- Como símbolo, la corona se asocia con la majestad, la autoridad y la soberanía
- Sin embargo, la corona no solo representa a la monarquía, ya que hay varias marcas que la han utilizado como su imagen.
- La próxima coronación del rey Carlos III será un recordatorio para los consumidores de los productos de estas marcas.
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Como declaración de moda u obra de arte, las coronas se distinguen por su belleza y por su contenido de joyas raras, metales preciosos y terciopelo en colores profundos y ricos.
Como símbolo, la corona se asocia con la majestad, la autoridad y la soberanía. Y como nos recuerda la coronación del rey Carlos III, la corona también es una marca superlativa.
Aunque las imágenes de coronas se usan a menudo en la marca real, es raro que los monarcas en estos días realmente las usen. En la tradición monárquica occidental, la británica es una excepción, con reyes y reinas que se someten a una ceremonia de coronación.
En el Reino Unido, la corona abarca tanto al monarca como al gobierno: el rey Carlos III y el gobierno de Su Majestad. El título del drama de Netflix The Crown ha dejado clara esta asociación incluso para audiencias internacionales que no están familiarizadas con los principios constitucionales británicos.
El reinado de la difunta Isabel II estuvo representado por una imagen estilizada de la corona de San Eduardo. Por su parte, el reinado de Carlos III está representado por una imagen de la corona Tudor, que aparece en el su monograma real, el escudo de armas y las invitaciones para la coronación.
Con el tiempo, se verá en documentos estatales, uniformes militares, pasaportes y apartados postales en todo el Reino Unido y los 14 reinos donde es jefe de estado.
Para las monarquías, la corona es el símbolo monárquico por excelencia, en el campo de la investigación de marketing corporativo se ha descrito “como marca”.
Aunque las monarquías europeas de Bélgica, Dinamarca, los Países Bajos, Luxemburgo, Noruega, España, Suecia y el Vaticano son conocidas como “jefes de estado coronados”, renuncian a las coronaciones y evitan el uso de coronas.
Aun así, todos usan una corona como marca (o emblema) para representarse a sí mismos. Por ejemplo, los escudos de armas de Luxemburgo y Dinamarca.
Las coronas de la coronación
La coronación del rey Carlos III será una auténtica fiesta de coronas, con siete en total. El rey será coronado con la corona de San Eduardo por el Arzobispo de Canterbury, y él la usará una vez. Sin embargo, durante su salida de la Abadía de Westminster, lucirá la corona del Estado Imperial más ligera.
La reina Camila también será coronada con la corona de la reina María. La última reina consorte en someterse a una coronación fue en 1937.
Otras cuatro coronas estarán presentes durante la coronación, llevadas por los reyes de armas, altos funcionarios que regulan la heráldica (escudos de armas) en el Reino Unido y participan en las principales ocasiones ceremoniales.
Los tres reyes de armas del Colegio de Armas de Inglaterra llevarán coronas decoradas con hojas de acanto y grabadas con las palabras del Salmo 50: “Ten piedad de mí, oh Dios”.
El rey de armas de Escocia de la Corte de Lord Lyon llevará una corona que es un facsímil de la corona real escocesa. La heráldica se puede ver como una forma temprana de marca. Muchas universidades del Reino Unido, por ejemplo, tienen un escudo de armas como identidad visual .
Una octava corona, la corona escocesa real y una de las más antiguas de Europa, no estará en la coronación. No obstante, se le entregará al rey en un servicio especial más adelante en el año.
La corona como marca en los negocios
La exclusividad y majestuosidad asociadas con las coronas reales ha significado que muchas organizaciones usen una corona como marca o logotipo.
La frase “logro culminante” se refiere a un logro excelente. Asimismo, una corona en la marca comunica calidad, estatus, clase y confiabilidad.
Algunas marcas icónicas —como Twinings Tea, Heinz y Waitrose— se benefician de un respaldo real oficial, ya que un rey, una reina u otros miembros importantes de la familia real les otorgaron una autorización real. Pueden usar el escudo de armas real como un tipo de respaldo de marca real.
La orden real danesa da derecho a una organización a mostrar “una imagen de la corona junto con el nombre de la empresa en carteles”. La cerveza Carlsberg es un ejemplo destacado de esto.
A veces se concede permiso para usar la corona real como una marca distintiva, por ejemplo en las carreras de caballos Royal Ascot, o en un escudo de armas, como en el antiguo Royal College of Science and Technology en Glasgow.
Por supuesto, mientras que algunas marcas tienen un respaldo real oficial, la mayoría de las organizaciones con un nombre o logotipo de corona no tienen una asociación directa con la monarquía.
A veces, la marca de la corona se usa para sus asociaciones culturales. Tal es el caso de los múltiples pubs británicos llamados “The Crown”.
La marca Regal se ha afianzado internacionalmente. Entre las empresas que utilizan un nombre de corona se encuentran Couronne (bolsos coreanos), Crown Bank (Estados Unidos), Crown Class (Royal Jordanian Airways), Royal Crown Derby (porcelana inglesa), Crowne Plaza Hotels (Reino Unido), Crown Royal (whisky canadiense), Crown Worldwide Distribution Group (Hong Kong) y Krone (vino espumoso sudafricano).
Los que tienen un logotipo de corona incluyen la Universidad de Columbia (Estados Unidos), Cunard (Reino Unido), Dolce & Gabbana (Italia), Hallmark Cards (Estados Unidos), Moët and Chandon (Francia), Ritz Carlton Hotels (Estados Unidos) y Rolex (Suiza).
Por su parte, la marca de cerveza mexicana Corona, que utiliza tanto el nombre de la corona como el logotipo, es la marca de cerveza más valiosa del mundo, valuada en 7,000 mdd.
Incluso en un mundo de repúblicas, está claro que la corona como marca no solo perdura, sino que florece. La coronación del rey y la reina será el cenit del servicio de coronación.
Para los productores de cerveza Corona y otras marcas que presentan coronas en todo el mundo, el vínculo visual y verbal de esta y la monarquía será, en cierto modo, un recordatorio para los consumidores de que sus productos son dignos de un rey.
Este artículo se publicó originalmente en inglés.
*The Conversation es una fuente independiente y sin fines de lucro de noticias, análisis y comentarios de expertos académicos.
*John M.T. Balmer es profesor de marketing corporativo en la Brunel University London
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