- El meme del "perro panzón" se ha vuelto viral recientemente en redes sociales.
- Sin embargo, más allá de la ternura, podría tratarse de una mascota enferma. Si tu perro se le parece, llévalo al veterinario.
- Es común que los perros tengan parásitos, pero también podría tratarse de un problema cardiacco.
En los últimos días, un meme ha causado risas y ternura entre las y los usuarios de Facebook y Twitter: el del «perro panzón».
«Ay, miren. Miren al ‘perro panson (sic)’. Todo chiquito, todo panson», dice una de las publicaciones. El can es un cachorro con un abultado vientre que debería preocupar a cualquiera.
Evita al «perro panzón»
Si tu perrita o perrito se ve como el cachorro «panzón», llévalo con una veterinaria o veterinario, ya que puede tener diversos padecimientos.
«La primera opción casi siempre son parásitos, pero puede haber otras causas, como un problema de corazón que provoca que el líquido se acumule en abdomen y desnutrición. Cuando no hay suficiente alimento, se fuga líquido a la cavidad abdominal», explica la especialista Leticia Velázquez en entrevista.
Es importante que vigiles a tu mascota, ya que, sin importar su edad, puede contraer parásitos.
«Si es muy grave la parasitosis, a cualquier edad puede morir, pero casi siempre se complica en cachorros», detalla.
Mientras tanto, el veterinario Javier Riveros comenta que, en caso de ser perros adultos, se deben analizar también otro tipo de enfermedades.
«Si son de edad mediana o adulta, pueden ser problemas hepáticos o cardiovasculares», puntualiza en entrevista.
Otro padecimiento que puede provocar esa «pancita» es la ascitis, que es la acumulación anormal de fluidos en la cavidad del abdomen.
«Eso generalmente se presenta en perros viejos, en aquellos mayores de 10 años», revela.
Riveros agrega que, cuando notes que tu mascota está «gordita», es vital que se investigue cuál es la causa.
«Las enfermedades parasitarias pueden provocar daños en el hígado por la migración de los parásitos o incluso, algunos de ellos, tienen acciones irritativas, expoliatriz (muerden el intestino), obstructivo (provoca dolores intensos), que no pueda aprovechar el animal el bolo alimenticio y migración larvaria (que se muevan hacia otros órganos)», comenta.
¿Cómo detecto que mi perro está enfermo?
Velázquez comenta que la mayoría de los padecimientos se reflejan en el comportamiento del perro.
«El paciente lo manifiesta con el estado de ánimo; se ponen más pasivos, bajan el consumo de alimento. Si son parásitos puede haber diarreas intermitentes y físicamente podemos verlos en el excremento. No todos son visibles, pero la mayoría sí», afirma.
Lo primero que debes hacer en caso de que sospeches que tu mascota está enferma, es acudir al veterinario, donde le revisarán y harán los exámenes de laboratorio pertinentes.
Más vale prevenir
Algunos de los padecimientos en perros pueden prevenirse, dice la veterinaria, salvo el de corazón, ya que es una cuestión congénita.
«En parásitos hay protocolos de desparasitación periódica, que se hace 2 o 3 veces al año», señala.
En caso de que tengas un cachorrito, Riveros sugiere que esto sea cada 3 meses.
«Puede ser de 3 a 6 meses, este último si no tienen demasiado contacto con la calle, pero debe ser un hábito continuo para enfrentar enfermedades parasitarias», recomienda.
¿Tienes gatos u otros animalitos? Ojo, porque ellos también pueden infectarse, especialmente si son mamíferos.
«De hecho, casi cualquier animal puede infestarse de parásitos, hasta reptiles», puntualiza Velázquez.
¿Y si es obesidad?
Si tu «perro panzón» tiene vientre abultado y es por obesidad, debes brindarle la atención pertinente para que no sufra.
«El abuso en el consumo de alimento y la falta de ejercicio, de actividades físicas. A veces, el propietario no tiene tiempo suficiente para hacer que ese perrito se mueva o juegue; también pueden vivir en espacios reducidos y la ingesta de calorías es mayor que la quema (…). Es la cantidad y la calidad de lo que consumen, así como el movimiento», expone.
Es importante que se atienda ya que puede derivar en otros padecimientos, por ejemplo, diabetes.
«La primera afectación que vemos es en articulaciones porque cargan más peso en las rodillas y hombros (…) También tienen problemas de corazón; se infartan por sobrepeso», hace hincapié.
Riveros refiere que también pueden presentar problemas hormonales.»Realmente le resta calidad de vida al animalito a largo plazo», comenta.
Para que tu perrito o perrita regrese a su peso ideal, Velázquez recomienda acercarse con profesionales en estas especies.
«Se mejora la dieta con alimentos balanceados con mayor cantidad de fibra y menos carbohidratos, casi siempre es en croqueta. A esto se le suma la actividad física y no dejar los platos en libre acceso», menciona.
Para finalizar, Riveros concluye con que las y los dueños deben ser muy cuidadosos con la comida que les dan a sus animales.
«Dan golosinas o cosas entre comidas (…). Son perros que tienen mucho apego emocional y los propietarios ceden al chantaje o lo humanizan tanto y, como la gente engorda por temas emocionales y el perro tiende a ser un soporte emocional, le dan alimentos», concluye.
Con información de Digitallpost
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