- Pavel Durov es el multimillonario cofundador de Telegram y activista libertario.
- Debido a sus políticas de moderación de contenido laxas, la aplicación es conocida por difundir información errónea y discursos de odio.
- El conflicto en Ucrania puede obligar a Durov a empezar a moderar la plataforma.
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Cuando la invasión rusa de Ucrania entró en su undécimo día, el multimillonario fundador de Telegram, Pavel Durov, escribió una nota inusualmente personal a sus seguidores.
A pesar de su reputación mundial como el Mark Zuckerberg ruso, los abuelos maternos de Durov eran de Kiev, escribió, y muchos de sus parientes aún viven en Ucrania.
“Es por eso que este trágico conflicto es personal tanto para mí como para Telegram”, dijo Durov.
Un libertario acérrimo, Durov ha construido una marca en torno al desafío del estado autoritario y su presidente, Vladimir Putin. Ha vivido en el exilio en países como los Emiratos Árabes Unidos, Francia e Italia desde 2014; además, su política contra la censura lo ha convertido en un ícono entre los activistas rusos. En 2018, cuando Rusia bloqueó Telegram en el país, los manifestantes hicieron carteles que mostraban a Durov como un santo católico. Los activistas peregrinaban a San Petersburgo para tomarse selfies con un mural de su rostro.
Durov, que comparte detalles personales en las redes sociales pero rara vez en la prensa, parece disfrutar de su papel de provocador de Putin. En una foto publicada en su página de Instagram, posa tonificado y en topless junto a una piscina en Bali, Indonesia. El pie de foto dice: «Si eres ruso, tienes que unirte al #PutinShirtlessChallenge».
Desde que Rusia lanzó una invasión a gran escala de su vecino el 24 de febrero, Telegram se ha convertido en un campo de batalla digital donde ambos lados del conflicto pueden distribuir información y propaganda a usuarios de todo el mundo.
Pero a medida que prolifera la desinformación rusa en la plataforma, Durov se ha visto atrapado entre sus dos ideales más fuertes. Por un lado, el sueño ciberlibertario acérrimo de una internet abierta y sin moderación; por el otro, su profunda animosidad hacia el estado ruso y sus objetivos.
Telegram está en el corazón del campo de batalla de información de la guerra
La sólida base de usuarios de Telegram en Europa del Este ha preparado a la aplicación para desempeñar un papel clave en el conflicto. Con millones de usuarios en Rusia, Ucrania y Europa del Este, es una de las aplicaciones más descargadas de la región. A medida que el conflicto se desbordó, se convirtió en una parte central del espacio de información en torno a la lucha.
Cuando las fuerzas rusas invadieron Ucrania el mes pasado, el país hizo una solicitud sin precedentes para que los ciudadanos expertos en informática se unieran a un cuerpo voluntario de hackers para defender a su nación. Hizo este llamado en Telegram.
Mientras tanto, el gobierno ucraniano y su líder, el presidente Volodymyr Zelenskyy, se apresuraron a usar la aplicación para generar un flujo constante de mensajes políticos.
El representante oficial del presidente publica rutinariamente videos sinceros de Zelenskyy dirigiéndose al pueblo de Ucrania. A su vez, los usuarios que afirman ser combatientes ucranianos suben fotos de equipos militares rusos destruidos y videos de soldados rusos capturados que se retractan de su apoyo a la invasión y a Putin. (Este último, informó The Washington Post, puede violar las Convenciones de Ginebra). A principios de esta semana, el ejército ucraniano también dijo que destruyó un convoy ruso que se dirigía a Kiev gracias a una pista de Telegram.
Telegram también está fungiendo como una fuente importante de noticias
La falta de acceso constante a internet y electricidad en Ucrania también ha convertido a la aplicación en una fuente de noticias. Esto es particularmente cierto entre los ucranianos desplazados que no pueden acceder a las noticias impresas y transmitidas convencionales.
«La gente está copiando y pegando artículos completos en Telegram para no tener que usar ancho de banda para ir a un segundo enlace, por ejemplo», dijo Joan Donovan, directora de investigación del Centro Shorenstein de Medios, Política y Políticas Públicas, a Insider.
Pero la actitud tradicionalmente laissez-faire de la aplicación hacia la moderación del contenido —que ha permitido que proliferen en la plataforma puntos de vista antivacunas, extremismo y teorías de conspiración— también la ha convertido en un semillero de información errónea sobre zonas de conflicto.
«Las posibilidades de que nuestras condenas actuales sigan siendo relevantes para 2121 son escasas», dijo Durov en una publicación de julio defendiendo la actitud relajada de la aplicación hacia la moderación del contenido. «Estos casos hacen que combatir las noticias falsas y la desinformación sea particularmente desafiante».
En una marcada desviación de su puesto anterior, Durov anunció a finales de febrero que Telegram pronto podría bloquear la información errónea del gobierno ruso para evitar que difunda propaganda. Minutos más tarde, retrocedió el anuncio. Luego, a principios de este mes, cuando se intensificaron los combates en Ucrania, Telegram anunció que bloquearía el medio estatal ruso RT.
Eso hizo que el papel crucial de Telegram en el conflicto fuera el desafío más importante de Durov a Putin hasta el momento; sin embargo, a expensas de algunas de sus creencias más antiguas.
Durov tiene una larga historia de lucha contra el Kremlin
Esta no es la primera vez que Durov se encuentra en el lado equivocado del Kremlin.
En 2012, mientras Durov era el CEO de VKontakte, una popular plataforma rusa de redes sociales que fundó con su hermano Nikolai, miles de manifestantes tomaron las calles de Moscú para protestar contra el gobierno de Putin.
El gobierno ruso no tardó mucho en darse cuenta de que VKontakte se había convertido en una herramienta esencial para los activistas que organizaban protestas. Cuando el gobierno le pidió a Durov que censurara a los manifestantes en la plataforma, se negó rotundamente.
Al año siguiente, cuando estallaron las protestas en Ucrania contra la decisión del gobierno de distanciarse de la Unión Europea a favor de vínculos más estrechos con Rusia, conocidas como las protestas «Euromaidán», la plataforma volvió a convertirse en la columna vertebral de los activistas que organizaban manifestaciones.
VKontakte se había convertido en la plataforma de redes sociales más popular tanto en Rusia como en Ucrania. En aquel entonces atraía a más de 30 millones de usuarios únicos diarios. Si bien la popularidad de la plataforma enriqueció a los hermanos Durov, esto tuvo otros efectos. El más marcado es que transformó a Pavel Durov en un revolucionario de culto y un ícono de la libertad en internet y el ciberlibertarismo.
Pero a finales de 2013, la atención se había convertido en un lastre. En diciembre de ese año, el Servicio de Seguridad Federal de Rusia exigió que VK entregara los datos personales de las personas que habían organizado grupos de Euromaidán. Durov se negó. Unos meses más tarde, fue expulsado de su empresa y huyó de Rusia a la isla de St. Kitts y Nevis, en las Indias Occidentales. Más tarde obtuvo la ciudadanía en la isla al invertir 250,000 dólares en la Fundación para la Diversificación de la Industria Azucarera del país, según informó la prensa rusa en ese momento. Su hermano abandonó el país poco después.
«Desde diciembre de 2013, no tengo propiedades; sin embargo, todavía tengo algo más importante: una conciencia tranquila e ideales que estoy dispuesto a defender», escribió Durov en abril de 2014 en una famosa publicación sobre el rechazo de las autoridades de VK. Ilustró la publicación con la imagen de un perro con una sudadera con capucha.
Luego, los hermanos dirigieron toda su atención a Telegram, que fundaron en agosto de 2013. Si bien la aplicación no genera ingresos y se financia con la riqueza personal de los Durov, pronto se convirtió en el último vehículo de su antiautoritarismo.
Dicen en la página web de preguntas frecuentes de Telegram que «el aporte de Nikolai es tecnológico»; Pavel «apoya a Telegram financiera e ideológicamente».
El conflicto ha puesto a prueba los valores libertarios de Durov
Aunque los valores libertarios de Durov han sido puestos a prueba por grupos internacionales que piden a Telegram que elimine grupos terroristas como ISIS —así como discursos de odio y desinformación— ha resistido la presión de moderar la plataforma. No fue hasta la invasión rusa de Ucrania de este año que Durov mostró signos de que podría ser más flexible en el tema.
A pesar de estos movimientos recientes, los expertos creen que el enfoque actual de Telegram está beneficiando a Ucrania.
«Muchas personas esperaban que los rusos dominaran en gran medida el espacio de la información, en términos de actividades cibernéticas u operaciones de información. Y no han tenido el dominio que creo que mucha gente anticipó», dijo Michael. Daniel, jefe de Cyber Threat Alliance y exasistente especial del presidente Barack Obama. «Ciertamente, los propios ucranianos han demostrado ser muy hábiles en el uso del espacio de información».
El uso prolífico de la plataforma por parte del gobierno ucraniano también puede tener una consecuencia no deseada. Según Donovan del Centro Shorenstein, el flujo constante de soldados rusos capturados, políticos ucranianos desafiantes, granjeros ucranianos que cooptan tanques rusos y gente común que se prepara para defenderse también puede generar una sensación de complacencia entre los no ucranianos sobre el estado de el conflicto.
Hay muchos ucranianos en todo el mundo que están animando y levantando a su país y su patria”, dijo Donovan. “Pero puede dar la falsa impresión de que no están sufriendo».
Telegram puede ser un arma de doble filo
Dado que los apagones intermitentes de telecomunicaciones y los cortes eléctricos han convertido a Telegram en una parte esencial de la infraestructura de información de Ucrania, a menudo es un arma de doble filo para quienes lo usan.
Al mismo tiempo, aunque la desinformación desenfrenada en la plataforma crea una niebla de guerra digital que puede obstaculizar a los que están sobre el terreno, no todos los expertos están convencidos de que moderar Telegram sea completamente positivo.
«Ayuda a las personas a difundir una gran cantidad de evidencia de los crímenes de guerra que están ocurriendo», dijo a Insider Aliaksandr Herasimenka, investigador del Instituto de Internet de Oxford.
Herasimenka dijo que una política de moderación de contenido más fuerte podría obligar a la aplicación a eliminar evidencia de delitos cometidos por actores estatales y no estatales. Esto dificultaría que las autoridades investiguen o hagan que los perpetradores rindan cuentas.
Para Durov, lo que está en juego en el papel de Telegram en la guerra es claro.
«Insto a los usuarios de Rusia y Ucrania a sospechar de cualquier dato que se distribuya en Telegram en este momento», escribió Durov en febrero. “No queremos que Telegram se use como una herramienta que agrave los conflictos e incite al odio étnico”.
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