• En el país solo existen 630 reumatólogos colegiados y las enfermedades reumáticas se desarrollan en 1 de cada 100 habitantes.
  • La falta de especialistas es solo uno de los problemas que enfrentan los pacientes, también otro obstáculo es la escasez de medicamentos.
  • Durante la pandemia, la plaquenil (hidroxicloroquina) se usó para combatir el Covid-19 dejando sin medicamento a los pacientes.

Deshiré Alpízar coordina la Unidad de Investigación en el Colegio Mexicano de Reumatología. En el país solo existen 630 reumatólogos colegiados y las enfermedades reumáticas se desarrollan en 1 de cada 100 habitantes.

Al inicio de la pandemia, la especialista comenzó una investigación para conocer cómo afecta el Covid-19 a los pacientes con enfermedades reumáticas.

«Cuando inició el Covid-19 todos los reumatólogos se hicieron la pregunta de ‘¿qué va a pasar con nuestros pacientes?, ¿tienen riesgos?, ¿tendrán un desarrollo más grave?’ Surgieron muchas preguntas», dijo Alpízar.

Y es que las enfermedades tienen tratamientos llamados inmune opresores, los cuales disminuyen la capacidad de tener una respuesta inmunológica ante cualquier necesidad.

Las afectaciones principales de personas con enfermedades reumáticas son la escasez de medicamentos

Para conocer cómo afectaría el SARS-COV-2, los especialistas de más 40 países crearon una base de datos llamada Global Reumatology Alliance Covid-19 para poder registrar las afectaciones.

En México, el Colegio Mexicano de Reumatología llamó a todos los especialista a participar en el registro de personas con enfermedades reumáticas y que tuvieran Covid-19.

«Los pacientes con enfermedades reumáticas se han visto lastimados en muchas formas. Hay desabasto de medicamento como el plaquenil (hidroxicloroquina)«.

De acuerdo con la investigadora clínica, una de las mayores afectaciones que ha traído el Covid-19 a los pacientes con enfermedades reumáticas como artritis y lupus fue la escasez de medicamento.

Por ejemplo, la hidroxicloroquina (HCQ), que se prescribe contra el lupus o la artritis reumatoide, fue uno de los medicamentos con desabasto debido a que a finales de febrero de 2020 un pequeño estudio chino, poco detallado, afirmaba que el fosfato de cloroquina mostraba signos de eficacia en pacientes con SARS-Cov2.

Además, los presidentes de Brasil, Jair Bolsonaro, y de Estados Unidos, Donald Trump, difundieron su consumo, por lo que la demanda empezó a crecer.

El medicamento metrotexate para la artritis es otro medicamento que también ha sido afectado por la escasez en medio de la pandemia, según Alpízar.

«Están escaseando muchos medicamentos, por la situación en la que está nuestro país. Medicamentos muy esenciales les faltan a los pacientes. Lo que tratamos de ver es cómo les ha afectado».

También hay una escasez de especialistas

Por otro lado, la escasez de especialistas es otro rubro que afecta a los pacientes.

Deshiré asegura que solo existen 630 reumatólogos colegiados para una población de 120 millones de personas, donde 1 de cada 100 presentan artritis.

Las ciudades de Guadalajara, Monterrey y México con donde se concentran la mayoría de los reumatólogos, obligando a otros pacientes a viajar o la falta de diagnóstico o seguimiento de éste.

«No hay suficiente reumatólogos, ni se les ha dado la suficiente atención al gobierno o recursos para la investigación», dijo.

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