- La FTC está investigando a OpenAI por su falta de transparencia con respecto a los datos y la privacidad.
- La FTC exige detalles de Open AI sobre cómo y dónde recopila datos.
- La investigación se suma a los crecientes desafíos legales presentados contra la compañía de inteligencia artificial detrás de ChatGPT.
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OpenAI podría necesitar pronto un buen equipo de abogados, presumiblemente uno que no use ChatGPT para escribir sus informes.
La Comisión Federal de Comercio (FTC) de Estados Unidos inició una investigación sobre OpenAI para determinar si la empresa violó las leyes de protección al consumidor por su falta de transparencia con respecto a la recopilación de datos y la privacidad, según documentos publicados por The Washington Post.
En el documento de 20 páginas obtenido por The Post, la FTC ordenó a OpenAI que detallara cómo y dónde ha recopilado todas las fuentes de datos utilizadas para entrenar sus grandes modelos de lenguaje (LLM, por sus siglas en inglés), que es la tecnología de inteligencia artificial en la base de su chatbot ChatGPT.
La agencia también exigió que OpenAI explicara las precauciones que toma para evitar que la información personal caiga en los conjuntos de datos utilizados para entrenar a sus LLM.
Si se determina que ha violado estas leyes, OpenAI podría verse obligado a pagar multas y se le ordenaría seguir prácticas estrictas de gestión de datos descritas en un decreto de consentimiento (la FTC ha emitido decretos de consentimiento a empresas tecnológicas como Twitter y Facebook en el pasado.)
El caso de la FTC contra OpenAI podría abrir el camino a nuevas regulaciones para la IA generativa
La FTC puede ser la mayor amenaza regulatoria que se cierne sobre la empresa, que ha sido el símbolo del aumento de la popularidad de la IA generativa desde el lanzamiento de ChatGPT en noviembre pasado.
Y con el aumento de las demandas presentadas contra Open AI, es posible que la empresa no solo sea pionera de una nueva frontera de la tecnología, sino un precursor de posibles regulaciones legales en la industria de la IA generativa.
Al igual que la investigación actual de la FTC, muchos desafíos legales existentes para OpenAI se refieren a la recopilación de datos de la empresa para entrenar a ChatGPT.
OpenAI ya enfrenta demandas en temas de privacidad y datos personales
En junio, 16 demandantes anónimos demandaron a OpenAI, alegando que la empresa recogió «cantidades masivas de datos personales» de la web para desarrollar ChatGPT.
Numerosos autores, incluida la comediante Sarah Silverman, también han demandado a OpenAI. Alegan que la empresa recopiló sus obras protegidas por derechos de autor para entrenar a ChatGPT, citando la capacidad del chatbot para proporcionar resúmenes precisos de sus libros.
El CEO y cofundador de OpenAI, Sam Altman, viajó mucho, literalmente, para presionar a los líderes mundiales sobre la IA generativa. Según se informa, Altman instó a los legisladores a considerar regulaciones más débiles sobre la tecnología de rápido surgimiento.
Pero Altman aún no ha comentado sobre ninguno de los desafíos legales recientes dirigidos a su empresa. OpenAI no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios sobre la investigación. Un portavoz de la FTC se negó a comentar cuando Insider lo contactó.
En el pasado, Altman ha dicho que quiere evitar que OpenAI se meta en problemas legales. En una conferencia tecnológica en Abu Dhabi, le dijo a la audiencia que no tenía planes de hacer pública OpenAI, por temor a que el modelo comercial inusual de la compañía generara desafíos legales por parte de los inversores.
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