- Es poco probable que Suecia evite las consecuencias económicas de la pandemia de coronavirus, incluso si ha evitado un cierre oficial, dijeron analistas al Financial Times.
- Si bien los bares, restaurantes y tiendas aún están abiertos, a las personas se les ha pedido practipar voluntariamente el distanciamiento social y trabajen desde casa si es posible.
- El dueño de un negocio le dijo al Financial Times que cuando la gente comenzó a darse cuenta del virus, rápidamente perdió el 30% de su negocio.
A pesar de que Suecia ha optado por evitar un cierre oficial, manteniendo abiertos los bares y restaurantes (y sufriendo un mayor número de muertes que en los países vecinos), es poco probable que la economía del país evite las consecuencias de la pandemia de coronavirus, dijeron analistas al Financial Times.
«Es demasiado pronto para decir que lo haríamos mejor que otros», dijo Christina Nyman, exfuncionaria de Riksbank, el banco nacional de Suecia, al Financial Times. «Al final, creemos que Suecia terminará más o menos igual».
David Oxley, economista senior de Capital Economics, dijo al periódico que la «actividad económica en Suecia es sombría, tal vez no tan sombría como en otros lugares, pero sigue siendo una disminución sin precedentes».
La situación de Suecia frente al coronavirus
Suecia ha reportado más de 3,500 muertes por el coronavirus. Ese número palidece en comparación con las decenas de miles de muertes en los Estados Unidos; sin embargo, la población más pequeña de Suecia (de poco más de 10 millones) hace que la tasa de mortalidad del país sea una de las más altas.
Si bien empresas como el fabricante de automóviles Volvo se han visto muy afectadas debido a la interrupción de sus cadenas de suministro globales, el impacto económico de la pandemia en Suecia, con su robusto sistema de bienestar, probablemente se verá diferente que en países como los EU.
El epidemiólogo principal de Suecia, Anders Tegnell, dijo la semana pasada que no anticipaba la alta tasa de mortalidad.
«Nunca calculamos realmente con un alto número de muertes inicialmente, debo decir», dijo. «Calculamos que más personas estaban enfermas, pero la cifra de muertos realmente nos sorprendió».
El dueño de una tienda de discos en Estocolmo le dijo al Financial Times que mientras su tienda permanecía abierta, el negocio cayó rápidamente en un 30%. «Funcionará durante un par de meses. Pero después de eso será muy, muy difícil», dijo el propietario, Micke Englund, al periódico.
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