- A través de los años, el vello en el pubis fue reduciéndose hasta llegar a convertirse en otro pubis de niña.
- Mientras que a las adultas se les "roba una marca de adultez", a las niñas se les pide cumplir con cánones de belleza de una mujer adulta.
- Esto conlleva a una cultura de hipersexualización de las niñas, donde la depilación puede llevar a que mujeres, niñas y adolescentes se nos meta en el mismo saco de deseo masculino.
Un anuncio de un centro de depilación tenía la siguiente información para las niñas y adolescentes entre 10 y 15 años: «El vello no aparece a todos a la misma edad, pero existe un rango entre los 10 y 15 años. Las axilas y algunas zonas de la media piernas por debajo de las rodillas suelen tener un buen resultado», dice el anuncio.
Incluso mencionaba que «los cambios en tu cuerpo no te generen complejos, tenemos el mejor tratamiento en depilación para que te desarrolles feliz y segura».
Esta publicidad no solo es desinformativa, sino que además refuerza un canon que obliga a las niñas a no tener vello, un consejo que se aprehende desde muy temprana edad, bajo el argumento de que así podemos ser deseables a la mirada masculina.
La depilación temprana en las niñas contribuye a la hipersexualización
Bel Olid, autora de «A contrapelo: O por qué romper el círculo de depilación, sumisión y autoodio», disponible en la plataforma de lectura por suscripción Scribd, habla respecto a la hipersexualización de las niñas.
A través de los años, el signo de ser adulta —como lo es el vello en el pubis— fue reduciéndose hasta llegar a convertirse en otro pubis de niña.
«Me parece muy inquietante que una marca de la edad adulta, que es tener vello en el pubis, se elimine y de alguna forma se nos iguale a todas y se nos meta a todas en este mismo saco de objeto sexual», dijo Bel en entrevista con Business Insider México.
Mientras que a las adultas se les «roba una marca de adultez», a las niñas se les pide cumplir con cánones de belleza de una mujer adulta al depilarle las piernas y esto solo provoca que a todas las mujeres, niñas y adolescentes se nos ponga al mismo nivel, según la autora.
«Lo que se está haciendo es meter en el saco se sexualmente disponibles a niñas, esto lo vemos muy claramente igual en la publicidad con poses más de adulto. Es una forma de decirnos a las mujeres desde que somos niñas, cuál es nuestro lugar», asegura Olid.
La hipersexualización desde la visión de las niñas
Ante esto, la activista y creadora del festival feminista para niñas, Vanessa Pizano comenta que se debe cuestionar la forma en que las personas adultas ven a las niñas.
Además, Pizano asegura que las niñas y mujeres estamos dentro de un contexto patriarcal que puede controlar el cuerpo a través de ideas como el de la depilación y la presión social que exista tras de ella.
«Por eso creo que es importante hablar las adultas con las niñas para saber de donde viene el deseo de tener pechos grandes o de la depilación», dice Pizano.
Incluso la activista menciona que las niñas aspiran a ser las mujeres que tienen representación en los medios masivos de comunicación, por lo que es importante poder darles opciones y no solo la aspiración de llegar a un canon.
«No hay nada de malo en que las niñas digan sí en algún momento, pero ahorita es otro momento de sus vidas que deben disfrutar» dijo.
Ana, de 10 años, asegura que en su escuela otros compañeros y compañeras molestan a quien tiene vellos y es que sus maestras han hablado del tema, pero en el aspecto en que pidan ayuda a sus padres para depilarse.
«Nos han dicho que sí es necesario, pero si queremos no lo podemos hacer o si sí queremos, lo hagamos», compartió Ana.
Además, Ana asegura que a las mujeres en determinada edad les sale vello en las piernas, brazos y espalda, por lo que se opta por la depilación; sin embargo ella ha tomado la decisión de no hacerlo.
Una conversación entre adultas y niñas
Pizano reiteró que es importante que las mujeres adultas acompañemos a las niñas y se tenga una comunicación abierta para conocer su perspectiva, debido a que la mayoría de las adultas hemos pasado por alguna mirada lasciva a temprana edad.
«Todas las mujeres cuando nos han salido los pechos hemos recibido una mirada o comentarios de hombres de todas las edades, no de niños de nuestra edad, de hombres y es importante que las adultas que hemos pasado por eso no colaboremos con esa cultura y no colaborar con que nuestras niñas se depilen jóvenes», agregó Olid.
Tanto Olid como Pizano sugieren que las niñas deben crecer con comunicación en todo momento, con un abanico de posibilidades pero sobretodo con autoestima, confianza y con el ejemplo.
«No podemos contribuir a esta cultura de la hipersexualización, en la que hacemos a nuestras niñas sexualmente disponibles a la mirada masculina, en sociedades donde está normalizado que un hombre adulto de 40 a 50 años mire a una niña de 12 años», dijo.
