• Debido a la pandemia por coronavirus, las personas en confinamiento optaron por recurrir a las compras y transacciones en línea y dejaron del lado el dinero en efectivo.
  • El virus se está convirtiendo en el propulsor de nuevos hábitos de consumo y formas de pago.
  • Las razones más populares para comprar en línea durante la pandemia se encuentran no salir de casa y evitar conglomeraciones en tiendas física.
  • Al terminar el confinamiento por el Covid-19, las personas habrán migrado de lo físico a los digital.

Desde que inició la pandemia por Covid-19 en el mundo, los hábitos de la humanidad cambiaron por completo. Para evitar contagios, millones de personas se resguardaron en sus hogares y cumplieron con las medidas de distanciamiento social.

Esta situación generó que la manera en la que consumen y la forma en que pagan se modificara por completo, basándose generalmente en compras en línea y solo muy pocas en establecimientos. De acuerdo con Asociación Mexicana de Venta Online (AMVO) dentro de las razones más populares para comprar online durante la pandemia se encuentran no salir de casa y evitar conglomeraciones en tiendas física.

Es así que el coronavirus se convirtió en un el propulsor de nuevos hábitos de consumo y en especial en las formas de pago, incluso en aquellas personas que son muy arraigadas al dinero en forma de papel o monedas.  

El billete era el rey

Durante mucho tiempo se pensó que el efectivo era la forma más simple y menos costosa para realizar transacciones. Según el estudio Reducción de uso de efectivo e inclusión financiera del Instituto Mexicano para la Competitividad, actualmente los beneficios relativos del efectivo se han reducido; sin embargo, antes de la pandemia el efectivo seguía siendo el principal medio de pago en las transacciones a nivel mundial.

Antes del coronavirus, solo en Suecia, Dinamarca, Corea del Sur y China los medios de pagos electrónicos superaban ampliamente al tradicional en papel. Con la llegada del virus, el ‘dinero electrónico’ en el resto del mundo recibió un impulso que podría posicionarlo como el líder.

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El coronavirus impulsó el crecimiento de los pagos digitales y el final del dinero en efectivo

En México, la poca bancarización sumada a que más del 55% de la población activa pertenece a la economía informal, dificultaban el cambio a la digitalización, dice en entrevista para Business Insider México, Cristian Huertas, Country manager Bnext, aplicación líder de medios de pago en México.

“Estamos en un momento único en la historia en la cual podemos aprovechar para que se acelere la opción de pagos digitales no sólo en México, si no en el mundo. Si queremos hacer una lectura positiva a la coyuntura actual es que la vida se va a automatizar y digitalizar mucho más rápido de lo que pensábamos apenas tres meses atrás”, dijo.

Ya sea por medidas de higiene y cuidado, la crisis sanitaria ha hecho que las personas sean reacias a tocar los billetes y ha reducido las oportunidades para gastarlos. Sumado al cierre de comercios que ha disminuido drásticamente la cantidad de dinero físico, la transición del efectivo a lo digital se ha acelerado.

La transición del dinero físico al digital

En México, como en muchos países del mundo, las instituciones bancarias y financieras llevan años discutiendo y buscando alternativas al predominante manejo de efectivo, dice Cristian Huertas.

Los argumentos para reducir su uso se basaban principalmente en la lucha contra la corrupción, el dinero de procedencia ilegal, el peligro de traer dinero en efectivo y especialmente la comodidad de las transacciones, entre muchos otros. Sin embargo, en 2020 se le debe sumar un factor predominante: el dinero como una posible fuente de contagio de enfermedades.

“Los billetes transmiten enfermedades, eso es una realidad y dada la coyuntura, vamos a ver de manera acelerada como se genera el crecimiento de los pagos digitales en México y en muchos países de Latinoamérica”, señala.

La crisis sanitaria ha provocado la rápida adopción de pagos digitales, que se mantendrán incluso concluidas las fases de confinamiento, prevé el experto.

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Todos tendrán que subirse a la tendencia

Los pagos en línea se han multiplicado por las compras online y las entregas a domicilio; las tiendas invitan a pagar con tarjeta y el propio usuario se encarga de introducirla y hacer la operación; hasta en los tianguis y demás puestos callejeros, se comienzan a ver más terminales de pago electrónico, como medida para atraer más clientes y a la vez protegerse de los contaminantes que puedan tener los billetes.

“Yo veo en los pequeños comercios a un sector que ahorita está siendo muy golpeado, pero que se a va dinamizar de una manera muy agresiva en este mundo de los pagos digitales. Sobre todo impulsando el pago con tarjeta, o con estos dispositivos que hacen los pagos de manera muy sencilla, conectando dispositivos al celular con el que les permite aceptar pagos con tarjeta”, indica el Country manager de Bnext México.

Ni las proyecciones más optimistas imaginaban una penetración de los pagos en línea tan acelerada durante 2020, y todo se debe a la pandemia global asegura el experto.

“Yo creo que redujo la brecha en unos 5 años, porque hay gente que tenía tarjeta y no la usaba, o que decía voy al cajero y compro. Pero ahora es compras en línea o compras en línea y creo que mucha gente se está dando cuenta que es más padre comprar el super en internet y que te lo lleven a tu casa y que no tengas que salir. Además en México por ejemplo, tenemos la posibilidad de pagar los servicios a través de una aplicación y de manera muy cómoda, creo que la situación del covid nos ha mostrado eso”, dice Cristian Huertas.

Una oportunidad de oro para las fintech

Contar con métodos de pago digitales e innovadores es esencial, sobre todo si consideramos que de acuerdo con el Informe Adyen de Retail 2019, más de la mitad de los compradores creen que la tecnología es esencial en su día a día.

Esto abre una oportunidad de oro para que las fintech e instituciones bancarias aporten muchas más opciones de pago digital y aprovechen el impulso generado por la pandemia.

“Es en la economía informal, donde todos tenemos un reto y una gran oportunidad, porque apenas alrededor de 40 millones de mexicanos tienen cuenta bancaria, pero casi toda la población adulta tiene un smartphone. Ciertos habitos del consumidor van a cambiar y a nosotros como medios de pago en línea nos favorece”, comenta el analista de Bnext México.

Esta y otras aplicaciones de servicios financieros buscan convertirse en la mejor alternativa a la banca tradicional, promoviendo los pagos sin contacto y la renuncia al dinero en efectivo.

“Esto es especialmente positivo para los mismos dueños de los puestos ambulantes, que también aumentarán su seguridad si pueden llevar sus ganancias del día a una cuenta electrónica de neobanco y hacer pagos desde allí, tanto desde la app como con la tarjeta física”, dice.

Sin duda, la emergencia sanitaria se ha convertido además en un catalizador para la transición del dinero en efectivo al digital; sin embargo, Huertas recuerda que las personas deberan transformarse en agentes de cambio

“Es la parte fundamental y más complicada de todo proceso nuevo y en México se necesitan millones de personas para modificar una costumbre tan arraigada como el uso de dinero en efectivo. Si como usuarios comenzamos a utilizar y exigir pagos electrónicos, cada vez más vendedores se sentirán obligados a ofrecerlos porque representarán beneficios también para ellos”.

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