• En mayo, el consumo en México mantiene una clara tendencia al alza con un repunte mensual de 1%.
  • Pero se espera que en los próximos meses se interrumpa esta recuperación por la variante Delta.
  • En tanto, la inversión muestra un estancamiento al reportar una desaceleración en mayo.

La economía mexicana tendrá un crecimiento mejor a lo esperado en 2021, de acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI). Pero mientras el consumo mantiene una sólida tendencia al alza, la inversión en México muestra una desaceleración en los últimos tres meses, de acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).

Por un lado, el consumo privado en el país avanzó casi 1% en mayo de 2021 en comparación al mes previo. De esta forma conservó tres meses al alza hasta registrar un aumento anual de 29%. La cifra en términos anuales se disparó debido a la comparación con el desplome por el cierre sanitario de 2020.

Sin embargo, el consumo de bienes disminuyó 1% mensual en el quinto mes del año, que fue compensado por un repunte en los servicios de 1.6%. Pero la recuperación para el consumo en mayo vino del segmento de productos importados, que creció casi 7% con respecto al mes anterior.

Aunque la pandemia no ha terminado, en mayo el consumo se levantó debido a un mayor sentimiento de confianza. En ese entonces todavía no se sentían los efectos de la variante Delta del coronavirus. Debido a esta nueva cepa, se esperan nuevas restricciones con el repunte de contagios que derive en una desacleración del consumo, advirtió Banco Base en una nota.

«Hacia adelante se espera una desaceleración significativa en la recuperación ante el comienzo de la tercera ola de casos de Covid-19. Esta ha provocado que las autoridades refuercen las medidas de confinamiento con la suspensión de algunas actividades no esenciales. Especialmente en el sector de servicios», señaló la institución.

Se aplana la curva… pero de la inversión en México

Por otro lado, la inversión comenzó a aplanar la curva, después del repunte que comenzó a observarse en el segundo semestre de 2021. Pero a partir de marzo, el crecimiento de la inversión empezó a mostrar una desaceleración. En abril registró una pequeña caída de poco menos de 1%. Y en mayo solo alcanzó a repuntar 0.7%, lo que ha paralizado su expansión.

Aunque en mayo se observó una recuperación de 47% en términos anuales, esto también se debe a la baja base de comparación con respecto al desplome de 2020. De acuerdo con Banco Base, la inversión aún se encuentra lejos de alcanzar los niveles observados previo a la pandemia de Covid-19.

«Si comparamos contra diciembre del 2019, el nivel de inversión aún se mantiene 4.7% por debajo, y necesitaría crecer 4.9% para alcanzarlo. Respecto del máximo histórico observado en julio del 2018, el indicador de IFB (Inversión Fija Bruta) tendría que crecer 18.6%, lo cual no se ve alcanzable en el 2021», advirtió la institución.

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