• EU pretende aligerar la tensión con China en un escenario global marcado por grandes conflictos.
  • Los presidentes Joe Biden y Xi Jinping se reunirán hoy en el marco del foro anual dela APEC.
  • Biden enfrenta enormes obstáculos, ya que las diferencias entre las potencias se vuelven cada vez más marcadas.
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El presidente Joe Biden parece estar interesado en aliviar las tensiones con su principal rival global, el líder chino Xi Jinping, en medio de un escenario de caos y conflicto global.

Ambos se reunirán hoy en San Francisco en el marco del foro anual de Cooperación Económica de Asia-Pacífico (APEC), en el primer encuentro cara a cara entre líderes estadounidenses y chinos en un año.

Según reportes, ambos países buscan restablecer las comunicaciones militares que se cortaron después del incidente del globo espía de febrero y encontrar puntos en común en cuestiones que incluyen formas de limitar el uso de la inteligencia artificial en sistemas de armas nucleares.

Pero, el intento de Biden de suavizar las relaciones enfrenta enormes obstáculos, ya que las diferencias entre las potencias se vuelven cada vez más marcadas. En conflictos desde Ucrania hasta el Medio Oriente, China y EU están en desacuerdo, respaldando a poderes rivales en la lucha por la supremacía global.

China, Rusia e Irán integran un bloque anti-EU

Xi/Putin
Putin y Xi Jinping. Foto: AFP vía Getty Images.

China está aprovechando los conflictos para presentarse como el paladín de naciones que se consideran oprimidas desde hace mucho tiempo por la dominación global occidental, y está ganando nuevos aliados en el proceso.

En su búsqueda de reemplazar a EU, Pekín ha establecido lazos cercanos con sus archienemigos globales: Rusia e Irán.

«Tres potencias antiestadounidenses y antidemocráticas ahora están trabajando juntas para enfrentar, atacar y socavar los intereses estadounidenses y aliados en múltiples partes del mundo», dijo Jonathan Ward, CEO del Atlas Group.

La rivalidad se está desarrollando en varios conflictos globales

Xi ha proporcionado al presidente ruso Vladimir Putin apoyo diplomático y económico clave en su invasión a Ucrania. Mientras que la administración Biden ha entregado 75,000 millones de dólares a Ucrania para ayudar en su defensa.

China ha respaldado la postura del Kremlin al retratar el conflicto no como una guerra de agresión no provocada por Rusia, sino como una respuesta justificada a la intromisión occidental en la región.

En el Medio Oriente, China ha criticado el bombardeo de Gaza por parte de Israel, mientras que EU lo ha defendido como una respuesta justa a los ataques terroristas del 7 de octubre del grupo militante Hamás respaldado por Irán y ha desplegado buques de guerra en la región para disuadir la agresión iraní.

La postura de Pekín, consideran analistas, está dirigida a ganar países que durante mucho tiempo se han sentido molestos por la hipocresía percibida del Occidente en el conflicto entre Israel y Palestina, incluyendo muchos de los aliados de EU en la región.

«Las guerras en Europa y el Medio Oriente ahora significan que dos de los tres estados autoritarios en este eje están en guerra o en un estado de guerra por poderes intermedios, y ambos estados, Rusia e Irán, están respaldados por China», dijo Ward.

Xi muestra nuevo poder

El Foro de la Franja y la Ruta para la Cooperación Internacional de octubre en Beijing fue una muestra de fuerza de Xi y un desafío al poder estadounidense.

El invitado de honor en la cumbre fue Putin, quien está sujeto a una orden de arresto de la Corte Penal Internacional por crímenes de guerra rusos en Ucrania.

Belt and Road 2023
El presidente ruso Vladimir Putin y el presidente chino Xi Jinping posan con los líderes de las delegaciones que participan en el Tercer Foro de la Franja y la Ruta en Beijing el 18 de octubre de 2023. Foto: Grigory Sysoyev.

Bajo la iniciativa la Franja y la Ruta, China ha proporcionado miles de millones en préstamos de infraestructura a países en el llamado «sur global» de naciones en desarrollo. Pero se trata de más que establecer lazos económicos, según Ward.

«Iniciativas como a Franja y la Ruta, que muchas naciones emergentes esperaban que fueran solo sobre desarrollo económico, son iniciativas geopolíticas cada vez más evidentes en contra del Occidente», dijo Ward.

«Incluso si no lo reconocen ahora, las naciones emergentes eventualmente tendrán que elegir bandos a medida que China utilice una combinación de incentivos económicos, apoyo a estados agresores como la Rusia de Putin y mendacidad diplomática para remodelar el orden internacional», agregó.

Fuerza global con China a la cabeza

En la reunión, Xi presentó nuevos aliados del sur global que han apostado por un mundo formado por el poder chino y no el estadounidense.

«En una era de gran competencia de poder, la imagen reforzada de China como defensora de la causa del Sur Global no es insignificante para influir en la posición del mundo en desarrollo», dijo a Business Insider Yun Sun, analista del Stimson Center.

Jeremy Chan, experto en política exterior china en Eurasia Group, dijo que la cumbre y el reciente intento respaldado por China de expandir la alianza BRICS se centraron en construir lazos con un grupo selecto de naciones.

China «está más interesada en profundizar las relaciones con unos pocos países socios estratégicamente importantes, como los estados árabes, Etiopía y Argentina, en lugar de seguir su estrategia anterior de ‘en todas partes a la vez’, que definió en gran medida los primeros años de los BRICS, por ejemplo», dijo.

Biden, Xi
El presidente de EU, Joe Biden, y el presidente de China, Xi Jinping, durante un encuentro al margen de la Cumbre del G20 en Nusa Dua, en Bali, Indonesia, el 14 de noviembre de 2022.

Pero a pesar de la postura cada vez más desafiante de Xi en el escenario global, comienzan a aparecer grietas en la fortaleza de China. Son debilidades que Biden probablemente esperará explotar para negociar acuerdos con Xi y frenar las ambiciones chinas.

La economía china, después de décadas de crecimiento, está luchando, con una crisis de deuda inmobiliaria que provoca un aumento del desempleo y la salida de inversionistas extranjeros. A pesar de su desafío al poder occidental, China sigue dependiendo de los mercados occidentales y la inversión estadounidense para evitar los peores efectos de la recesión.

Taiwán: una conversación pendiente entre China y EU

Taiwán es un problema en el que Xi espera encontrar terreno común con Biden.

La independencia de la isla ha sido durante mucho tiempo un punto de conflicto entre EU y China, con Xi declarando la determinación china de recuperar el control del país y Biden expresando su compromiso de defender la autonomía de Taiwán.

Con las elecciones en Taiwán acercándose, es un tema en el que ambos líderes buscarán disminuir las tensiones.

«Reducir las tensiones con EU está en interés de Pekín, en la medida en que podría frenar la implementación o disminuir la gravedad de los controles de exportación de EU, aumentar la confianza empresarial y disminuir las presiones de reducir los riesgos y evitar conflictos no intencionales», dijo Jeremy Chan, analista de Eurasia Group.

«Las declaraciones recientes de Pekín, incluidas las del propio presidente Xi, indican que China desea reducir las tensiones y encontrar terreno común en temas como la independencia de Taiwán para evitar un retroceso adicional como mínimo», dijo.

China necesita inversión, tecnología y comercio de EU

Sun, la experta del Stimson Center, dijo que Xi buscará utilizar la reunión para mejorar su imagen como estadista global y frenar los problemas económicos de China.

«La economía china no va bien y necesita inversión, tecnología y comercio estadounidenses», dijo. «Mientras tanto, China quiere disuadir a Estados Unidos antes de las próximas elecciones presidenciales en Taiwán. Por último, Xi está tratando de aprovechar la oportunidad diplomática para consolidar su gran liderazgo», explicó Sun.

China tiene mucho que perder y mucho que ganar en la reunión con Biden de este miércoles. Pero independientemente de los acuerdos que Xi haga con el presidente estadounidense, es poco probable que cambie su misión central: la dominación global china.

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