• La mexicana Giselle Mendoza utiliza la celulosa de las cáscaras de naranja para crear bioplástico.
  • De acuerdo con la joven emprendedora, México produce anualmente 4.5 millones de toneladas de naranjas, de las cuales entre 40% y 65% termina en la basura.
  • Además, Giselle fundó la startup Geco Technologies para continuar con el estudio de su emprendimiento y poder comercializarlo.

Giselle Mendoza ganó el primer lugar de los Premios Mundiales para Estudiantes Emprendedores (GSEA) en México y todo fue gracias a su emprendimiento: cáscaras de naranja para producir bioplástico.

El bioplástico de cáscaras de naranja se descompone en 90 días y está compuesto también de la pulpa del fruto.

De acuerdo con la joven emprendedora, México produce anualmente 4.5 millones de toneladas de naranjas, de las cuáles 40% a 65% terminan en la basura.

Giselle también fundó la startup GECO Technologies para seguir estudiando el bioplástico

Giselle dijo en entrevista a Forbes que la materia prima la consigue a partir de alianzas con productores, quienes le dan de forma gratuita los residuos de las naranjas.

La estudiante del Tecnológico de Monterrey dijo que las naranjas fueron su elección, debido a su gran contenido de celulosa —membrana celular de vegetales y hongos— y por sus propiedades nutricionales y medicinales.

A través de la startup GECO, fundada por Giselle en 2018, aún se realizan más investigaciones para poder comercializarla y poder llevar este material biodegradable a otras industrias.

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