• La deuda de Pemex asciende a más de 2.2 billones de pesos, y el pago de las amortizaciones representa solo una fracción.
  • La petrolera continúa acumulando deuda debido a la caída en su producción, ingresos, un alto déficit y su pasivo laboral.
  • Autoridades financieras han catalogado la situación financiera de Pemex como uno de los riesgos que enfrenta México.

Este jueves 18 de marzo se celebró el día de la Expropiación Petrolera. Y el director general de Petróleos Mexicanos (Pemex), Octavio Romero Oropeza, aseguró que la administración de Andrés Manuel López Obrador (AMLO) absorberá las amortizaciones de la petrolera estatal.

Estos compromisos representarán más de 6,000 millones de dólares en 2021 equivalentes a cerca de 130,000 millones de pesos, precisó Romero durante la conmemoración de la nacionalización de esta industria. En el evento también se anunció el descubrimiento de un yacimiento con un potencial de 600 millones de barriles de petróleo crudo equivalente (bpce).

«El presidente de la República ofreció desde la campaña rescatar a Pemex y con acciones lo está demostrando», dijo Romero, a un lado del mandatario, Andrés Manuel López Obrador (AMLO).

La deuda de Pemex asciende a 113,200 millones de dólares —más de 2.2 billones de pesos— al cierre del cuarto trimestre de 2020, según el informe de la empresa productiva del Estado. No ha logrado disminuir este pasivo pese a las varias inyecciones de capital desde el gobierno federal para mejorar sus débiles finanzas.

Por su parte, AMLO aseguró, sin ofrecer otros datos, que la Secretaría de Hacienda seguirá reduciendo la carga de impuestos a Pemex. El mandatario agregó que durante su gobierno, que culmina a fines de 2024, se lograrán extraer más de 2 millones de barriles de petróleo diarios.

Actualmente Pemex ronda su mínimo histórico de extracción con 1.7 millones de barriles diarios. Esta cifra no ha remontado durante la actual administración, y es una tendencia que se arrastra del sexenio anterior.

El gobierno respalda deuda de Pemex a costa de su propia estabilidad

Esta cifra que asciende a casi 130,000 millones de pesos no es menor. Y se trata solo de las amortizaciones de una deuda financiera que asciende a más de 2.2 billones de pesos. Es decir, casi 11% del Producto Interno Bruto (PIB) del país, según el Centro Investigación Económica y Presupuestaria (CIEP).

Uno de los factores que ha propiciado este aumento en las obligaciones de la petrolera mexicana es que su producción cayó en 2020 a una tercera parte de lo registrado en 2010. Esto ha hecho que sus ingresos disminuyeran en casi en la misma proporción, así como su aportación al erario.

Asimismo, Pemex acumula déficits relacionados con una baja productividad y un alto pasivo laboral. De acuerdo con el Consejo de Estabilidad del Sistema Financiero (CESF) conformado por las autoridades financieras de México, Pemex es una de las contingencias financierascon más riesgo que enfrenta el país.

Con información de Reuters.

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