Al día de hoy hemos vivido un primer trimestre del año muy agitado en términos financieros. Alzas en las tasas de interés, incremento en la inflación, el fenómeno del “súper peso”, el anuncio de la Gigafactory de Tesla en México, el cierre del SVB y otras noticias que han repercutido en cómo se mueve el dinero en México.
Menciono todo esto para reforzar una de las ideas fundamentales que siempre he comunicado en este espacio, y que es importante tener en cuenta para invertir de forma responsable: el mercado financiero es muy complejo, hay un montón de factores que actúan en él, y por ello siempre debemos estar informados para tomar buenas decisiones financieras.
Ya sea que inviertas en CETES, acciones, bonos, crowdfunding, bienes raíces o cualquier otro instrumento que se te venga a la mente, siempre hay un mínimo análisis que realizar para poner a trabajar a tu dinero. Tampoco digo que se trate de estar estudiando los movimientos de los mercados todo el día todos los días, pues a menos que ésa sea tu profesión, no es algo que se traduzca en realmente hacer buenas inversiones en sí mismo.
Sin embargo, del otro lado de la balanza, existe otra tendencia que ha ganado mucho terreno y sobre la que quisiera que reflexionaras un poco, antes de tomar la decisión de integrarla a tus hábitos de inversión: el análisis técnico.
¿Diferentes análisis, mismo resultado? Para nada
De forma general, podemos decir que dentro de las inversiones en bolsa, existen dos métodos principales para tomar decisiones: el análisis fundamental y el análisis técnico. El primero, y del cual te he hablado a grandes rasgos en este espacio en ocasiones anteriores, se basa en estudiar minuciosamente las empresas y crear proyecciones financieras hacia el futuro en función de la información disponible.
Los analistas actualizan constantemente sus modelos y utilizan los datos para hacer proyecciones sobre los ingresos, los gastos y la utilidad que se repartirá entre los accionistas. Así, llegan a una valoración sobre cuánto vale una acción y pueden realizar recomendaciones o tomar decisiones sobre cuándo es un buen momento para comprar o vender una participación dentro de cierta empresa emisora.
Por otro lado, el análisis técnico se basa en el estudio de gráficas y patrones que se repiten una y otra vez en el mercado. Los analistas técnicos consideran que el mercado tiene una especie de conciencia, la cual genera comportamientos y patrones replicables, y en cierta medida, cíclicos. Siendo críticos, se trata más de una estimación estadística que de un cálculo económico.
Desde mi perspectiva, este análisis técnico carece de la validez suficiente para tomar decisiones financieras, pues no toma en cuenta los números necesarios que puedan ayudar a hacer estimaciones más cercanas al desempeño de las acciones. Incluso me aventuraría a decir que esto está más cerca de la superstición que del análisis financiero, si me permites el atrevimiento.
Aunque es cierto que algunas personas han logrado ganancias utilizando este método, no termina de convencerme como una forma confiable de tomar decisiones en el mercado de valores. El análisis técnico cobró más notoriedad cuando el trading o “forex” ganó popularidad, ya que es una de las técnicas más utilizadas por las personas que están dentro de este mercado para realizar su toma de decisiones, y ahora incluso algunas casas de bolsa e instituciones bancarias tienen equipos que realizan este análisis, pues hay un público que busca específicamente esta clase de información.
Si no es para ti, no lo tomes
Algo que ha quedado muy claro desde el comienzo de la pandemia es que los mercados son absolutamente impredecibles. La propia pandemia era un evento imposible de predecir, de la misma forma que el conflicto bélico de Rusia y Ucrania, el alza histórica en las tasas de interés, el alza y la caída en el precio de las cryptos, etc., han provocado volatilidad en los mercados que habría sido imposible tomar en cuenta en cualquier análisis.
Esto no quiere decir, por supuesto, que todo el trabajo de cálculo y estimación que realiza el análisis fundamental se deba tirar por la borda. Todo lo contrario: las inversiones siempre conllevan un cierto riesgo, y es gracias a las estimaciones de esta clase de análisis que las personas pueden tomar decisiones con un mayor fundamento o confianza
Tener un enfoque disciplinado y basado en datos para tomar decisiones de inversión, según mi lógica, debería otorgar mejores resultados que depender de o basarse en patrones repetitivos en el mercado. Si para ti este análisis técnico hace sentido y se ajusta más a tu estrategia de inversión, es válido que sea una de tus herramientas principales para evaluar el mercado.
Lo que sí puedo decir, si me lo permites, es que tampoco te limites a él. De igual forma que en portafolio de inversiones, la diversificación ayuda a mitigar riesgos, y tomar en cuenta una segunda opinión para la toma de decisiones también suele dar buenos resultados.
Lo que aquí expreso es que las decisiones financieras deben partir de un análisis no solo de los números fríos y el análisis de porcentajes y probabilidades, sino también del entorno, los sucesos sociales y económicos, y por ello debemos tomar con reserva el análisis técnico.
Las opiniones publicadas en esta columna son responsabilidad del autor y no representan ninguna posición por parte de Business Insider México.