¿Han visto los videos de cuando abren las puertas en las tiendas de Estados Unidos en un Black Friday y la gente entra corriendo? Pues siento que con la misma emoción llegamos los usuarios a Threads, la nueva red social de Meta.
La noticia de la semana en el mundo de las redes es la llegada de Threads, que busca ser una competencia directa para Twitter, digamos que pretende ser su gemela buena. Como bien atinó a llamarle Hasan Chowdhury en un artículo que analiza las primeras horas de la red, “la nueva Disneylandia online de Mark Zuckerberg”.
En la columna de esta semana vamos a contestar algunas preguntas que he estado leyendo de los usuarios de estas redes sociales y en algunos chats de WhatsApp en los que participo. Desde el punto de vista de las estrategias de comunicación, es el tema de la semana, hay que hablar de Threads.
El contexto de la batalla entre Twitter y Threads
En los últimos días ocurrió la tormenta perfecta: Los recientes cambios en Twitter, la percepción de lo belicosa que puede ser esa red y hasta la imagen mental de Elon Musk y Mark Zuckerberg peleando en un ring, pusieron la mesa para la llegada triunfal de Threads.
Vamos, incluso los últimos días antes de la llegada de Threads, comencé a ver de manera inusitada en mi timeline de Twitter a personas promocionando su cuenta en Mastodon, otra red con una dinámica similar. Pareciera ser que el hartazgo con la red del pajarito azul empezaba a llegar a un límite.
El miércoles por la tarde comenzó el revuelo. Las notificaciones de que ya podíamos ingresar a Threads provocaron la llegada de 7 millones de usuarios a 7 horas de su lanzamiento. Y ahí vamos a probarla.
Preguntas y respuestas para quien quiere unirse a Threads
- ¿Threads es una moda? Más que una moda esta semana ha sido una tendencia. Es muy temprano para decir si el interés por esta nueva red pasará pronto como otras redes que han aparecido, aunque esta tiene el respaldo de Meta y está ligada a una de las redes más fuertes: Instagram. La apuesta de Zuckerberg es grande y dudo mucho que la deje perder. Las siguientes preguntas pueden aclarar un poco el panorama.
- ¿Es el fin de Twitter? Lo dudo mucho. Twitter tiene años posicionada como ese podio al que cualquiera puede subir y declarar —casi — lo que quiera. A pesar de los altibajos y los controvertidos cambios que ha hecho Elon Musk, ha seguido sobreviviendo y mucha gente se siente cómoda en ella, a pesar del hate.
- ¿Debo estar en Threads? No. De entrada no es que alguien “deba” estar en una red social, pero creo que de manera personal sí conviene estar en algunos casos, sobre todo a quienes les gusta la interacción social, pues es un espacio relativamente fresco que gozará de una luna de miel con sus usuarios por un tiempo limitado. Sobre todo para quienes tienen una estrategia personal ligada a Instagram, creo que vale la pena probarlo. Ahora es cuándo.
- ¿Mi marca o mi empresa debe estar en Threads? Prueba y error. Después de 15 años los especialistas en marketing y comunicación ya tenemos cierta experiencia de cómo funcionan ciertos canales, pero como siempre ocurre en redes sociales la mejor manera es probarlo. Algo muy importante es no ser intrusivos y entender la dinámica de la red antes de aventarse, que se note que algo hemos aprendido.
- ¿Qué publico? Lo que quieras. Considera que muchas de las cuentas que te siguen son las mimas que te siguen en Instagram, ya que la red te da de inicio una opción para seguirlas, así que seguro querrán saber más de ti. Instagram fue la reina de la fotografía muchos años y posteriormente ha buscado posicionarse en el video, pero nunca se había caracterizado por privilegiar ideas. La teoría es que bajo la misma base de armonía en la que se ha desenvuelto estos años, se dé la interacción social inmediata entre distintos usuarios, en una arena pública.
- ¿Es una forma más de perder el tiempo? Depende. Mucho se ha criticado a las redes sociales por llevar a la procastinación, pero tampoco se les puede juzgar solo por eso. El debate es mayor, pero en general creo que depende mucho de cómo la use cada quién y el tiempo que le dedique, incluso para muchas personas puede ser la manera de promocionar su marca personal y hacer negocios.
- ¿Podemos con otra red social? La omnipresencia digital puede ya ser obsesiva y tener un impacto en la salud mental provocando un sentimiento de FOMO (fear of missing out). Aquí hay una dinámica diferente y no se puede simplemente replicar lo mismo que en otras redes, el riesgo es que se convierta en una calca de Twitter a la que no queremos caer. Al final, la red es tan demandante como cada quien le permita que lo sea.
¿Cuánto puede durar libre de hate una red social?
El tema seguirá evolucionando conforme veamos el desenvolvimiento de la red social. De entrada hay un consenso en lo simple que es por el momento, con funciones limitadas, lo cual parece no molestar, sino ser un back to basics a la comunicación sencilla.
Será interesante ver cuánto durará la utopía de una red libre de hate. Incluso el mismo Elon Musk lo dijo en un tuit: “Es infinitamente preferible ser atacado por extraños en Twitter, que entregarse a la falsa felicidad de esconder el dolor en Instagram”, ¿será que haya muchos que piensen como él?
De pilón: Leí en mis primeras horas en Threads varios comentarios diciendo que ojalá los políticos se mantuvieran lejos de esa red. En el caso específico de México, los tiempos políticos requieren que estos personajes causen empatía, pero parece que están muy lejos de ella. Un buen ejercicio social listening sin sesgos les caería muy bien.
Las opiniones publicadas en esta columna son responsabilidad del autor y no representan ninguna posición por parte de Business Insider México.