- El Magic de Orlando y los Hawks de Atlanta se enfrentarán esta noche en un partido de temporada regular de la NBA en la Arena CDMX.
- Los jugadores de ambos equipos reconocieron que la altura de la CDMX es un factor que deben tomar en cuenta durante el juego.
- Cambiar de altura provoca una variación en la concentración de oxígeno en el cuerpo, lo que significa que se dispone de una menor cantidad para el organismo.
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El Magic de Orlando enfrentará a los Hawks de Atlanta este jueves en la Arena CDMX en el partido número 32 de la NBA en México, cifra que supera la de cualquier otro país fuera de Estados Unidos y Canadá.
“Amo este juego”, dijo Jamahl Mosle, entrenador en jefe del Magic, a la prensa un día antes de disputar el NBA Mexico City Game 2023.
“Creo que es muy bueno para el basquetbol y continuar recibiendo el apoyo de los fans internacionales. Crece y se vuelve más grande. También ayuda a continuar entendiendo por qué es tan grande el basquetbol y cómo continúa uniendo a las personas de diferentes lugares”, agregó.
Y aunque los jugadores de ambos equipos coincidieron en que esta es una gran oportunidad para conocer más sobre la cultura mexicana y llenarse de energía con la atmósfera que crean sus fans desde las gradas, también reconocieron que jugar en la capital del país implica un nuevo reto: la altura.
Orlando tiene una altitud de tan solo 27 metros sobre el nivel del mar, mientras que Atlanta llega a los 320 metros. Sin embargo, la CDMX está a 2,240 metros sobre el nivel del mar.
Arantxa García Vicente, del Colegio Profesional de Fisioterapeutras de Aragón, explicó en un texto difundido por Zaragoza Deporte que una mayor altitud significa una menor presión atmosférica.
Por lo tanto, cambiar de altura provoca una variación en la concentración de oxígeno en el cuerpo, lo que significa que se dispone de una menor cantidad para el organismo.
Esa es la razón por la que se pueden desencadenar una serie de reacciones físicas, como el aumento de la frecuencia cardíaca, del número de respiraciones por minuto y de la producción de eritropoyetina (EPO), que es la hormona encargada de producir glóbulos rojos.
“Te diré algo que estoy experimentando, la altitud. ¡Wow! No es una broma”, respondió Cole Anthony, base del Magic, cuando se le preguntó cómo la ha pasado estos días en México.
“Estuve en mi cama anoche y esta mañana sin aliento, respirando profundamente para recibir suficiente oxígeno. Simplemente trataba de mantenerlo”, añadió.
Su compañero de equipo, Markelle Fultz, también aseguró que la altura es la mayor diferencia que hay entre jugar un partido de la NBA en la CDMX y cualquier otra ciudad.
Sin embargo, los jugadores de Orlando consideran que tienen una ventaja para superar la altitud de la capital de nuestro país. Como parte de la Conferencia Este de la NBA, en la temporada regular se enfrentan varias veces al Jazz de Utah, equipo cuya sede se encuentra en Salt Lake City, que está a 1,300 metros sobre el nivel del mar.
De hecho, el último juego que tuvieron contra el Jazz lo disputaron la semana pasada, el 2 de noviembre. El Magic se llevó la victoria con un marcador de 115-113.
“Creo que sí ayudó un poco (jugar en Salt Lake City), pero definitivamente sentí la altura en los primeros escalones que subí”, afirmó Franz Wagner, quien en septiembre se coronó Campeón del Mundo en basquetbol con la Selección de Alemania.
“Atlanta va a tener el mismo problema que nosotros, así que será divertido”, agregó.
“Lo sentí un poquito cuando empezamos a calentar, tengo que ser honesto. Aunque no creo que vaya a ser un tema que nos afecte. Es parte de estar aquí”, afirmó Jalen Suggs.
“Acabamos de jugar en Utah y creo que todos hicieron un gran trabajo allá. Sé que esta ciudad tiene una mayor altitud, pero todos van a hacer su trabajo. Hoy entrenamos para poder aclimatarnos, así que esperamos hacerlo bien”.
En los Hawks de Atlanta, Trae Young, su base estrella, compartió con la prensa que conoce a un par de compañeros que han notado los efectos provocados por la altitud en la CDMX.
“Yo todavía no, pero sé que es algo que pasa. He escuchamos que es peor en Denver y en Utah. Hemos jugado en un par de lugares en donde la altitud es dura, por lo que será algo que debemos tomar en cuenta para el partido”, dijo.
Patty Mills, quien está disputando su temporada 15 en la NBA y ha jugado múltiples partidos en México, sabe que uno de sus deberes como veterano en el equipo es preparar a sus compañeros.
“Estoy buscando las maneras de impactar en este equipo y hacer las cosas lo mejor posible para él. Comparto mis experiencias que pueden aportar un valor a los jugadores que son más jóvenes. Por ejemplo, venir a la CDMX y lidiar con esta altitud”, dijo.
“No sé cuántos de ellos ya lo han experimentado. Es otra variación que hay que tomar en cuenta en este juego”.
Independientemente de los retos físicos que implican jugar un partido de la NBA en la CDMX, Dejounte Murray, base de los Hawks, cree que los fans pueden esperar un partido duro y competitivo.
“Vamos a tratar de darles un show. No vamos a hacer que nadie pierda su tiempo y nos aseguraremos de que, cuando nos vayamos de aquí, todos nos sintamos agradecidos de haber tenido la oportunidad de jugar en México”, finalizó.
El NBA Mexico City Game 2023 comenzará hoy a las 8:30 p.m. (hora del centro de México). Podrás verlo en nuestro país por ESPN, Star Plus, TUDN y NBA League Pass, el servicio premium streaming de la liga.
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