- Dre DiLorenzo fue bailarina y compitió hasta los 18 años.
- Se tomó un descanso de la danza durante 10 años, pero se volvió a enamorar de ella con la pandemia del Covid-19.
- A los 29 años, se convirtió en porrista de los Dolphins de Miami y se dio cuenta de que nunca se es demasiado grande para perseguir sueños.
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Este artículo se basa en una conversación con Dre DiLorenzo, una porrista y profesora de baile de los Dolphins, que vive en Miami y administra la popular cuenta de TikTok @dredilo. Fue editada por su extensión y para dar una mayor claridad.
Me convertí en porristade la NFL cuando tenía 29 años, 10 años después de que dejé de bailar. Ahora tengo 32 y acabo de terminar de ser co-capitana de mi tercera temporada con los Dolphins de Miami.
Quiero demostrar que puedes volver a tus pasiones o comenzar una nueva a cualquier edad y tener éxito. Mucha gente tiene miedo de lo que pensarán los demás. Otros piensan que son demasiado mayores y deben centrarse en sus carreras corporativas.
Sin embargo, no todo es lineal. Todo el mundo llega del punto A al punto B de su vida de diferentes maneras.
Así es como yo lo hice.
Una infancia inmersa en el competitivo mundo de la danza
Mi mamá me inscribió en danza cuando tenía tres años y comencé a competir a los seis. Rápidamente comencé a ganar el primer lugar en mis categorías en solitario y arrasar en la competencia.
Cuando tenía 11 años, mi mamá me llevó a mi primera gran audición y conseguí el papel de Clara en Radio City Christmas Spectacular. Esa fue mi primera experiencia bailando en un concierto profesional. Aprender un show completo de Broadway a esa edad me inculcó disciplina y una ética de trabajo duro.
A partir de ahí, continué mi educación en el New Jersey Ballet y el American Ballet Theatre de Nueva York. También fui una de los 22 bailarines de todo el mundo aceptados en el programa de verano de Juilliard. Pude vivir en el Lincoln Center: un sueño hecho realidad.
No obstante, me tomé un descanso de la danza cuando cumplí 18 años. Decidí obtener mi título universitario y luego me mudé a la ciudad de Nueva York para concentrarme en mi carrera profesional.
Com alguien que estuvo inmersa en algo tan intenso a una edad tan temprana, cuando tienes la oportunidad de liberarte y ver qué más hay ahí fuera, te das cuenta de que hay un mundo de oportunidades.
Te da tiempo para disfrutar de otras pasiones.
El covid-19 me hizo volver a bailar
Exploré mi amor por la música y decidí que quería entrar en esa industria. Conseguí el trabajo de mis sueños en Resident Advisor y fui a festivales de música de todo el mundo.
Mirando hacia atrás, estoy agradecido de haber tenido experiencias tan maravillosas. No obstante, seguir una carrera corporativa en Nueva York es una tarea difícil, especialmente cuando tienes 20 años.
Estaba trabajando muy duro para perseguir mis objetivos profesionales y los estaba logrando, pero todavía me faltaba algo.
@dredilo Hope this serves as your message to get back into the things you love! U CAN DO IT! 💕 #ballettok #fyp #balletclass #pointeshoes #ballerina #adultballet #danceprogress ♬ Waltz of the Flowers – The Nutcracker – Pyotr Ilyich Tchaikovsky
No tuve la oportunidad de pensar en el baile hasta que llegó la pandemia del covid-19. Me despidieron de mi empresa y me mudé de regreso a casa. Todo se paralizó, pero tuve la oportunidad de volver a soñar con bailar.
Con todo este tiempo extra, comencé a priorizar mi salud nuevamente y a hacer ejercicio. Alcancé mi mejor condición física. Seguía a coreógrafos y estudios de danza populares en las redes sociales, que comenzaron a ofrecer clases gratuitas durante el confinamiento.
Las clases en línea fueron geniales para mí porque podía entrenar desde la comodidad de mi hogar y moverme a mi propio ritmo mientras recuperaba mi confianza con la coreografía.
Comencé a tomar estas clases y rápidamente me di cuenta: “Vaya, todavía lo tengo”.
Del ballet a una porrista de la NFL
Las porristas de la NFL estaban realizando audiciones remotas, lo cual fue un gran problema. Antes del covid-19, todas estas audiciones eran presenciales.
En ese escenario, habría tenido que elegir el equipo para el que quería audicionar, comprar un boleto de avión, conseguir una habitación de hotel y rentar un auto. Ahora, los equipos aceptaban audiciones virtuales por primera vez.
Decidí que quería hacer una audición para un equipo de baile y, con este nuevo objetivo en mente, entrené todos los días para convertirme en la mejor versión de mí misma.
Tenía un calendario con múltiples objetivos escritos que quería lograr, así que tenía mi mejor oportunidad de formar parte de un equipo.
Seguí diferentes entrenamientos cada día de la semana por la mañana. Por la noche tomaba clases virtuales. Soy muy afortunada de que el ballet sea la base de todos los estilos de baile, pero la técnica clásica es muy, muy diferente del baile en equipo y del estilo una porrista.
Una porrista de la NFL necesita un conjunto diverso de habilidades porque interpreta diferentes géneros (hip-hop, latín, pom, jazz, técnica), así que me aseguré de sumergirme en cada género.
Envié videos a algunos equipos de porristas de la NFL y no podía creerlo cuando llegué a la final de algunos de ellos. No obstante, tuve que limitarlo y centrarme solo en uno.
Me decidí por los Dolphins de Miami porque estaba muy impresionada con su programa y parecía que mis habilidades se adaptaban mejor a su equipo.
Llegué al top 15 de la final, pero los Dolphins decidieron no seguir adelante con un nuevo equipo de porristas por el covid-19. Dijeron que querían que hiciéramos una audición el próximo año, así que decidí volar a Miami en 2021 para el proceso de audición de dos o tres semanas.
Pasé directamente a las semifinales porque ya había quedado entre las 15 primeras un año antes. Nos enseñaron una pieza de coreografía para presentar en la audición final y yo también tuve que coreografiar una rutina en solitario.
No había hecho un solo en 11 años, así que hacerlo para las porristas de los Dolphins me parecía una locura. Eran nervios que no había experimentado en mucho tiempo, pero de los buenos.
Quería hacer algo diferente y ser fiel a mí misma, así que decidí hacer puntas en solitario. Creo que esa es una gran razón por la que entré al equipo.
Cuando anunciaron el nuevo equipo y escuché mi nombre, comencé a llorar mientras subía al escenario. No podía creer que tuviera algo que mostrar por todo mi arduo trabajo y que estaría haciendo realidad mi sueño.
Una bailarina y porrista de tiempo completo
Tomar un descanso tan largo de la danza me dio una mayor apreciación por esta forma de arte y otros estilos. Tuve una mentalidad más abierta a otras oportunidades y me di cuenta de que bailar profesionalmente no tiene por qué ser en Broadway. Puede ser cualquier cosa que te traiga alegría.
No hay muchos bailarines de ballet con formación clásica en este espacio, y no pude encontrar ninguna bailarina que hubiera atravesado un cambio similar.
Por eso comencé a compartir mi historia en TikTok. Quería mostrarle a la gente que puedes volver a dedicarte a un pasatiempo y seguir teniendo éxito con él. Quería demostrar que, con trabajo duro y perseverancia, puedes hacer lo que quieras en esta vida.
@dredilo Let’s bring this energy into 2023! 💕 #nflcheerleader #fyp #miamidolphinscheerleaders #2023goals #procheer #miamidolphins #nflplayoffs2023 ♬ original sound – Boiler Room
La respuesta en las redes sociales ha sido una locura. Mucha gente me dijo: “Esta es la inspiración que necesitaba” o “Pensé que era demasiado mayor para volver a bailar, pero tú me inspiraste a hacer una audición para equipos de la NFL este año”.
Nunca pensé que influenciaría tanto a la gente, pero sabía que era identificable con mi historia. Quería ser esa pionera al que otras bailarinas admiraran.
La danza vuelve a ser parte de mi vida de tiempo completo. Cuando me convertí en porrista de los Dolphins aún trabajaba de 9 a.m. a 5 p.m. en la industria de la música. Tenemos prácticas tres días a la semana durante la temporada, de 6:30 p.m. a 10 p.m., así que trabajaba y luego iba directamente a practicar.
Los días que hay partido son maratones de cuatro horas. Hacemos una rutina previa al juego, rutinas en la zona de anotación en el primer y tercer cuarto y actuaciones en el medio tiempo.
Ahora es temporada baja y acabo de dar un salto de fe: soy bailarina independiente y entrenadora de baile.
Actualmente realizo entrenamientos privados en línea para equipos de baile profesionales y audiciones para porristas de la NFL y la NBA. También doy clases de ballet, clases magistrales e intensivos.
He vuelto a donde se supone que debo estar. Y me siento más motivada que nunca para continuar donde lo dejé cuando tenía 18 años.
