• El aparato promete que tan solo con una prueba de aliento se puede detectar, hasta con ocho meses de antelación, la presencia de cáncer de mama en el cuerpo
  • La tecnología es una creación de un grupo de científicos mexicanos unidos por Labinnova
  • Se trata de un proyecto nacido en Jalisco que se especializa en el perfeccionamiento de análisis clínicos

Una “nariz” electrónica creada por una startup mexicana podría hacer la diferencia entre la vida y la muerte para las pacientes con cáncer de mama.

Actualmente en México los exámenes que existen para la detección oportuna del cáncer se limitan a sangre, orina y en el caso específico de cáncer de mama, la exploración física y estudios de mastografía, que son invasivos y en algunos casos dolorosos. 

Pero la startup mexicana Labinnova, dedicada a la modernización de exámenes clínicos, creó Breath Lab, una “nariz” electrónica que promete detectar la aparición del cáncer de mama con ocho meses de antelación, a través del aliento.

La importancia de detectar a tiempo

El cáncer de mama es el más frecuente entre las mujeres a nivel mundial, con un estimado de 1.7 millones de nuevos casos diagnosticados anualmente, de acuerdo con datos de la Estadística Cáncer de Mama, elaborada por el Centro Nacional de Equidad de Género y Salud Reproductiva.

Aunado a esto, la Sociedad Mexicana de Oncología (SMeO) considera que las elevadas cifras de muertes por cáncer se deben a los diagnósticos tardíos. El 60% de los casos de cáncer en México es detectado en etapas avanzadas, según datos de la organización. 

Por tal motivo, Labinnova se dio a la tarea de investigar una forma de detección oportuna de cáncer de mama, para reducir la mortalidad en el país. 

“Nuestra tecnología tiene una sensibilidad del 97%, eso significa que una mujer puede estar asintomática y ya traer cáncer”, asegura Omar Ornelas, fundador de esta startup.

De creación mexicana

José Tapia Ramírez, investigador del Departamento de Genética y Biología Molecular del Cinvestav, comentó que el aparato para convertir la información contenida en el aliento sería una gran novedad en el campo de los análisis clínicos en México. 

“Analizan el contenido del aliento, y lo comparan con una especie de matriz que contiene todos los marcadores que se han descrito; Compuestos Volátiles Orgánicos (VOCs´, por sus siglas en inglés), y mediante un algoritmo determinan la presencia de los compuestos respectivos que se han descrito para determinado cáncer (cáncer de mama o incluso cáncer de pulmón).

“La novedad sería el dispositivo para generar la información y hacer el análisis de los VOC´s, sin utilizar la espectrometría de masas (GS/Masas)”, señaló.

Una investigación larga

Tras 6 años de investigación, Ornelas y un grupo de científicos descubrieron que un aparato utilizado para la detección de químicos en el ambiente podría ser un aliado para el diagnóstico de patologías en el cuerpo humano. 

“Nosotros nos percatamos que había un equipo de uso industrial para la detección de químicos. Entonces migramos esa tecnología al área médica y nos dimos a la tarea de estudiar miles de alientos de mujeres positivas y negativas en cáncer de mamá”, comentó. 

Para la creación de la Breath Lab, Ornelas contó con la participación de especialistas de diversas organizaciones como el Instituto Nacional de Cancerología (InCan), el Instituto Nacional de Enfermedades Respiratorias (INER), la Universidad Autónoma de San Luis Potosí y de la Fundación del Cáncer de Mama (FUCAM).

De igual manera, para la creación del producto el empresario mexicano obtuvo apoyo económico del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), el cual otorgó 3 millones de pesos para la creación de este aparato. 

Detección oportuna del cáncer de mama

En total se requirió una inversión de un millón de dólares para la creación de Breath Lab, con la que se han recabado miles de muestras de pacientes en México que han permitido perfeccionar el algoritmo que detecta el cáncer de mama. 

El proceso es el siguiente: la “nariz” electrónica atrapa el aliento de una mujer en un globo metalizado, que se limpia con nitrógeno grado médico en el interior para eliminar las impurezas químicas. 

“Atrapas la muestra en el globo y a partir de ese momento, yo tengo 30 horas para evaluar la muestra. Traemos la muestra a una nariz electrónica, que tiene una aguja, pinchamos el globo y succionamos 40 microlitros de aliento con el que obtenemos datos que nos ayudan a diagnosticar la enfermedad”, explicó Ornelas. 

Actualmente, Breath Lab se encuentra en la etapa de patente y se busca que en los próximos meses comience su etapa de producción. El costo del estudio para el paciente sería de 650 pesos, de acuerdo con su creador. 

“Queremos establecernos como la primera prueba para poder hacer el tamizaje poblacional: recordemos que de cada 1,000 tomografías, solo 4 salen positivas. No hay necesidad de hacer tanto examen invasivo y doloroso, ya que con nuestra tecnología va a ser tan sencillo como soplar y a la mañana siguiente le llegue un mensaje por correo electrónico o Whatsapp” en la que se le notificará a la persona si padece o no de cáncer, puntualizó Ornelas.

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