• Una investigación publicada en la revista PNAS revela que el derretimiento del permafrost también afecta de forma drástica al fondo marino, formando profundos sumideros en algunas zonas.
  • Algunos de estos agujeros son más grandes que edificios de 6 pisos, y generan colinas llenas de hielo llamadas pingos.
  • Se han formado "extraordinariamente rápido", en tan solo una década.
  • ¿Ya conoces nuestra cuenta en Instagram? Síguenos

El deshielo del permafrost ya muestra algunas de sus catastróficas consecuencias. El Panel Intergubernamental para el Cambio Climático (IPCC) advirtió que aunque el calentamiento global se limite a valores inferiores a 2ºC, aproximadamente 25% del permafrost cerca de la superficie se habrá descongelado.

Además del gran peligro que supone el derretimiento de esta capa de hielo permanente para especies de animales y plantas, o la subida del nivel del mar que implica, el mayor riesgo es la liberación de CO2 a la atmósfera.

Los científicos calculan que el permafrost almacena cerca de 1.5 billones de toneladas de carbono, el doble de lo que hay en la atmósfera actualmente.

Ahora, una nueva investigación revela las terroríficas consecuencias del derretimiento del permafrost para el fondo marino del Ártico, un terreno más inexplorado que la corteza terrestre.

En el informe publicado en la revista PNAS se exponen los hallazgos tras mapear el mar de Beaufort en Canadá con un vehículo submarino operado a distancia y un sonar montado en un barco.

Sumideros profundos y colinas de hielo: los cambios dramáticos en el lecho marino ártico

Los científicos marinos dijeron a CNN que han descubierto sumideros profundos, en una parte remota del lecho marino del Ártico, uno incluso más profundo que una manzana de edificios de 6 pisos.

También hay colinas llenas de hielo que se han formado «extraordinariamente» rápido. 

Los cambios drásticos en el fondo del mar Ártico sucedieron entre 2010 y 2019, periodo en el que se llevaron a cabo 4 estudios de mapeo en un área 26 kilómetros cuadrados.

Nunca hasta la fecha se había examinado de este modo una zona de permafrost sumergido. 

Alrededor de una cuarta parte de la tierra en el hemisferio norte está cubierta por permafrost, explica dijo el geólogo marino Charlie Paull, científico principal del estudio.

¿Cómo se forman las depresiones y los agujeros?

Al final de la última edad de hielo, 12,000 años atrás, grandes extensiones de permafrost quedaron sumergidas cuando los glaciares se derritieron y el nivel del mar subió.

En tierra firme, el derretimiento del permafrost tiene serias consecuencias en el paisaje ártico, se genera cráteres formados por explosiones de metano, derrumba el suelo y causa la formación y desaparición de lagos, así como la aparición de montículos llamados pingos.

Todo ello afecta a infraestructuras como carreteras y oleoductos.

En el área estudiada se hallaron 41 agujeros en el mapeo más reciente que no estaban antes de 2010. Eran circulares y ovalados y tenían una media de 6.7 metros de profundidad. Incluso se detectó una depresión de 29 metros de profundidad, 225 metros de largo y 95 metros de ancho.

En cuanto a las colinas submarinas formadas por el deshielo, la mayoría eran de unos 50 metros de diámetro y 10 metros de altura, similares a los pingos terrestres de hielo. 

Entre las posibles hipótesis de la creación de sumideros no figura la explosión de bolsas de gas metano, ya que no se encontraron rocas ni tierra causadas por la explosión. 

Aunque el Ártico se esté calentando dos veces más rápido que el resto de la Tierra, los autores apuntan a que estos cambios no pueden atribuirse al cambio climático, pues los datos no muestran una tendencia al calentamiento en estas aguas de 150 metros de profundidad.

El origen está en la Edad de Hielo: los agujeros han sido probablemente causados por cambios climáticos mucho más antiguos

Los investigadores creen que los sumideros obedecen a cambios climáticos mucho más antiguos y lentos que el actual, que se remontan a la última Edad de Hielo y que podrían haber estado sucediendo durante miles de años.

«El calor transportado en los sistemas de agua subterránea que se mueven lentamente está contribuyendo a la descomposición del permafrost sumergido, creando grandes sumideros en algunas áreas y colinas llenas de hielo llamadas pingos en otras áreas», explica Paull. 

Cuando las cavidades llenas de agua reemplazan el exceso de hielo y colapsan, los sumideros se forman rápidamente. Cuando el agua salobre migran hacia arriba y se congela, se forman los montículos con núcleo de hielo.

Dicho de otro modo, los cambios de esta investigación responden a eventos de hace cientos, e incluso miles de años. Aunque no han sido desencadenados por el calentamiento global actual, pueden afectar al clima, contribuyendo al efecto invernadero a medida que el permafrost submarino se descongela.

Son numerosos los estudios que revelan el grave impacto del deshielo. La tasa de pérdida de hielo en la Tierra ha batido récords históricos: ascendió de 0.8 billones de toneladas en 1990 a 1.3 billones de toneladas en el año 2017, equivalente a una capa de hielo de 100 metros de grosor sobre Reino Unido.

Dicha investigación ha descubierto que la pérdida de hielo ha sido del 65% en total, en especial debido a la destrucción de las capas de hielo polar en la Antártida y Groenlandia.

AHORA LEE: La carne de laboratorio no está realmente libre de sacrificio animal —emplea suero bovino fetal

TAMBIÉN LEE: ¿La ciencia puede revivir especies extintas? Un nuevo estudio muestra lo complicado que sería

Descubre más historias en Business Insider México

Síguenos en FacebookInstagramLinkedInTwitter y Youtube

AHORA VE: