- Después de un match en Bumble, la conversación entre Eduardo y Paula terminó en una relación.
- Lo que comenzó como préstamos chicos de 1,500 pesos terminó en una deuda de casi 26,000 pesos.
- Paula cuenta en un hilo de Twitter cómo es que un match de Bumble la estafó y la engañó incluso al decirle que se iba a morir de Covid-19.
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Después de un match en Bumble, la conversación entre Eduardo y Paula hizo surgir una relación. Entonces, lo que comenzó como préstamos pequeños de 1,500 pesos terminó en una deuda de casi 26,000 pesos.
Los préstamos que comenzaron con cantidades de 1,000 a 1,500 cada vez se iban incrementando por distintas razones.
Así lo contó Paula en un hilo de Twitter, el pasado 14 de febrero, donde relató cómo un match de Bumble la estafó con 26,000 pesos y la engañó incluso al decirle que se iba a morir de Covid-19 y necesitaba dinero.
«Cuando él estaba en el hospital todavía consciente, él me decía ‘el seguro está llegando al tope, es que mi papá no pone dinero, no me están pagando en el trabajo’. Entonces le deposité más dinero, primero 3,000 pesos de la prueba, 11,000 de hospital y 7,000 para la supuesta ambulancia», dijo.
Además, en una ocasión, Paula cuenta que salieron a un show de standup, que supuestamente él pagó con su dinero, pero las entradas no existían, por lo que ella tuvo que comprar los boletos nuevamente.
Más tarde, ese día, Paula se percató que en su cuenta bancaria solo había 9 pesos y registraba cargos de 2,000 en apuestas deportivas en la plataforma Caliente.
«Nunca se me cruzó por la cabeza que él me estuviera engañando. Muchas veces era de: ‘oye voy al baño aquí está mi bolsa o por las bebidas’. Todo el tiempo. Pensé que me habían clonado mi tarjeta y él también dijo que le clonaron la tarjeta. Entonces no me puede pagar y yo me quedo con 9 pesos», dijo
18 personas fueron estafadas por Eduardo
Paula no fue la única estafada. Junto con otro amigo de Eduardo, se dio cuenta que el hombre los había engañado para pedirles dinero. Mientras que a Paula le dijo que él tenía Covid-19, a su amigo le contó que era su mamá la que supuestamente moría.
Además, ella se dio cuenta que no trabajaba en dónde solía decirle y que no sabía donde vivía ni nunca conoció a su familia.
«Yo tengo mucho miedo, si me hace algo mínimo que se sepa quién fue. Si algo me pasa, que mis papás no se queden como ‘¿quién sabe qué pasó?’. Entonces yo dije, ‘me tengo que adelantar’ e hice el caso público», dijo.
Después de publicar el hilo en Twitter, Paula recibió mensajes de otras personas que también habían sido estafadas por Eduardo.
En total, van 18 personas estafadas con diferentes métodos. Desde supuestos boletos de graduación, boletos para rifar autos, préstamos para cubrir una enfermedad y hasta el empeño de laptops de sus amistades para obtener dinero.
«Llevo 18 personas de todos lados, de sus oficinas, del CIDE, de la prepa, uno de su secundaria, muchísimas personas. Y esta persona además iba a los préstamos rápidos y ponía de contacto a sus compañeros, entonces a ellos les llega mensajes intimidatorios por sus deudas. Estas personas están muertas de miedo», dijo.
De esta difícil experiencia, Paula rescata 4 aprendizajes:
1. No fue mi culpa, fue la de él
Como primer aprendizaje, Paula segura que el confiar en esa persona no la hace culpable de cómo se desarrollaron las cosas, pues quién falló fue él y quién abuso de su confianza fue él.
«Ha sido un proceso entender que esto habla de quién es él y no de quién soy yo. Nada de esto fue mi culpa», dijo.
«Antes de recriminaba mucho de cómo no me di cuenta pero me cayó el veinte de que fue culpa de él y lo que venga en consecuencia será culpa de él».
2. Tengo mucho amor por dentro
Paula sostiene que esto solo le demostró todo el amor que puede tener por una persona, además de su gran empatía y muestra de apoyo que le daba en sus peores momentos.
«Esto habla de mi solidaridad y empatía y eso no lo voy a perder», dijo.
Además, al momento de publicar el hilo, varias colectivas feministas del CIDE, UNAM e ITAM se acercaron para asesorarla respecto a protección de datos y brindarle ayuda en lo que necesite.
También Bumble le escribió un mensaje: «Nos horroriza saber que alguien que conociste en Bumble te trató de esta manera. Nos aseguraremos de que su perfil se elimine de inmediato, si es que aún no has podido denunciarlo dentro de la aplicación. Estamos aquí para ti».
3. No fue culpa de las redes sociales o aplicaciones
Paula asegura que lo qué le sucedió no fue culpa de las aplicaciones de citas o las redes sociales, debido a que Eduardo fue el responsable de sus actos.
Además, sostiene que en anteriores entrevistas le han preguntado si » dejó de creer en el amor» y asegura que no.
«Me preguntaban si creo que fue culpa de haberlo conocido en Bumble, y no. Yo creo que si lo hubiera conocido en una reunión de prepa esto hubiera sido igual. Creo que la pandemia y el Covid-19 hicieron más fácil que mintiera, solo se aprovechó de la situación», dijo.
4. Ser más cuidadosa
Paula asegura también que será más cuidadosa con la confianza en las personas, ser más cautelosa en compartir su información y con quien sale.
«Tengo que tener más cuidado para confiar sobre todo cuando se trata de dinero o de fotos o cosas sensibles», dijo.
Como último aprendizaje, Paula está de acuerdo con un comentario que hizo Olimpia —quien impulsó la ley federal Olimpia que protege a las personas de quienes publiquen fotos íntimas sin su consentimiento— respecto a su caso.
«Ella dijo que no el dinero es el segundo plano, en lo que me pasó, ‘porque despojarla de su seguridad y lo que ella creía que eran sus instintos es mucho más profundo el daño'»,dijo.
«Es horrible que no podamos relacionarnos sin que haya engaños o manipulaciones, por eso lo publiqué el 14 de febrero, porque eso no es amor», concluyó.
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