- En medio de presiones inflacionarias, Banxico aumentó su tasa de interés 0.25 puntos porcentuales.
- Galia Borja deja solo a Gerardo Esquivel que votó en contra del aumento, en una decisión 4 a 1.
- Banxico adivirtió que, aunque la inflación es transitoria, hay riesgo en la formación de precios.
El Banco de México (Banxico) aumentó su tasa de referencia 0.25 puntos porcentuales o 25 puntos base en medio de una persistente inflación. Todos integrantes de la Junta de Gobierno de Banxico, excepto el subgobernador Gerardo Esquivel, votaron a favor del incremento, debido al riesgo que representa la inflación para la formación de precios.
En el último anuncio de política monetaria, la junta mantuvo su posición de que el reciente repunte en la inflación es transitorio. «A fin de evitar dichos riesgos se consideró necesario reforzar la postura monetaria, ajustándola a la trayectoria que se requiere para que la inflación converja a su meta de 3% en el horizonte de pronóstico», indicó el comunicado.
En esta ocasión, Banxico tomó una decisión en línea con la expectativa de los analistas del sector privado. Los 28 especialistas de la Encuesta Citibanamex de Expectativas esperaban un aumento de por lo menos 0.25% o 25 puntos base debido a las presiones en los precios.
De esta forma, la subgobernadora Galia Borja, que en decisiones anteriores había votado en contra del aumento de la tasa de referencia junto con Gerardo Esquivel, ahora observó un mayor riesgo en cuanto a la presión en los precios.
«Los pronósticos de inflación general y subyacente se revisaron al alza en relación con las publicadas previamente (ver cuadro). Considerando las características de los choques que las han afectado, los mayores aumentos corresponden a los pronósticos de corto plazo», indicó el anuncio.
«Se prevé que la medición anual de la inflación general y subyacente disminuya especialmente a partir de un año y que converja a la meta
de 3% hacia finales del horizonte de pronóstico», añadió.
Banxico señaló que la actividad económica se está recuperando gradualmente. Pero a un ritmo menor, y con diferencias entre las naciones por la disponibilidad de vacunas; la evolución de la pandemia y los estímulos al gasto público. Se observa una mayor inflación en materias primas, efectos de base de comparación con 2020 y cuellos de botella en el comercio internacional.
En México, la inflación se ubicó en 5.9% anual en la primera quincena de septiembre. Esto es casi el doble de la meta fijada por el banco central. Se espera que alcance 3.1% hasta el último trimestre de 2023. En los últimos meses, los energéticos, como el gas LP, han mostrado un incremento sustancial. Este es uno de los productos que más han tenido una incidencia en los precios al alza.
