- Joaquín Restrepo habla sobre su obra, y de los beneficios tecnológicos de producir obras de arte NFT.
- Esta vertiente está evolucionando lentamente entre museos y casas de arte reconocidas, a pesar de las críticas al NFT.
- Pero esta tecnología, aunque es susceptible a una burbuja financiera, tiene a la vez una convergencia con el mismo concepto del dinero.
Muchos tienen dudas sobre el arte NFT o Non-Fungible Tokens. Estos son archivos encriptados que son vendidos como una obra de arte original a cambio de criptomonedas. Aunque se cuestiona su elevado valor en subastas millonarias, para el artista digital Joaquín Restrepo, esta es una evolución tecnológica del arte.
«Si observas el proyecto de Elon Musk de colonizar Marte, o de Jeff Bezos que ofrecerá turismo espacial, es obvio que no llevaremos pinturas al óleo en el viaje», señaló el artista en entrevista para Business Insider México. «Las plataformas NFT le abren camino a muchos artistas que de otra forma no hubieran sido reconocidos».
El arte NFT, muchas veces, recibe la misma crítica que las criptomonedas. No son objetos tangibles con valor intrínseco. Pero un problema similar, surgió con el papel moneda y el dinero fiduciario. En Suecia, cuando se creo el primer banco central, este mantenía reservas de cobre y se usaban como moneda de curso legal.
Pero así como sería impráctico transportar a Las Meninas de Velázquez en un viaje interestelar para una exposición en Marte, en ese entonces era impráctico intercambiar pesados bloques de cobre para comprar un producto con un precio elevado. Un banquero de ese entonces, llamado Johan Palmstruch, comenzó a emitir notas que representaban una determinada cantidad de cobre al portador que comenzaron a llamarse «dálers». Este es el ancestro del dólar, y posiblemente el nacimiento del sistema financiero moderno.
Y así, estas notas tuvieron algunos de los mismos problemas que ahora enfrentan los NFT y las criptomonedas. Palmstruch comenzó a emitir más notas, que la cantidad de cobre en las bóvedas. Este primer banco central sueco logró expandir el crédito en la sociedad de ese entonces. Pero entonces sobrevino una crisis, cuando reventó la burbuja, y todos se dieron cuenta que estas notas no tenían un valor intrínseco; un símil que vivimos casi 400 años después con el reciente desplome de bitcoin.
«En los libros de Yuval Harari, nos dice que los seres humanos somos muy buenos creándonos historias», señaló Restrepo. En el libro de la «Historia del Homo Sapiens», este historiador israelí subraya que la sociedad humana está basada en conceptos imaginarios, en saltos de fe a los que otorgamos crédito.
Para Restrepo, esto mismo pasa con el arte. Una escultura invisible adquiere significado según la intención del autor. Pero al mismo tiempo, en un sentido económico, aumenta de precio si las personas creen que tiene un valor.
Restrepo indicó que una de las historias más grandes que nos hemos inventado ha sido el dinero. Aunque es una invención, nos permitió colaborar de una forma impresionante como sociedad. Y en este tema del arte, los NFT le ha otorgado reconocimiento a artistas que tenían trabajando en el arte digital desde hace décadas.
«Se abrió ese camino, de como puedes mostrar tu arte en pantallas. Está esta parte fácil del transporte. Imagínate estos espacios donde las paredes, el piso y el techo son unas pantalla, con el objetivo de mostrar arte», señaló Restrepo.
Aunque todavía existen dudas sobre el valor del arte NFT, ya que podría derivar en una burbuja financiera como los primeros dálers suecos, Restrepo indicó que cada vez hay más instituciones serias involucrándose en este creciente universo digital. Sobre todo después de las donaciones que han hecho artistas de NFT reconocidos, lo que ha obligado a la industria del arte a voltear seriamente hacia estos trabajos.
«Las casas de subastas fueron las primeras en brincar a esto. Creo que esto es súper chévere. Pero igual creo que es algo que va a tomar bastante tiempo en que todas las instituciones vayan tomando esto de forma seria. Con el tiempo veremos esta historia en donde se crean categorías de los puristas y no puristas», señaló.
Actualmente, Joaquín Restrepo, está exponiendo en Fredericksburg una mezcla entre escultura, pintura, además de su exposición virtual «Amor Fati». En julio agregarán obras que solo podrán ser disfrutadas en realidad aumentada. Y en el tercer mes, lanzará una serie de NFTs, en conjunto con la galería. También está trabajando con los artistas Raúl Marroquin y Trevor Kowalsi para construir un mundo virtual, una mezcla entre el infierno de Dante, y los Libros Negros del psicoanalista Carl Jung.
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