- El martes 8 de noviembre, Beat global informó el cierre de sus mercados en América Latina, una decisión estratégica.
- Una persona que trabajó para Beat México contó a Business Insider cómo fue el proceso de desvinculación de la startup.
- "Beat siempre fue una empresa humana y no dejó de hacerlo hasta el último momento. La calidez y la cercanía siguen estando presentes en estos momentos de crisis para quienes perdimos nuestro empleo", dijo.
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Este ensayo se basa en una conversación con una persona empleada de Beat México que fue despedida el martes y habló de forma anónima para proteger su privacidad. Su identidad y empleo han sido verificados por Business Insider México, y sus palabras han sido editadas por extensión y claridad.
Beat México siempre fue una empresa muy abierta, muy horizontal y esto se notaba en el nivel de comunicación que nos daban. Los estados de resultados siempre estaban abiertos y la apertura siempre se veía en las reuniones mensuales de informes.
Cada mes teníamos estas reuniones, algunas eran globales y otras locales de cada mercado. Estas eran para informar a toda la empresa cuáles habían sido las decisiones estratégicas, los resultados financieros.
Normalmente en ellas estaban el CEO global, o cuando era una reunión local se encontraba el general manager de cada país. Nos daban un informe de qué había pasado ese mes, ideas principales del negocios, resultados financieros o anuncios importantes de los siguientes meses.
Básicamente era para informar a los empleados sobre cómo estaba la empresa y hacia dónde íbamos.
Beat global informó de la decisión a todos los empleados de diferentes países
Este martes 8 de noviembre teníamos esa reunión, como la teníamos todos los meses; pero el lunes por la noche, en los canales internos de Beat México, el general manager, Enrique Mendoza, dijo que tenía que ser presencial. No nos pareció raro porque cuando eran anuncios importantes nos pedían estar presentes.
Hasta ese día nosotros seguíamos en trabajo híbrido, dos días en oficina y los demás en casa, entonces se nos pidió que, sin importar si el martes te tocaba o no presencial, teníamos que ir.
También se envió el mismo mensaje para los canales de los equipos de Zero y Tesla, que es parte de la vertical que se basa en los autos eléctricos, donde conductores estaban contratados por la empresa, a diferencia de la otra vertical en donde las personas inscriben su auto para manejar.
Se pidió que llegáramos a las 9:00 am. Nos reunimos en el auditorio y toda la empresa estaba conectada: los 5 mercados en Latinoamérica, más el corporativo en Grecia, en Ámsterdam y todos los empleados en remoto que había en diferentes países.
Sin importar en que uso de horario estabas, todos nos conectamos a esa junta.
Una noticia dolorosa y frustrante para el CEO de Beat
El CEO, Andrew Pinnington, traía una hoja y comenzó a decir que hoy quería compartir con todos nosotros una noticia dolorosa e importante. Nuestros inversionistas habían decidido dejar de invertir en el proyecto en Latinoamérica y querían poner los esfuerzos en otro tipo de proyectos en Europa.
Hubo un silencio en el auditorio, nadie en la sala dijo nada, nadie hizo algún ruido o tuvo alguna reacción.
El CEO nos explicó cómo iba hacer el proceso de cierre. A partir de ese día en tres países, incluyendo México, la app dejaba de funcionar de manera inmediata y en los otros dos mercados el proceso iba hacer más largo. Ya no se podrían hacer más viajes pero la aplicación dejaría de existir hasta diciembre.
También los conductores de los servicios de Tesla y Zero fueron citados en diferentes hoteles para hacer el proceso, por lo que desde el martes en la mañana ningún usuario fue capaz de tomar un viaje, pero los otros servicios regulares seguían activos.
Beat buscó acompañar a todos sus empleados hasta después de tres meses
El CEO de la empresa había llegado hace menos de un año, en enero de 2022, y tenía la consigna de que Beat fuera una empresa más rentable y ponerla en el mapa de diferentes países.
Pinnington nunca llegó con la idea de cerrar la empresa y esta es un decisión que nos dijo que le dolió muchísimo y le frustró. Vino con una apuesta, creyó en el proyecto y el tener que dar la noticia se vio que fue doloroso para él.
Nos mostraron cómo iba hacer el proceso de liquidación, que iba a ser apegado a la ley; mostraron el esquema. El paquete de liquidación incluía tres meses de sueldo, 20 días por año trabajado, las partes proporcionales de aguinaldo, de prima vacacional y los fondos de ahorro que se tenían.
Se nos informó que iban a dejar pagados los seguros de vida y de gastos médicos mayores por tres meses más para hacer el cambio a uno personal.
Los equipos que teníamos en consigna: computadoras, celulares y tablets se quedaban con nosotros. Los autos Tesla y Zero estaban en modelo leasing, por lo que regresarán a las arrendadoras.
Esas juntas duraban una hora, ahora solo fueron 15 minutos. Solo el CEO habló, nadie más dijo nada y se apagó la cámara.
«Logramos reescribir la movilidad en autos eléctricos»
El general manager de Beat México se levantó y tomó el micrófono. Nos reiteró que fue una decisión estratégica, nadie podía hacer nada. Aseguró que la decisión no tenía que ver con el desempeño del equipo y que debíamos estar orgullosos con lo que habíamos logrado.
Logramos reescribir los servicios de movilidad con los servicios de Tesla y Zero, en la seguridad de las personas, el uso de los autos eléctricos y esto debía llenarnos de orgullo.
Por último dijo que la empresa iba hacer todo lo que tenía en sus manos para ayudarnos en el proceso de desvinculación.
Cada vez que terminaba la junta nos ponían snacks o un catering para poder platicar los resultados y esta vez no fue la excepción. La cocina estaba lista.
Un ánimo optimista y tranquilo entre los empleados
Se percibía un ánimo tranquilo. Un despido nunca es una noticia agradable de recibir, pero siento que en general el ánimo era optimista.
Las personas decían que había sido una experiencia retadora, desafiante y enriquecedora, conocimos a gente increíble y aprendimos muchísimo. Había personas que llevaban poquito en la compañía, tres meses o seis meses, para estas personas era también raro, pero incluso ellos decían que no se arrepienten.
Incluso yo, que llevaba en la compañía un año y poquito, venía de una empresa bastante grande, y no me arrepiento un solo segundo de haber estado en Beat. Si hubiera sabido que esto iba a pasar, de todos modos hubiera tomado la decisión de estar en Beat. Y este era el sentimiento de todos.
El tiempo que duró fue muy bueno. Nadie estaba sufriendo o llorando, en general todos estábamos bien. Se escuchaban risas, gente recordando anécdotas o momentos.
Los equipos de recursos humanos de los países ya estaban preparados para empezar con el proceso
En los pizarrones de la oficina se pegaron unas hojas con los nombres de quienes iban a pasar por grupos a diferentes salas. Éramos más de 150 empleados e íbamos pasando por bloques de 10 personas cada 30 minutos.
La gente de recursos humanos nos dijo que tuviéramos paciencia, que era algo que íbamos hacer todo el día, que era cansado, desgastante y frustrante. Pero que ayudáramos en ser empáticos con ellos, porque eran personas limitadas en un proceso para más de 150 empleados.
Cuando llegaba tu turno de pasar a la sala, ya estaba un folder preparado con toda la documentación, los temas legales, en español e inglés. Teníamos una hoja tipo recomendación, que decía cuánto tiempo trabajaste ahí. Fue un proceso rápido.
Los conductores de Tesla y los de Zero recibirán la misma liquidación conforme a la ley. Por lo que escuche al principio, ellos tuvieron algo de renuencia y descontento; pero los equipos de recursos humanos les explicaron todo y por lo que escuché, al final todos firmaron.
Estando en el banco escuché un comentario de un conductor que hablaba con alguien y decía: «Me liquidaron de la empresa, pero recibí más dinero por un solo año que trabaje en Beat, que en 8 años en otra compañía».
Los vecinos de las oficinas de Beat se enteraron de la noticia y fueron empáticos
Todo fue rápido, yo me fui a la 1:00 de la tarde porque había mucha gente tratando de desbloquear sus computadoras y solo teníamos dos personas de TI. Regresé más tarde y a las 3:00 pm, la mayoría ya se había ido.
Lo que muchos hicimos fue salir y empezar a caminar hacia los bancos para depositar los cheques. Llegabas al banco y decías vengo a depositar el cheque y me decían: «¿Eres de Beat?» Eso fue gracioso, todos íbamos al mismo banco.
Incluso las persona alrededor de la oficina se enteraron. Muchos se fueron a despedir de la señora de los tamales o el señor del cigarrito. Fue gracioso que los vecinos de la zona también se enteraran que pasó esto.
Se generaron apoyos de directorios para comenzar a buscar un nuevo empleo
Fue un proceso de desvinculación bastante humano y cálido, siento que la empresa y el equipo ha tratado de hacer incluso más de lo que tocaba. Trataron de ver cómo apoyar a quienes nos quedamos desempleados.
Las personas empezaron a generar directorios de exempleados con contactos de otras empresas grandes o con LinkedIn. Se crearon canales externos de comunicación para compartir tips de cómo hacer un CV, para compartir diseñadores y cómo hacer un portafolio.
Beat México tuvo un recorte presupuestario en agosto de 2022
Nosotros habíamos visto en el último año el comportamiento macroeconómico. Al final del día, al ser una startup la mayoría de los países operaban en pérdidas y de alguna forma esto es algo aceptable, pero en el contexto que vivimos, creo que esto aceleró ciertas decisiones.
En agosto de 2022 tuvimos un recorte presupuestario muy grande en inversiones de marketing, research, en incentivos para los conductores y en todas las áreas.
De lo que se trataba es que las pérdidas fueran menores para que en el momento de ir con nuestros inversionistas fuéramos capaces de transmitir que éramos una empresa atractiva.
Lo que hemos estado viendo aceleró las cosas, probablemente esto iba a pasar en dos o tres años si la empresa seguía perdiendo.
Las startups deben hacer apuestas para seguir creciendo y no quedarse estáticas
Las startups son más inestables en términos de aguante ante las crisis, pero cuando una startup está creciendo y empieza a levantar capital, su visión nunca es terminar, al contrario, es continuar creciendo, haciendo apuestas.
En México, Beat decidió hacer una inversión muy grande para un HUB tecnológico, porque íbamos a tener desarrolladores para impulsar la app desde Latinoamérica y todas estas personas con menos de 6 meses, también resultaron despedidas.
Beat fue una empresa bastante humana y no me arrepiento
Las startups se reconocen por un crecimiento acelerado, a diferencia de otras empresas, de no hacerlo así pues básicamente no podrías estar en este mundo.
La velocidad con que suceden las cosas, el espíritu de las personas que está dispuesta a colaborar sin importar su área, el alentar al error sin miedo a intentarlo es algo que jamás lo encontraras en una empresa tradicional, y es por lo que no me arrepiento de haber estado en una startup como Beat.
Beat siempre fue una empresa humana y no dejó de hacerlo hasta el último momento. La calidez y la cercanía siguen estando presentes en estos momentos de crisis para quienes perdimos nuestro empleo.
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