• Hay algunas maneras en las que puedes mantener a tu mascota segura y cómoda cómodas durante los meses de calor.
  • Los dueños de mascotas no deben dejar a sus animales solos cerca de albercas, campamentos o rutas de senderismo.
  • Nunca se debe poner al perro un repelente de insectos o un protector solar destinado a los humanos.
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En esta temporada de verano y ahora que han habido olas de calor en todo el mundo, es importante saber qué precauciones tomar a la hora de cuidar a tu perro.

Por ello, aquí hay algunos aspectos a considerar, sobre todo si piensas salir de paseo o donde vives es muy cálido.

1. No le pongas a tu perro protector solar o repelente de insectos para humanos

“No apliques a tu mascota ningún producto de protección solar o repelente de insectos que no esté etiquetado específicamente para su uso en animales”, dijo Lori Bierbrier, directora médica de medicina comunitaria de ASPCA.

Sí, es cierto que la mayoría de los mamíferos son susceptibles de sufrir quemaduras solares y picaduras de insectos. Pero eso no significa que debas cubrir a tu perro con lo mismo que usas para ti. Muchos protectores solares y repelentes de insectos contienen ingredientes que son perjudiciales si se ingieren.

Recuerda que tu mascota no entiende qué son estos productos ni por qué se utilizan. Si decides cubrir su piel con ellos, es muy probable que quieran investigar usando su sentido del olfato o del gusto.

“La ingestión de productos de protección solar puede provocar babeo, vómitos, diarrea, sed excesiva y letargo, mientras que el uso indebido de repelentes de insectos que contienen DEET puede provocar problemas neurológicos”, explicó Bierbrier.

En su lugar, busca un protector solar o un repelente de insectos diseñado específicamente para uso animal. Ten en cuenta que algunos sprays que funcionan para los perros pueden ser tóxicos para los gatos.

Una vez que encuentres el producto adecuado, lee las instrucciones y pruébalo en una pequeña porción de la piel de tu mascota antes de aplicarlo. Esto te permitirá comprobar si hay reacciones alérgicas.

Si te preocupa la salud de tu mascota con el calor, consulta a tu veterinario.

2. No lleves a tu perro a una aventura al aire libre sin llevar suficiente agua

Al igual que los humanos, las mascotas son susceptibles de deshidratarse si no beben suficiente agua.

Si vas a participar en actividades al aire libre, como una acampada, es imprescindible tener agua disponible para que tu mascota pueda beber. También puedes llevar un pequeño tupper para que tu perro beba.

A lo largo del día, los perros necesitan beber de 30 a 60 mililitros de agua por cada kilo de peso corporal que tengan. No esperes a que tu mascota parezca tener sed.

3. No ignores los signos de un golpe de calor en tu perro

El golpe de calor es una emergencia médica potencialmente mortal que se caracteriza por la incapacidad de enfriar la temperatura del cuerpo. Como los perros no tienen glándulas sudoríparas dispersas por el cuerpo como los humanos, regulan su temperatura mediante el jadeo.

En cambio, los gatos se mantienen frescos utilizando su propia saliva y lamiéndose el cuerpo.

Tanto perros como gatos, junto con los conejos, cobayas y otros roedores, son susceptibles de desarrollar un golpe de calor. Si no se trata, esta afección puede causar daños graves y potencialmente irreversibles en los órganos de tu mascota.

Algunos signos de insolación en los perros son las convulsiones, el estupor y un comportamiento similar al delirio. Los gatos pueden mostrar signos de malestar relacionado con el calor a través de un acicalamiento excesivo, debilidad o enrojecimiento de la lengua.

Si observas alguno de estos síntomas en tu mascota, llama inmediatamente a tu veterinario.

4. Si es posible, evita dar paseos durante las horas más calurosas del día

Si el suelo está demasiado caliente para tus propios pies descalzos, seguro que también lo está para las patas de tu perro.

Durante el día, el calor excesivo puede hacer que la temperatura de la banqueta alcance los dos dígitos. En algunos lugares se han registrado temperaturas en las aceras lo suficientemente altas como para causar quemaduras de segundo grado.

Además, ejercitar a tu mascota durante una ola de calor la pone en riesgo de desarrollar deshidratación e insolación.

Intenta pasear a tus mascotas durante la noche para minimizar estos peligros. Otra opción puede ser proporcionarles escarpines, aunque no todas pueden adaptarse a esta solución.

5. Evita sacar a tu perro al exterior durante largos periodos de tiempo cuando la temperatura sea alta

Para los perros, la exposición a entornos con altas temperaturas puede convertirse rápidamente en un problema grave y provocar un golpe de calor.

Recuerda que no pueden regular la temperatura de la misma manera que los humanos, por lo que es importante que limites su tiempo en ambientes extremadamente calurosos.

Esto significa que si vas a salir a trabajar considera la posibilidad de dejarlos al interior de tu casa. Si tiene que permanecer en el exterior, asegúrate de que tenga mucha sombra y agua.

6. No dejes sin vigilancia a tu perro cuando esté cerca de cuerpos de agua

Ten cuidado con dejar a tu perro sin supervisión cerca de albercas, especialmente en tu propio patio. No todos saben nadar por el mero hecho de ser animales, y una simple caída en la parte más profunda puede convertirse rápidamente en una tragedia si no estás cerca.

Si es la primera vez que tu perro se acerca al agua, ve introduciéndola poco a poco. Nunca tires a ningún animal contra su voluntad. No solo les asusta, sino que puede ser peligroso si no son buenos nadadores.

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