• Alrededor del 1% de la población mundial padece trastorno bipolar, una condición mental que es altamente discapacitante, a la que se le atribuye la pérdida de aproximadamente 14.3 años de vida productiva.
  • De acuerdo con Manuel Sánchez de Carmona, expresidente de la Sociedad Internacional de Trastornos Bipolares (ISBD), este padecimiento mantiene en desempleo al 60% de los pacientes.
  •  Sólo 1 de cada 5 personas con trastornos mentales en México recibe atención médica debido a la falta de servicios de salud apropiados.
 

En México, cuando un trabajador sufre de alguna enfermedad física que le impida realizar sus actividades laborales, acude al médico y solicita una incapacidad, tal como lo estipula la Ley Federal del Trabajo; sin embargo, cuando se trata de una enfermedad mental, como los trastornos bipolares, el panorama parece ser un poco más complicado. 

De acuerdo con Ingrid Vargas Huicochea, académica de la Facultad de Medicina de la UNAM, alrededor de 1% de la población mundial padece trastorno bipolar, una condición mental altamente discapacitante, a la que se le atribuye la pérdida de aproximadamente 14.3 años de vida productiva en quien lo padece.

Al respecto, Manuel Sánchez de Carmona, expresidente de la Sociedad Internacional de Trastornos Bipolares (ISBD), explica cómo enfermedades mentales como el trastorno bipolar y la depresión afectan la vida laboral de las personas que la padecen.

“En la vida diaria, los pacientes con este trastorno tienen problemas al doble como el ausentismo, renuncias, pero también discriminación laboral. Hay un estigma grande y he escuchado historias terribles de pacientes que no pueden hablar de este tema con sus superiores; o incluso con su familia por miedo a ser discriminados”, indica Sánchez de Carmona. 

Es debido a estas dificultades que la tasa de desempleo de las personas con trastorno bipolar en México es de 60%, aunque alcanza hasta 80% si la condición presenta cuadros mixtos entre manía y depresión, dos de los síntomas más comunes de este trastorno.

El trastorno bipolar y su impacto en la vida laboral de los pacientes

De acuerdo con la Clínica Mayo, el trastorno bipolar —antes denominado “depresión maníaca”— es una enfermedad mental que causa cambios extremos en el estado de ánimo que comprenden altos emocionales (manía o hipomanía) y bajos emocionales (depresión).

En México, el ISBD estima que 3.6 millones de personas sufren algún tipo de trastorno bipolar. De ellos, se calcula que un promedio de 18% fallece por suicidio o por falta de seguimiento y tratamiento oportuno.

Las personas con trastorno bipolar sufren las terribles consecuencias del desconocimiento social en torno a las enfermedades psiquiátricas, dice Sánchez de Carmona.

Además, la “bipolaridad” como también se le conoce, genera un grado de discapacidad para el enfermo. “Los episodios depresivos en los pacientes genera que si no tienen trabajo, les impide buscarlos; y si lo tienen, tienen periodos en donde no son funcionales. Por otro lado, cuando están en la manía, puede tener fallas de juicio, no cuidar un presupuesto, tomar una decisión muy equivocada”. 

El especialista explica que parte del problema es la falta de un diagnóstico adecuado y un seguimiento de la enfermedad por parte de los diversos sistemas de Salud. 

“Es un círculo negativo, el padecimiento les impide tener un trabajo, por lo tanto, no tienen dinero y no se pueden tratar. Es un deterioro muy fuerte”, señaló Manuel Sánchez de Carmona, expresidente del ISBD.

El trastorno bipolar tiene un costoso y poco accesible tratamiento

¿Qué pueden hacer las personas con este padecimiento para tratarse? En México un paciente con trastorno bipolar debe enfrentarse además de con su enfermedad, con el tema del diagnóstico y el tratamiento. 

De acuerdo con datos del Foro Consultivo, solo 1 de cada 5 personas con trastornos mentales en México recibe atención médica.

Entre 2013 y 2021, México asignó, en promedio, 2.1% del presupuesto de la Secretaría de Salud a la atención de la salud mental según datos de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público. Esto, a pesar de que la Organización Mundial de la Salud, OMS, recomienda que se invierta entre 5 y 10%. 

Además, 80% del gasto en salud mental se emplea para la operación de los hospitales psiquiátricos. Muy poco se destina a detección, prevención y rehabilitación.

Por otro lado, Sánchez de Carmona estima que la atención psicológica privada para este tipo de enfermedades cuesta hasta 6,000 pesos mensuales; sin contar con el costo de los medicamentos. 

¿Y las empresas? 

Afortunadamente, desde la entrada en vigor de la NOM-035, son cada vez más las empresas que se están preocupando por el bienestar mental de sus colaboradores; sin embargo, para Manuel Sánchez de Carmona, aún queda trabajo por hacer. 

“Se trata de ir más allá de programas de mindfullnes o de clases de yoga para los trabajadores. Se debe hacer un diagnóstico oportuno de los trastornos mentales que puedan existir entre los colaboradores”, dice. 

De acuerdo con la Encuesta Nacional de Epidemiología Psiquiátrica, por lo menos un cuarto  de la población en México tiene algún padecimiento mental. Así que, si el área de Recursos Humanos de las empresas voltea a ver al personal, se dará cuenta que 1 de cada 4 empleados tiene depresión o ansiedad, o trastorno por déficit de atención e hiperactividad o alguna otra condición como el trastorno bipolar. 

Finalmente, el especialista hace un llamado a las instituciones de salud públicas y privadas, así como a los centros de trabajo para hacer conciencia y sumar esfuerzos en favor del diagnóstico, atención y tratamiento de pacientes con trastornos bipolares.

AHORA LEE: La falta de medicamentos y de especialistas son los principales obstáculos que enfrentan pacientes con enfermedades reumáticas en México, asegura una experta en el sector

TAMBIÉN LEE: Esto es lo que se sabe sobre la cloroquina y la hidroxicloroquina y su eficacia contra el coronavirus

Descubre más historias en Business Insider México

Síguenos en FacebookInstagramLinkedIn y Twitter