- Jennifer Grooms, de 36 años, es enfermera y fundadora de RekMed, una empresa de agendas para estudiantes de Medicina y Enfermería.
- Ella dice que quería crear una agenda visual y educativa para ayudar a las enfermeras en sus tareas diarias.
- Así es como Grooms construyó e hizo crecer su negocio.
Este ensayo se basa en una conversación con Jennifer Grooms, parte de un grupo de enfermeras y propietaria de un negocio de agendas. Fue editado por su extensión y claridad.
Yo era la última persona que pensarías que se convertiría en enfermera.
Al crecer, estaba absolutamente aterrorizada por la sangre. No podía mirarla, no podía estar a su alrededor, ni siquiera podía inyectar. Me costó mucho superar ese miedo, pero lo hice. Ahora he sido enfermera de urgencias y traumatología durante más de una década.
También tuve TDAH y dislexia no diagnosticada mientras crecía, así que tuve problemas en la escuela. Cuando decidí que quería ser enfermera, la gente no se lo tomó en serio.
Después de graduarme con una licenciatura en Psicología de la Comunicación, comencé a trabajar como consejera de salud mental en la sala de emergencias de un hospital infantil en 2008
Ahí me sentí más inspirada y decidida a convertirme en enfermera y comencé en 2012 mis estudios en la escuela de enfermería.
Yo era la presidenta de mi clase. Tenía un excelente trato en la práctica, pero mis calificaciones estaban en apuros porque soy pésima para los exámenes.
Como aprendiz visual, deseaba que hubiera recursos para estudiantes como yo que ofrecieran descripciones visuales de lo que son los términos médicos en términos sencillos, en lugar de solo libros de texto con gráficos.
Quería hacer ese tipo de recurso para enfermeras, así que comencé a tomar clases de diseño gráfico en 2017
Aprendí a dibujar y esquematizar conceptos médicos de una manera directa y explicativa; decidí compilarlos en una agenda.
Todavía trabajaba a tiempo completo como enfermera, así que avanzaba en el material durante cualquier tiempo libre.
En noviembre de 2019, puse oficialmente mi tienda en línea, creé mi primer anuncio de Instagram y vendí 500 agendas en seis semanas
Después de imprimir más, vendí 1,000 agendas en los siguientes dos meses y me di cuenta de que realmente podía tener algo especial.
Ahora, solo unos años después, con casi 5,000 agendas vendidas, ha sido un «viaje salvaje» más allá de mi estancia en el grupo de enfermeras.
Trabajé horas extra para ahorrar alrededor de 20,000 dólares para financiar la impresión del primer lote de agendas
Después de eso, utilicé los ingresos por ventas y un pequeño préstamo personal para continuar con la producción.
Una vez que alcanzamos la marca de 500,000 dólares en ventas —en alrededor de seis meses después de nuestro lanzamiento—, comencé a usar el capital de Clearco y Shopify para ayudar a obtener financiamiento rápido.
Es muy difícil recibir un préstamo cuando tu negocio tiene menos de dos años. Clearco y Shopify marcaron la diferencia.
Creo que lo que hace que nuestros productos se destaquen es que su diseño se basó en mi experiencia de primera mano en la Enfermería.
Las agendas tienen diagramas del cerebro, la médula espinal, los pulmones, los intestinos y más recursos que son útiles para las enfermeras y los estudiantes que trabajan.
En nuestro primer año en el negocio, alcanzamos un millón de dólares en ventas
Acabamos de celebrar nuestro segundo aniversario y cerramos nuestro segundo año en el negocio con 1.5 millones de dólares en ventas.
Dejé de trabajar como enfermera una vez que el negocio despegó y apareció el Covid-19.
Pero recientemente acepté una asignación de tres meses en un hospital local para mantener mis habilidades y educación. Con la pandemia y la escasez de enfermeras, también quería ayudar más allá de las agendas.
Trabajar en la sala de emergencias me preparó para administrar mi negocio de maneras que no me di cuenta en ese momento.
Como enfermera, cuando un paciente se está muriendo frente a ti, intentas una serie de intervenciones diferentes que no siempre tienen éxito. Pero si algo no funciona, no puedes detenerte e irte a casa, debes pasar al siguiente intento de resolver el problema.
Del mismo modo, como dueña de un negocio, no me regodeo si algo no funciona, sigo adelante y pruebo algo nuevo.
Cuando me negaron la financiación de un banco o cuando un negocio de papel se enfrentó a una escasez de papel, supe que simplemente tenía que tropezar, estabilizarme e intentarlo de otra manera. Y antes de delegar una tarea a mis empleados, me aseguro de hacer ese trabajo específico yo misma para que mis expectativas sean realistas.
Cuando comencé con RekMed, administrar un negocio era un mundo completamente nuevo para mí y tuve que aprender mucho.
Si estás incursionando en el espíritu empresarial desde una carrera diferente como la mía, mi consejo es que consigas algunos mentores sólidos e investigues para prepararte hacia el éxito.
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