• Miedo, incertidumbre o simple evasión, son las principales causas de las conversaciones pendientes
  • Pero traerlas arrastrando invade tu mente y eso afecta tu desempeño –laboral y personal–
  • Estas 5 etapas te ayudarán a encontrar las notas adecuadas y afinar el diálogo para tener esas conversaciones.
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¿Cuántas conversaciones tienes pendientes? Podría decir que esa fue la obertura de mi primera conversación con Daniel, un ejecutivo que conocí hace unos años. Daniel era obstinado, muy talentoso y no dejaba espacio para improvisaciones, pero a pesar de su reputación como un líder de acción, era dueño de una orquesta de conversaciones pendientes que desafinaban la armonía de su equipo de trabajo.

Tanto en el campo laboral, como en el ámbito personal, la mayoría de los conflictos provienen de estas conversaciones que aplazamos más de lo necesario. Charlas pendientes que tal vez nunca tendrás ya sea por miedo, incertidumbre o simple evasión, pero que invaden tu mente como un mal sueño y se adueñan de la composición de tu obra.

Al igual que cualquier obra musical, una conversación pendiente es un proceso que involucra diversas etapas y cada una de ellas es esencial para crear una pieza completa y coherente.

Si en algo te pareces a Daniel, creyente de procesos y seguidor de guías de “How to”, la siguiente distribución en 5 etapas te ayudará a encontrar las notas adecuadas y afinar el diálogo para esas conversaciones.

Sin embargo, debes recordar que el proceso creativo es fluido.

Del mismo modo que un compositor musical no necesariamente sigue una secuencia lineal, tu proceso tampoco será en línea recta, a través de estas 5 etapas retrocederás y avanzarás a medida que perfeccionas y desarrollas tu visión.

5 etapas para afinar el diálogo

  • Sintonía Emocional: notas iniciales de la conversación

“Yo sé que hay diferencias entre nosotros y reconozco que no pensamos igual, pero veo eso como una oportunidad para aprender más de tu visión…”

Detrás de cada comportamiento existe una emoción. Antes de iniciar cualquier conversación, es vital reconocer y entender nuestras emociones y las del otro. Estar conscientes de nuestras propias emociones nos permite moderar nuestra respuesta y reacción. Asimismo, entender el estado emocional de nuestro interlocutor nos permite adaptar nuestro mensaje de una forma empática.

  • El compás de la ubicación: encuentra la armonía espacial

El entorno en el que eliges tener la conversación puede tener un profundo impacto en su desarrollo. Una sala de conferencias formal puede ser adecuada para discusiones estructuradas, mientras que un ambiente más relajado, como una cafetería, podría ayudar a dirigir conversaciones más personales. Por tanto, elegir el lugar se convierte en una etapa clave del éxito o fracaso de la conversación.

  • Notas de inspiración: desentrañando el motivo de la conversación

Motivo no significa finalidad, es esencial estar claro sobre el propósito que nos impulsa a tener esa conversación. Hacer un autoanálisis nos permitirá centrarnos en los puntos principales y evitar desvíos innecesarios. Antes de zambullirte en la partitura de esa conversación, hazte esta pregunta:

¿Por qué es esencial tener esta discusión?

«No me gusto como me hablaste». «Siento que no estoy explotando todo mi potencial». «Mi equipo de trabajo no está cumpliendo con las fechas de entrega».

Si no puedes identificar un motivo claro, tal vez necesites reflexionar más sobre tus intenciones y no sea el momento de entonar esta conversación.

  • Armonía de objetivos: guiando la composición hacia su destino

¿Qué deseas lograr con la conversación? Este objetivo te dará un camino claro a seguir y te ayudará a mantenerte enfocado en lo que es esencial.

«Deseo que nuestra relación mejore». «Un cambio de equipo me ayudaría continuar creciendo profesionalmente». «Necesito unas vacaciones». «Considero que un aumento de sueldo lograría motivar al equipo a cumplir los objetivos».

  • Acorde final: orquestando la resolución de acuerdos

Una vez que la conversación ha concluido, es vital confirmar los acuerdos y entendimientos a los que hemos llegado. Esto elimina malentendidos y fortalece el compromiso de ambas partes. En mi experiencia, la mejor manera de confirmar una charla es por escrito, al igual que una partitura en la composición musical, no hay que dejar nada en el aire, escribe hasta los silencios.


Estas etapas son como las notas que compusieron la canción de Daniel; cada una fue esencial para que él llevará la conversación a su pleno potencial y lograra la sinfonía de su equipo. Incorporarlas en la preparación de tus propias conversaciones pendientes te ayudará a enfrentarlas con confianza. Sin embargo, de manera individual no son nada, y es la melodía lo que te ayudará a alcanzar esa tan anhelada sinfonía.

Elementos que componen la melodía de la conversación

  • Lenguaje positivo. Las palabras tienen poder. Usar un lenguaje positivo puede influir en la percepción y el resultado de una conversación. Abordar la conversación con una mentalidad positiva puede cambiar su tono y dirección. En lugar de centrarte en lo que salió mal, busca soluciones y maneras de mejorar.
  • Escucha activa. Escuchar no es simplemente oír. Practicar la escucha activa implica estar completamente presente en la conversación, buscando entender realmente lo que la otra persona está comunicando sin parafrasear.
  • Notas que sorprenden. Debes estar abierto a diferentes resultados, por más que prepares una conversación, no siempre se desarrollará como esperas. Estar abierto a diferentes direcciones y resultados es esencial. Estas sorpresas pueden ofrecer oportunidades para el aprendizaje y el crecimiento.

Daniel aprendió de este concepto de composicón musical, que cada conversación pendiente es una nota esencial en la composición de nuestra vida, y que la melodía de una conversación es el hilo que une cada nota en una sinfonía de acuerdos y entendimientos.

En sintonía con la vida, estos consejos se extienden a nuestras relaciones personales; ya sea en tu rol de pareja, como amigo o al interactuar con tus propios hijos, procrastinar estas conversaciones es retener soluciones y potencialmente dañar la relación a largo plazo.

Como líderes y profesionales, es nuestra responsabilidad abordar estas conversaciones pendientes con empatía, claridad y determinación. Enfrenta la conversación con valentía, priorizando los beneficios a futuro sobre la incomodidad inmediata; incorporar estas prácticas puede tener un impacto significativo en la calidad de tus conexiones.

* Filippo Bonani es consultor, consejero y creyente en PYMES con más de 20 años de experiencia. Su enfoque de «Compositor Empresarial» se centra en escuchar los desafíos y necesidades de las PYMES, interpretar sus objetivos y componer estrategias que impulsen su crecimiento.

Las opiniones publicadas en esta columna son responsabilidad del autor y no representan ninguna posición por parte de Business Insider México.

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