- Bnext reveló que el uso de alternativas digitales por parte de las mexicanas para gestionar su vida financiera aumentó 18% a lo largo de 2020.
- La baja inclusión de las mujeres conlleva a que no se les considere en otorgamiento de crédito por parte de las instituciones financieras, explica CEEY.
- Ahora 13% de las mexicanas realiza pagos online para distintos servicios como agua, luz, internet, transporte y diversas plataformas digitales.
La brecha de género también impacta en el área financiera de las mujeres. Un menor salario o participar de manera intermitente en empleos formales reduce sus posibilidades de ahorrar o invertir; sin embargo, la tecnología financiera puede convertirse en un aliado para afrontar este problema.
De acuerdo con Bnext, marketplace digital de servicios financieros, el uso de alternativas digitales por parte de las mexicanas para gestionar su vida financiera aumentó 18% a lo largo de 2020.
Lo que ha contribuido a cerrar la brecha de género en cuanto al acceso a productos financieros básicos en 5% durante el último año, según datos del Panorama Anual de Inclusión Financiera.
Las mujeres han trabajado para cambiar el ecosistema financiero. El Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), reveló que tan solo la tenencia de una cuenta de ahorro por parte de las mexicanas ha pasado de 19% al 42% en los últimos seis años; lo que les ha permitido aumentar su participación en la inversión o el emprendimiento.
“Estos cambios han venido acompañados por la digitalización de diferentes servicios, lo que ha facilitado equilibrar la balanza; y democratizar cada vez más el acceso a productos e instrumentos de mejor calidad”, aseguró Cristian Huertas, country manager de Bnext.
Inclusión financiera de las mujeres
De acuerdo con el reporte “El Reporte de Inclusión Financiera de las Mujeres para la Movilidad Social”, realizado por el Centro de Estudios Espinosa Yglesias (CEEY), la baja inclusión de las mujeres conlleva a que no se les considere en otorgamiento de crédito. Lo cual genera un círculo vicioso, porque no tienen activos a su nombre, y, al final, no tienen colateral para acceder a créditos.
Ello sin considerar, que en muchas ocasiones no suelen tener independencia económica y, con frecuencia, tampoco son libres de tomar decisiones financieras dentro de sus hogares.
Estas desigualdades se ven acentuadas por el hecho mismo de que las mujeres reciben menos educación que sus pares hombres; y el ámbito financiero no es la excepción, explica Enrique Díaz-Infante Chapa, director en Sector Financiero y Seguridad Social del CEEY.
Tecnología para la inclusión
El estudio realizado por Bnext, calculó que las usuarias tienen un gasto promedio de 5,900 pesos; lo que les ha dado mayor flexibilidad para acceder a herramientas como cuentas de inversión a plazos.
Cristian Huertas considera que la digitalización no ha dejado de ser un gran impulso para democratizar el acceso a más y mejores instrumentos financieros, como tarjetas digitales e incluso tecnología cashless.
De acuerdo con ello, 13% de las mexicanas ahora realiza pagos online para distintos servicios como agua, luz, internet, transporte y diversas plataformas digitales.
Por otro lado, la tecnología también ha permitido a más mujeres diversificar sus ahorros y maximizar sus inversiones. Un ejemplo es Bnext, donde pueden acceder a préstamos, fondos de inversión e incluso seguros de auto y consultas médicas.
Durante los últimos 10 años, el porcentaje de mujeres que hicieron uso de tecnología móvil para ahorrar o invertir su dinero pasó del 4% al 11%, de acuerdo con cifras de la ONU.
La tecnología financiera para mejores oportunidades
La transformación digital sin duda ha posicionado la equidad de género como un factor clave en el desarrollo económico. Por tanto, será crucial que los esfuerzos de inclusión financiera maximicen las oportunidades de crecimiento para la sociedad, establece Bnext.
De hecho, el estudio del CEEY recomienda aprovechar las fintech; pues se pueden convertir en aliados naturales para reducir la brecha de género a través de la tecnología financiera.
Agrega que para avanzar en el uso de la tecnología financiera se debe mejorar los mecanismos de interconectividad a través de la transmisión de señal de internet y vía fibra óptica. Lo que facilita el uso de pagos electrónicos vía CoDi a través del Spei.
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