicaron con ivermectina; sufrieron alucinaciones, temblores, diarrea y náuseas.
Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés) también tuvieron un incremento en las recetas de ivermectina en esa época, aunque no está claro cuántas se han surtido desde entonces.
¿Por qué se promueve el uso de la ivermectina para tratar el Covid?
Las aseguradoras estadounidenses, incluidos los planes privados y de Medicare, aún cubren el costo de las recetas de ivermectina. Gastaron alrededor de 2.5 millones de dólares en ellas durante la semana del 13 de agosto de 2021, o casi 130 millones de dólares por año si los datos se extrapolaran anualmente, estimaron los investigadores de Michigan.
Eso significa que tanto los contribuyentes como los miembros del seguro están pagando parcialmente la factura de un medicamento que no ha demostrado ser eficaz para tratar el Covid-19.
Kolina Koltai, becaria postdoctoral de la Universidad de Washington que se especializa en investigación de desinformación, comentó que los médicos a menudo son influenciados por la retórica de America’s Frontline Doctors (AFLDS) y Front Line Covid-19 Critical Care Alliance (FLCCC), dos grupos que promueven la ivermectina.
«Hay muchos médicos que han sido víctimas de la desinformación», expuso Koltai.
«America’s Frontline Doctors y FLCCC son particularmente peligrosos en ese sentido. Su tipo de desinformación es realmente poderoso, porque conocen el idioma de la comunidad médica. A menudo veo que sus cosas terminan en manos de los médicos», agregó.
Los médicos aprovecharon la creciente popularidad de la ivermectina
La popularidad de la ivermectina se debe, en gran parte, a dos hombres: el doctor Pierre Kory, exespecialista en cuidados intensivos de la Universidad de Wisconsin, y el doctor Paul Marik, exjefe de cuidados intensivos de la Escuela de Medicina de Virginia del Este.
El dúo formó la FLCCC en abril de 2020, junto con otros seis médicos y dos experiodistas.
En octubre de 2020, el grupo afirmó que la ivermectina demostró una «profunda actividad» contra el Covid-19.
Kory señaló que la ivermectina era efectivamente una «droga milagrosa» ante un comité del Senado en diciembre de 2020.
Luego, en junio de 2021, elogió los beneficios de la ivermectina en el popular podcast de Joe Rogan.
(Rogan anunció más tarde que tomó ivermectina luego de su propio diagnóstico de Covid-19).
Tanto Kory como Marik también han escrito sus propias reseñas sobre la investigación de la ivermectina, que aparecen en el sitio web de la FLCCC. La organización a menudo señala estudios que han sido desacreditados, retirados o no han sido revisados por pares.
«Hay muchas maneras de manipular la ciencia para que parezca más legítima», agregó Koltai. «Esta es una táctica común que ocurre dentro de las páginas y grupos antivacunas. Les gusta ser selectivos con los componentes de un artículo de investigación. Incluso llaman a algo un artículo de investigación cuando tal vez sea solo una carta al editor».
Kory rechazó esa afirmación.
«Hemos estado en la cima de nuestro campo, así que lanzar repentinamente el término desinformación es absolutamente risible», dijo a Insider, y agregó: «Lo que han seleccionado [ustedes] son datos que muestran que [la ivermectina] no funciona».
Desinformación ante el Covid
Estimó que miles de médicos ahora recetan ivermectina en Estados Unidos Si bien Insider no pudo verificar esta estadística, el sitio web de FLCCC enumera a casi 430 médicos que respaldan sus protocolos de tratamiento de Covid-19, que incluyen ivermectina.
America’s Frontline Doctors utiliza tácticas similares para anunciar los supuestos beneficios de la ivermectina.
La organización fue formada en julio de 2020 como parte de Free Speech Foundation, una organización sin fines de lucro de Arizona respaldada por Tea Party Patriots (un grupo pro-Trump que figura en el sitio web de March to Save America, el mitin pro-Trump que precedió al asalto del Capitolio estadounidense el 6 de enero de 2021).
En diciembre de 2020, la fundadora de AFLDS, la médica californiana Simone Gold, promocionó la ivermectina en la conservadora Daystar Television Network.
«Hemos sabido que la ivermectina funciona contra el Covid-19 desde hace meses y meses», dijo Gold. «Simplemente no hablamos de eso porque sabemos que la prensa se enterará y comenzará a decir ‘no’».
Ni Gold ni AFLDS respondieron a la solicitud de comentarios de Insider.
Los médicos no son inmunes a estos argumentos, puntualizó Koltai.
«Es muy fácil caer en la desinformación que existe», dijo, y agregó: «Le sucede a los expertos. No solo le sucede a alguien sin educación».
La politización de la ivermectina «se ha extendido a la práctica de los médicos», dijo a Insider el doctor Johan Bester, director de bioética de la Facultad de Medicina de Las Vegas de la Universidad de Nevada. «Los médicos también son personas».
¿Por qué un médico prescribió más de 100 recetas de ivermectina?
Para ciertos grupos, promover la ivermectina puede ser lucrativo. AFLDS remite a las personas a un sitio de medicina a través de internet donde los pacientes gastan millones de dólares en recetas de medicamentos como la ivermectina, según datos hackeados obtenidos por The Intercept el año pasado.
La FLCCC también solicita donaciones a través de su sitio web y solía vender camisetas, tazas y cangureras de ivermectina en línea.
Pero esas ganancias financieras generalmente no llegan a los médicos, dijo a Insider la doctora Nora Becker, profesora asistente de la Universidad de Michigan.
«No creo que haya un fuerte incentivo financiero para que los médicos receten ivermectina en lugar de otra cosa», precisó.
En cambio, la ivermectina apela al deseo de una solución rápida: es relativamente barata (alrededor de 30 a 40 dólares por receta para personas con seguro). Aunque las dosis altas pueden ser tóxicas, presenta un riesgo de seguridad mínimo cuando se receta en cantidades adecuadas.
«Puede que haya algunos que solo escuchen el rumor de que la ivermectina tal vez ayuda y luego piensen: “Bueno, ¿qué puedo perder? Intentémoslo”», mencionó Bester.
El doctor Cliff Porter, fundador del servicio de atención primaria basado en membresía Texas Direct Medical Care, destacó que una vez cayó en ese campo.
Porter se enfrentó con la investigación de la ivermectina al principio de la pandemia y pensó que era prometedora, afirmó, por lo que recetó el medicamento a más de 100 pacientes con Covid-19.
«Al principio, cuando los datos parecían buenos, pensé: “Este podría ser un muy buen puente hacia las vacunas para las personas (en) mayor riesgo”», dijo Porter a Insider, y agregó: «Parecía una buena idea, así que entré en el sitio web de FLCCC como alguien que lo recetaría».
Esto fue lo que ocurrió después
Las noticias sobre el potencial de la ivermectina como tratamiento para el Covid-19 comenzaron a circular en la primavera de 2020, luego de que un estudio de laboratorio mostrara que la ivermectina impedía que el coronavirus se replicara en cultivos celulares.
Estudios preliminares de 2020 también sugirieron que la ivermectina podría reducir las tasas de mortalidad por Covid-19, pero los estudios no pasaron la prueba científica de la revisión por pares.
«Hubo grandes problemas con esos estudios que, si se analizan más de cerca, muestran que realmente no hay indicios de que a las personas que toman ivermectina les vaya mejor que a las personas que no toman ivermectina», expuso Bester.
Al mismo tiempo, los estudios verosímiles sobre la ivermectina se quedaron rezagados.
Porter dijo que le preocupaba que, si esperaba que la ivermectina se sometiera a un ensayo controlado aleatorio, la regla de oro para evaluar tratamientos, los pacientes podrían morir en la espera.
Con el tiempo, agregó, notó que el medicamento no ofrecía muchos beneficios. Dejó de recetar ivermectina después de que la variante Delta de Covid se volvió dominante el año pasado y, en su lugar, comenzó a recetar anticuerpos monoclonales, entre otros tratamientos.
FLCCC, por otro lado, ahora está animando a los médicos a recetar dosis más altas de ivermectina.
«Con las variantes posteriores, las cargas virales han aumentado considerablemente», declaró Kory a Insider. «Por ejemplo, (con la) Delta, nos dimos cuenta de que teníamos que aumentar la dosis».
Porter indicó que no estaba de acuerdo con que la organización «abogara por dosis cada vez más altas para las que no teníamos datos de seguridad».
Política o ego pueden obligar a los médicos a recetar ivermectina
La ivermectina también atrae a los escépticos de las vacunas o a aquellos que desconfían de las recomendaciones del gobierno, posiciones más comunes entre los conservadores en Estados Unidos.
«Se ha convertido en el medicamento favorito en la opinión de aquellos que son escépticos de las cosas que realmente han demostrado que funcionan», aseveró Bester.
El doctor Benjamin Marble, un exmédico de urgencias que dirige un sitio de medicina a través de internet, estimó que personalmente ha recetado ivermectina al menos 10,000 veces. Su sitio ha prescrito más de 100,000 recetas de este medicamento, comentó a USA Today.
Marble llamó a las vacunas contra el Covid-19 «mala medicina» y acusó a la FDA de seguir «ciencia falsa», a pesar de la amplia evidencia científica que muestra que las vacunas protegen contra la hospitalización y la muerte.
Kory, sin embargo, se resistió a caracterizar a la ivermectina como un medicamento de «derecha».
«El lado derecho del espectro está más dispuesto a desafiar la ortodoxia proveniente de las agencias (federales), por lo que se presenta como algo de derecha y es simplemente estúpido», expuso. «No tiene nada que ver con la política».
Para otros médicos, recetar ivermectina es una misión altruista
«Realmente nos resulta atractivo el científico arriesgado que hace el gran descubrimiento, que lucha contra el hombre, que está siendo silenciado», describió Koltai.
El doctor James Johnston, un médico que trabaja en medicina familiar y atención de urgencia en Carolina del Norte, dio a conocer que trata entre 10 y 60 pacientes por día con ivermectina.
Él cree que está salvando vidas. Trata de surtir las recetas dentro de las 24 a 48 horas, una demanda que a menudo requiere que se despierte a las 4:00 horas.
«Soy médico y un hombre de familia. Quiero sentarme en el portón, beber una taza de té, apagar mi teléfono y ver a mis hijos andar en bicicleta, sabiendo que estoy ayudando a la gente lo mejor que puedo. Pero ahora, cuando miro a nuestro país, veo un desastre creado por el gobierno y, sí, me molesta», explicó Johnston.
Él cree tanto en ese medicamento, agregó, que está dispuesto a abrirse al escrutinio profesional.
La semana pasada, una doctora de Pensilvania fue despedida de su puesto en Tower Health Medical Group por recetar ivermectina a los pacientes con Covid.
Johnston dijo que un médico de urgencias se quejó recientemente de que recetaba ivermectina; esto le obligó a tener una conversación «humillante» con su jefe.
«Vivo con miedo de que alguien se queje ante la Junta (Médica de Carolina del Norte)», dijo.
Compañías de seguros pueden rechazar las prescripciones desenfrenadas de ivermectina
Dado que la ivermectina es un medicamento aprobado por la FDA, existe poca supervisión para limitar el uso en la etiqueta para el Covid-19.
Como dijo Bester, «No hay nadie que se asome al hombro del médico para decirle: ‘Oye, ¿cuál es la razón por la que estás recetando esto?’».
Cuando me comuniqué con mi red de salud local, Hoag, para denunciar al médico que me ofreció ivermectina, la red se negó a decir si sus médicos enfrentaban repercusiones por recetar el medicamento.
«La ivermectina no forma parte de nuestra práctica general en el tratamiento de pacientes con Covid-19. Hoag sigue las pautas de la NIH y de la IDSA», me dijo un portavoz de la firma.
Esto refiriéndose a los Institutos Nacionales de Salud y a la Sociedad de Enfermedades Infecciosas de América.
«Les damos a los médicos mucha libertad para usar su propio juicio clínico», dijo Becker.
«Existe una fuerte expectativa profesional de que los médicos brinden lo que llamamos atención basada en la evidencia. Pero, en última instancia, esa decisión se toma de forma individual».
Los médicos tampoco están obligados a mantenerse al día con las últimas investigaciones científicas, por lo que es común que prescriban tratamientos obsoletos o ineficaces.
¿Cómo las aseguradoras pueden frenar el uso de ivermectina?
Sin embargo, existe al menos un mecanismo regulador para disuadir a los médicos de recetar ivermectina. El equipo de investigación de Becker sugiere que las compañías de seguros deberían exigir la autorización previa del medicamento.
Esto significa que los médicos tendrían que obtener la aprobación del seguro para cubrir el costo de la ivermectina, sin importar cómo pretendan usarla.
Blue Cross Blue Shield of Michigan instituyó esta política en octubre de 2021 «para desalentar el uso no autorizado» de ivermectina para el Covid-19.
«Cuando las compañías de seguros lo cubren, ese costo lo subsidian todos los que están inscritos en esa compañía de seguros. Cuando se trata de Medicare, los contribuyentes», dijo Becker.
«Nosotros no deberíamos estar subsidiando este tratamiento, ya que no hay evidencia que lo sustente».
Con más obstáculos regulatorios establecidos, menos pacientes tendrían que cuestionar las recomendaciones de sus médicos.
Como periodista científico, tenía suficiente conocimiento profesional como para rechazar mi receta de ivermectina, pero es posible que no todos los estadounidenses sepan hacerlo.
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