- El Estadio Maracaná podrá recibir hasta 10% de su capacidad este sábado en la final de la Copa América.
- Brasil recibirá a Argentina y buscará ganar su segundo título consecutivo del torneo de la Conmebol.
- El alcalde de Río de Janeiro, Eduardo Paes, dijo que el partido servirá como una prueba para la ciudad brasileña.
El Estadio Maracaná podrá recibir hasta 10% de su capacidad este sábado en la final de la Copa América entre Argentina y Brasil, dijo este viernes el municipio de Río de Janeiro.
Como el aforo máximo del inmueble es para 65,000 personas, el partido más importante del torneo de selecciones sudamericanas podrá recibir hasta 6,500 aficionados.
Según la alcaldía carioca, el público autorizado para asistir al partido estará formado únicamente por acreditados e invitados de Conmebol. Todos deberán presentar una prueba PCR negativa para el Covid-19.
Sin embargo, no hay una prohibición explícita para la venta de entradas, aunque la decisión se anunció a menos de 48 horas antes del silbatazo inicial.
Inicialmente, la Copa América se iba a celebrar conjuntamente en Argentina y Colombia. No obstante, los colombianos renunciaron a la sede por las tensiones sociales del país y Argentina la abandonó alegando la situación de la pandemia del Covid-19.
El gobierno brasileño y la Confederación Brasileña de Futbol (CBF) se ofrecieron a recibir la competencia, aunque Brasil es el segundo país del mundo más afectado por la pandemia, con más de 530,000 muertos, sólo superado por Estados Unidos.
La final de la Copa América será una prueba para Río de Janeiro
A principios de este año, la Conmebol consiguió la autorización de 5,000 invitados para la final de la Copa Libertadores, también disputada en el Estadio Maracaná.
Hubo aglomeraciones y personas sin mascarillas en un mismo sector del estadio, lo que llevó al gobierno de Río a multar a la entidad que rige el futbol sudamericano.
Esta vez, para tratar de evitar que se repitan los problemas, la autorización prevé la liberación de hasta un 10% del aforo en cada uno de los sectores del estadio.
De acuerdo con el alcalde de Río de Janeiro, Eduardo Paes, la final de la Copa América será una especie de “prueba” para la ciudad.
“En la final de la Libertadores, los 5,000 (asistentes) se concentraron en un sector. Ahora, (habrá) 10% en cada sector del estadio, todos testeados e invitados”, explicó en conferencia de prensa.
“No deja de ser un evento de prueba para nosotros. Lo observaremos y tenemos un decreto para liberar eventos a partir de una serie de requisitos, pero por ahora no cambia nada para otros eventos”, agregó.
“No recibí presión alguna y no conozco a nadie de la CBF ni de la Conmebol”, aseguró. “Ellos decidieron y me informaron. Es un acontecimiento importante en el que son testeados y están espaciados”.
La selección brasileña enfrentará a su archirrival, Argentina, con el objetivo de ganar su segundo título consecutivo de la Copa América, tras conseguirlo en el torneo celebrado en Brasil durante 2019.
Con información de Reuters.
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