- Los empleados están siendo aplastados por los despidos. Sin embargo, esto está impulsando grandes ganancias para Wall Street.
- Los despidos se dan para reducir los costos laborales, una señal para los accionistas de que los ejecutivos tratan de aumentar sus ganancias.
- Sin embargo, esta estrategia podría convertirse en un problema a largo plazo.
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Las empresas simplemente no pueden dejar de hablar de sus planes de despidos. Un análisis reciente de Bloomberg encontró que la tasa de menciones de despidos en las llamadas trimestrales sobre ganancias están en su nivel más alto desde que inició la pandemia.
Y aunque todos los rumores sobre despidos son profundamente desconcertantes para los trabajadores, los ejecutivos siguen hablando de planes para recortar las nóminas por una razón bastante clara: a los inversionistas les encanta.
Puede parecer contradictorio que Wall Street recompense a las empresas por despedir gente. Después de todo, generalmente se piensa que los despidos son una señal de que el negocio no va tan bien.
Sin embargo, muchas de estas empresas están registrando fuertes ganancias. Están despidiendo trabajadores como parte de un esfuerzo por mostrar a los inversionistas que se toman en serio la reducción de costos y ser más eficientes.
La emoción de Wall Street por los despidos
Wall Street, a su vez, se ha mostrado bastante entusiasmado con todo lo que se habla sobre la reducción de la fuerza laboral. La reducción de Meta fue recibida con “aplausos”: el precio de las acciones de la compañía ha aumentado más del 170% durante el año pasado.
Las acciones de Spotify subieron 7.5% después de su anuncio de despidos en diciembre y han aumentado 30% en lo que va de 2024. Y aunque gran parte de los rumores sobre despidos se concentran en la tecnología, los inversionistas también estuvieron bastante satisfechos con los recortes de empleos en Estée Lauder.
El hecho de que los inversionistas aplaudan las reducciones de la fuerza laboral no es necesariamente un fenómeno nuevo. Después de todo, las empresas buscan ganancias. Reducir los costos laborales es una señal para los accionistas de que los ejecutivos están tratando de aumentar esas ganancias.
“En última instancia, las empresas quieren demostrar a todas las partes interesadas que están siendo administradores cuidadosos del capital. Podría decirse que este tipo de acciones son una manera de demostrarlo”, dijo Scott Kessler, líder global del sector de tecnología, medios y telecomunicaciones en Third Bridge Group.
Algunos factores en la reciente oleada de despidos —y las reacciones de los inversores—— son únicos. Muchas empresas adoptaron un enfoque agresivo a la hora de contratar durante la pandemia. Especialmente lo hicieron las empresas de tecnología, cuyo compromiso aumentó mientras todos estaban atrapados en casa.
¿Por qué las empresas están apostando por los despidos?
A medida que los patrones de consumo se normalizaron y las tasas de interés aumentaron, los proyectos más riesgosos se volvieron más caros. Las empresas empezaron a duplicar lo que ya hacían bien en lugar de invertir en nuevos proyectos que requerían más gente.
Los recortes, dicen muchos ejecutivos, son una manera de reducir su número de empleados a un tamaño más normal, o uno con el que Wall Street se sienta mejor.
A principios de febrero, los analistas de Goldman Sachs dijeron en un informe que muchas de las empresas que anunciaban despidos no lo hacían porque sus perspectivas hubieran empeorado, sino como parte de un esfuerzo por “mejorar las valoraciones de las empresas respondiendo a las demandas de los inversionistas de reducir la fuerza laboral que se consideraba se han vuelto demasiado grandes y costosos”.
Sameer Samana, estratega senior de mercado global del Wells Fargo Investment Institute, argumentó que “después de muchos años de participar en probablemente lo que yo llamaría proyectos de tipo ‘moonshot’ —ya sea el metaverso o lo que sea—, parece que las empresas de tecnología finalmente hemos encontrado algo de disciplina fiscal. Claramente gran parte de ella está llevando a controlar algunos de esos proyectos de gran éxito y a centrarse más en el negocio en cuestión”.
“Cuando las tarifas eran bajas, muchos de estos proyectos tenían sentido», añadió Samana. “Cuando se ingresa 0%, muchos proyectos tienen un valor presente positivo, y cuando se ingresa 5%, muchos de ellos se vuelven negativos”.
Ted Mortonson, CEO de Baird, dijo que algunas empresas de tecnología estaban reduciendo su tamaño para convertirse en un objetivo más atractivo para los compradores. Esencialmente, los recortes convierten a las empresas en una oportunidad “más ágil y mezquina” para fusiones y adquisiciones, o simplemente para capear la tormenta de las altas tasas de interés.
¿Y qué tiene que ver la IA?
Luego está la Inteligencia Artificial (IA) de todo esto. Aunque parte del entusiasmo en torno a ellas se ha extinguido durante el año pasado, las grandes empresas todavía hablan de ellas en las llamadas sobre resultados.
Los analistas con los que hablé dijeron que las esperanzas en torno a la IA probablemente estaban provocando algunos despidos y el optimismo de los inversionistas sobre ellas.
Kessler dijo que dado que las empresas de tecnología estaban tratando de vender a los clientes “los beneficios de productividad y eficiencia” de la IA, podían reiterar ese argumento utilizando las herramientas en su propio negocio y haciendo también cierta “racionalización del recuento de personal”.
Las empresas de tecnología que desarrollan productos de IA son las mejor posicionadas para probarlos.
“Si puedes automatizar y orquestar una solución de extremo a extremo desde un punto de vista informático, simplemente no necesitas tanto personal”, dijo Mortonson, aunque agregó que a pesar de todo el revuelo, la IA probablemente no tendría éxito para generar eficiencia en las empresas.
Cuando los despidos no son la solución
Wall Street no ha recompensado los anuncios de despidos de todas las empresas, especialmente aquellos que indican problemas más amplios dentro del negocio.
Y aunque estos anuncios están desencadenando una operación de precios de las acciones en el corto plazo, es posible que los resultados no se mantengan. Las investigaciones sugieren que los despidos son malos para los precios de las acciones a largo plazo y a menudo pueden ser un lastre para los negocios porque dañan la moral y la productividad y son bastante costosos.
En algunos casos, los despidos son realmente inevitables. Sin embargo, es difícil no sentir que deberían ser un último recurso. No debería ser una estrategia relativamente simple para aumentar los márgenes de ganancias y hacer felices a los inversionistas.
Los titulares “Las acciones se disparan después de que una empresa despide a miles de trabajadores” deberían hacer reflexionar a todos, especialmente a medida que proliferan.
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