• La pobreza laboral se mantiene en una mayor proporción en zonas urbanas que en rurales.
  • Este indicador mide la proporción de trabajadores que no tienen ingreso suficiente para una canasta alimentaria.
  • En el primer trimestre de 2021, esta proporción aumentó a poco más de 39%, a pesar de aumentar la expectativa de crecimiento para México.

La pobreza laboral, es decir, las personas que no tienen un ingreso suficiente para pagar el costo de la canasta alimentaria, aumentó a poco más de 39% durante el primer trimestre de 2021. Esto lo advirtió el Consejo Nacional de la Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval).

Este aumento en la pobreza laboral se da en medio de un entorno de mayor optimismo de crecimiento económico. El pronóstico del Producto Interno Bruto (PIB) del Banco de México (Banxico) señala que la economía mexicana podría expandirse en el escenario más optimista hasta 7% en 2021. Esto por la recuperación económica y el impulso de una mayor demanda en Estados Unidos.

Pero la pobreza laboral aumentó casi cuatro puntos porcentuales con respecto al mismo periodo del año pasado. Y está impactando más a la población de zonas urbanas, la más afectada por los contagios de Covid-19 y por el confinamiento sanitario, según el documento De la Emergencia a la Recuperación de la Pandemia por Covid-19.

La diferencia entre la población urbana y rural impactada económicamente por el Covid-19 es sustancial. En las zonas urbanas, la pobreza laboral se ubicó en 48.9% de la población. Este es un aumento de 0.9 puntos porcentuales con respecto al primer trimestre de 2020. En tanto, en las zonas rurales, la pobreza laboral se encuentra en 36%, lo que representó un aumento desde el casi 32% del año pasado.

El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) informó que la creación de empleo se ubicó en casi 66,000 puestos en junio. Sin embargo, aún faltan casi medio millón de empleos por recuperar para llegar al nivel observado previo a la pandemia.

La pobreza laboral se explica por la disminución de los ingreso de los trabajadores. En el primer trimestre de 2021, el ingreso laboral disminuyó casi 5% con respecto al mismo lapso del año pasado. Pero los precios al consumidor actualmente están registrando un repunte de 5.8% anual en junio. Esta situación está disminuyendo considerablemente el poder adquisitivo del ingreso laboral, apuntó el Coneval.

Y sumado a la pérdida de ingreso, el Coneval indicó que la tasa de condiciones críticas de ocupación se ubicó en poco más de una cuarta parte de la población en el primer trimestre de 2021. Esto quiere decir que las personas que laboran en México trabajan más horas, en peores condiciones y con un menor salario que lo reportado previo a la pandemia.

Además de las consecuencias en el ingreso, las mujeres han sido doblemente afectadas por la contingencia sanitaria, según el Coneval. A la pérdida de trabajo, también se suma un incremento en la violencia doméstica y de género.

El Coneval también identificó a través de la Gestión Integral de Riesgos ante Desastres (GIRD), 20 afectaciones y 76 riesgos vinculados con el derecho a la salud, el trabajo, así como a diferentes dimensiones de bienestar económico.

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