- Originaria de Mexicali, Baja California, Fernanda Montiel forma parte de Copyfast Racing, maneja un Polaris RZR 1,000 y compite en la clase 19 de CODE Off Road y Record Off Road.
- Montiel platicó con Business Insider México sobre los retos que enfrenta diariamente en su carrera, con la que sueña algún día representar a México en Dakar.
- La piloto también compartió qué se necesita para romper el techo de cristal en las categorías off road y cómo se puede impulsar este deporte en nuestro país.
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Fernanda Montiel creció en una familia apasionada por el deporte motor y que estaba acostumbrada a las carreras. A los cinco años incluso le pidió a su papá que la dejara andar en moto, aunque él se negó.
“No me hacía caso porque pensaba que era una niña muy chiquita. Decía: ‘Está botada’”, recordó en entrevista con Business Insider México.
Cinco años más tarde, su padre finalmente le dio una moto y la originaria de Mexicali, Baja California, comenzó a competir y a ganar trofeos. No obstante, a los 15 años decidió sustituir las motos por autos, específicamente vehículos off-road (todoterreno, en español).
Contó que cuando los miraba no le parecían muy grandes, pero estaban equipados. «Fue cuando le dije a mi papá y él me contestó que sí”, dijo. “Es ahí donde me he mantenido. La verdad estoy muy feliz. Es una categoría súper divertida”.
Actualmente, Montiel tiene 21 años, forma parte del equipo Copyfast Racing, maneja un Polaris RZR 1,000 y compite en la clase 19 de los seriales CODE Off Road y Record Off Road.
El primero se celebra en ciudades como Mexicali y San Felipe, por lo que predomina el desierto. Cuenta con seis carreras, entre las que destaca Racing for Boobs, en la que solo pueden competir mujeres y pone énfasis en la lucha contra el cáncer de mama.
Por su parte, Récord se disputa en Ensenada y territorios aledaños. Su calendario incluye cinco carreras que se celebran en territorios como veredas y cerros, de acuerdo con la piloto.
En ambos seriales, la clase se diferencia de otras (como la 29 y 39) porque el vehículo que se utiliza no es turbo y permite modificaciones, principalmente para garantizar la seguridad de quienes van abordo.
“El tipo de jaula la hacen un poco más cerrada. Es para que, en caso de un accidente o volteada, tu jaula esté completamente segura y no te pase nada”, dijo Montiel. A esto hay que agregar que ella siempre corre con casco y un traje antifuego que la protegen de cualquier incidente que pueda sufrir.
“Igual hay modificaciones en la suspensión el tamaño de la llanta, el motor, etc. Todo es para que el auto pueda ser más rápido y competitivo en tu clase”, añadió.
¿Qué implica ser piloto off road?
Al igual que con otras categorías del automovilismo, Montiel se prepara físicamente en el gimnasio para poder pasar horas detrás del volante, principalmente con sus hombros y brazos.
Para la mexicana, entrenar no es un sacrificio, ya que le ayuda a despejarse de su rutina, que incluye cruzar todos los días la frontera con Estados Unidos para trabajar en una joyería.
“En las carreras obviamente me desconecto de todo y me concentro en lo mío. Lo mismo siento en el gimnasio. Trabajo en mí misma, física y mentalmente. Me desconecto y sé que me favorece en todos los aspectos”, dijo.
Su entrenamiento también incluye conducir su vehículo, especialmente dos semanas antes de cualquier carrera para poder conocer la pista y afinar detalles.
No obstante, su equipo también aprovecha su “tiempo libre” para corregir cualquier error que puedan cometer y vencer miedos. Esto incluye superar curvas que parecen ser más desafiantes que otras y dejar de lado la posibilidad de sufrir un accidente.
“Siempre he tenido miedo de que me pase algo a mí. No solo es mi vida, sino también la de mi copiloto”, dijo Montiel. “Siempre va a haber miedo, pero tenemos que hacer un gran papel. Si llega a pasar, espero que no sea algo muy grave”.
En las carreras, la mexicalense también lidia con el estrés de que obtener un buen resultado no depende únicamente de ella, ya que su auto puede sufrir fallas mecánicas.
“Siempre hemos dicho que ‘fierros son fierros’. Trato de estar tranquila y no meterme muchas ideas en la cabeza que me lleven a ya no querer correr”, platicó.
“El día de la carrera estoy nerviosa, pero trato de mentalizarme que todo va a estar bien. Yo voy a hacer mi papel y mi copiloto el suyo. Confío en él. Marcamos nuestras líneas y confiamos en que nuestro equipo va a hacer su trabajo. Cuando dan el banderazo de la carrera, se van los nervios y queda adrenalina pura”, añadió.
El automovilismo permite a Fernanda Montiel unirse con su equipo y su familia
Al principio de su carrera, el padre de Fernanda Montiel fue su copiloto, como en su primera Racing for Boobs, que hasta la fecha recuerda como algo “divertido” y “chistoso”.
“Era principiante. Le tenía mucho miedo a la velocidad y pegarle a carros para que se quitaran de la pista”, contó en entrevista con Polaris México.
“Mi papá iba muy desesperado gritándome que le pisara. Yo tenía muchísimo miedo. Todavía recuerdo que él, estando de copiloto, me quitó el volante para moverme de carril”.
“Yo lo único que quería era desconectar el intercom y ya no escucharlo hasta que terminara la carrera. Finalizamos con un primer lugar y, claro, un abrazo”, añadió.
La piloto dijo a Business Insider México que su papá ya no es su copiloto, pues prefirió “ser espectador porque chocamos mucho”. Actualmente, quienes la acompañan a bordo de su RZR 1,000 son Jackson Quintanilla o Fernando Ramírez.
“No solo saben leer un mapa, sino que también saben sobre mecánica en caso de que pase algo. Son muy rápidos y hábiles para detectar cualquier problema y poder solucionarlo en la carrera”, afirmó la mexicana.
“Cada uno cumple con su papel, pero lo tomamos como niños chiquitos. Cuando tenemos que pegarle a un carro para que se quiten me dicen: ‘pégale, pégale’, aunque a mí me dé un montón de miedo”.
Aunque su familia no “compite junto a ella”, Montiel siempre cuenta con su apoyo y motivación, una de las cosas que más disfruta a la hora de correr.
“A pesar de que pueda ser una carrera muy difícil, siempre nos llevamos la anécdota de qué tan divertida es. Es un momento muy padre que disfrutamos muchísimo”, enfatizó.
“Cuidado con Fernanda Montiel”
Para Montiel, las carreras en las que ha competido la han impulsado a ser una mejor piloto. Pero la que más la ha marcado fue la primera que disputó contra hombres.
“Yo sentía que me iban a pegar, que me iban a chocar y decir: ‘Quítate de la pista’”, recordó. “En la última vuelta íbamos mi papá y yo. Me le pegué a un carro y así nos fuimos. El punto es que él me pasó y yo llegué dos segundos atrás. Pensé: ‘Bueno, llegamos en cuarto o tercer lugar”.
“Cuando llegamos a la meta nos estacionamos. Llegué junto a él (su rival), me quité el casco y salió mi cabello. Él volteó a verme y dijo: ‘No manches, ¡felicidades! Hiciste muy buen papel como corredora. Nos aventamos una muy buena carrera”.
Cada vez que se pone detrás del volante, la mexicana rompe con un estereotipo que sigue persiguiendo a las mujeres que practican deportes y que afirma equivocadamente que “no son tan buenas como los hombres”.
Ahora, en las carreras sus rivales incluso advierten que hay que tener “cuidado con Fernanda Montiel”; y la misma competencia que existe con ellos la motivan a superarse y buscar ser mejor.
¿Cómo romper el techo de cristal en el automovilismo off road en México?
La mexicalense reconoció que con el paso de los años ha aumentado la participación de mujeres en carreras off road.
“Hay niñas en mi categoría y en carros grandes. Está muy padre porque vencemos varios estereotipos. No por el hecho de ser una mujer vas a hacer un mal papel”, dijo.
“Se trata de cada persona, que esto te apasione y las ganas que tú le pones. Eso va a determinar tu papel como corredora”, añadió.
Sin embargo, ella cree que se necesitan organizar más fechas en las que solo compitan entre mujeres para que esta cifra pueda aumentar.
“La principal razón por la que las mujeres no quieren correr es porque están los hombres. Piensan que las van a hacer menos, les van a pegar o les van a echar todo el polvo por ser mujeres. Siento que se detienen mucho por eso”, dijo.
Eventos como Racing for Boobs animan a las mujeres a participar. En ellos ganan confianza y se enamoran aún más del deporte, para luego brincar a carreras mixtas.
Que haya una mayor representación femenil en el deporte motor también permite que las mujeres tengan puntos de referencia que las impulsen a querer intentar algo nuevo.
En el caso de Montiel, su mayor inspiración es la piloto off road Kristen Matlock, quien es apodada la “Ironwoman” y también conduce un Polaris RZR.
“Siempre dije: ‘Yo quiero ser como ella, pero para serlo tengo que empezar a correr”, compartió la mexicana. “Todos empezamos desde cero. Sé que Kristen Matlock al principio también tenía miedo, pero lo hizo y se convirtió en una gran corredora”.
“Tienes que tener objetivos, intentar cosa nuevas y que tu miedo no sea más grande de lo que quieres hacer con tu pasión”, agregó.
Los patrocinios: un elemento fundamental en cualquier categoría del automovilismo
Ser piloto en una categoría off road es costoso, de acuerdo con Montiel. Aunque ella no reveló a Business Insider México una cifra específica, sí explicó que cualquier tipo de patrocinio siempre ayuda, aunque sea “para la gasolina”.
En los seis años que ha competido en un vehículo RZR, para ella ha sido difícil conseguir patrocinios. En 2018, incluso estuvo a punto de perderse la última carrera de la temporada —estaba peleando un segundo lugar en el campeonato— porque su familia no tenía para pagar la inscripción.
“Me puse a pensar qué hacer y le escribí a personas diciéndoles cuánto podía ofrecer. Al final conseguimos para la inscripción y fuimos”, platicó.
De acuerdo con la mexicalense, la clave para trabajar con las marcas está en demostrar que puede obtener un buen resultado y que, al mismo tiempo, puede ofrecerles publicidad.
“Siempre van a haber personas que te apoyen. Siempre van a haber negocios, chicos, grandes, lo que sea. Solo es cuestión de buscar y rodearte de buenas personas que crean en ti”, dijo.
Fernanda Montiel sueña con competir en Dakar
Con solo 21 años, Fernanda Montiel se describe a sí misma como una persona muy competitiva a la que le gusta poner el cuerpo y el alma en obtener buenos resultados.
Sus sueños incluyen representar a México en Dakar, un rally organizado por Amaury Sports Organisation, que también está detrás de eventos como el Tour de France, el Maratón de París y el Abierto de Francia de Golf.
Dakar es considerado como uno de los rallies más famosos y duros del mundo. Aunque sus últimas ediciones se han celebrado en Arabia Saudita, también ha visitado países americanos como Argentina, Chile, Perú, Bolivia y Paraguay.
Para lograr este objetivo, la piloto mexicana está trabajando para vencer sus miedos en la pista y mejorar sus habilidades al volante.
“Tengo que dar ciertos pasos con mi equipo para poder lograrlo en unos años, espero que no muchos. Es mi gran propósito”, dijo.
No obstante, también reconoce que este deporte todavía tiene mucho por delante en nuestro país, especialmente motivando a más personas para que lo practiquen.
“Creo que deberían hacerse más carreras locales que vayan juntando más personas y carros”, explicó. “Los que tienen su RZR abandonado y no se animan a competir, que hagan una carrera rapidita para que vayan todos”.
“Siento que hacen falta más ese tipo de carreras. Ejemplo, 32 kilómetros y que vengan todos el domingo”, finalizó.
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