- El cofundador de Studio Ghibli, Hayao Miyazaki, cumple hoy 80 años.
- A pesar de ser reconocido en el mundo de la animación, Miyazaki cuenta con otras grandes pasiones, como el manga y la aviación.
- Estos son algunos datos que quizás no conocías sobre el legendario cineasta japonés.
El cineasta japonés Hayao Miyazaki cumple 80 años y su legado artístico es uno de los más reconocidos a nivel mundial gracias a Studio Ghibli.
Sin embargo, la mítica figura de este animador japonés va más allá de sus películas animadas. A continuación te presentamos algunos datos que quizás no conocías sobre Hayao Miyazaki.
Escribió e ilustró un manga
Bajo el seudónimo de Akitsu Saburō, Miyazaki escribió e ilustró el manga Sabaku no Tami («La gente del desierto»).
La historia, ambientada en un pasado lejano, en las llanuras desérticas ficticias de Asia Central, sigue las hazañas de Tem, un pastor de la tribu ficticia Sokut mientras intenta evadir la milicia montada de la tribu nómada Kittāru. Para restaurar la paz en el reino, Tem reúne a los compatriotas que le quedan y se rebela contra los intentos de los Kittāru de hacerse con el control del territorio de Sokut y esclavizar a sus habitantes a través de la fuerza militar.
Este se publicó en 26 entregas entre septiembre de 1969 y marzo de 1970 en Boys and Girls Newspaper.
Esta tira ha sido identificada como un precursor del manga Nausicaä of the Valley of the Wind (1982-1995) de Miyazaki.
Participó en el popular anime de ‘Heidi’
Decir que la trayectoria de Hayao Miyazaki en el mundo de la animación es vasta sería quedarse corto; sin embargo, precisamente por tener tantos años en el medio, uno podría olvidar que participó en producciones que datan de más de medio siglo.
Pocos saben que el creador de filmes como «Ponyo» y la «Princesa Mononoke» formó parte del equipo creativo que desarrolló al anime setentero de «Heidi». Específicamente, Miyazaki fue encargado del diseño de escena, maquetación, y guión de la serie.
Es un ávido fan de la aviación
El padre del animador era director de Miyazaki Airplane, que fabricaba timones para aviones de combate durante la Segunda Guerra Mundial, de acuerdo con la biografía Hayao Miyazaki: Master of Japanese Animation. El negocio familiar inculcó en Miyazaki un amor por volar que se hizo evidente en prácticamente todo su trabajo.
Películas como «Porco Rosso» y «El viento se levanta» son claros ejemplos de ello. También otras películas de Miyazaki presentan algún tipo de elemento ligado a volar; ya sea una bestia voladora mágica o elementos mágicos como en el «Servicio de entrega de Kiki», «El viaje de Chihiro» y «Mi vecino Totoro», por mencionar algunos.
Estudió economía, pero jamás ejerció la carrera
Miyazaki estudió de ciencias económicas en la Universidad Gakushūin de Tokio; sin embargo, nunca ejerció como economista.
No se sabe exactamente qué lo hizo ingresar a la facultad de Ciencias Políticas y Economía de la Universidad de Gakushūin. Sea como fuere, habiendo completado sus estudios en economía, en 1963, Miyazaki tomó un puesto como animador de nivel de entrada en Tōei Animation. Mientras estaba en Tōei, conoció a las dos personas más importantes de su vida: su esposa Ōta Akemi y un compañero animador, quien se convirtió en su amigo de toda la vida, Isao Takahata.
Con el tiempo, Miyazaki se convirtió en jefe del estudio, y eventualmente fundaría con Isao Takahata Studio Ghibli el 15 de junio de 1985.
Tiene un documental gratuito en línea
La estación NHK de Japón tiene disponible de manera gratuita el documental “10 años con Hayao Miyazaki”. La serie en cuatro partes sigue al aclamado animador japonés durante una década, mientras se embarca en proyectos de Studio Ghibli como “Ponyo”, “La colina de las amapolas” y “Se levanta el viento”.
El documental también sigue la vida de Miyazaki mientras se reconcilia con realidades como envejecer, la evolución de la animación e incluso cómo vivió el terremoto y desastre nuclear que sucedieron en Japón en 2011.
“10 años de Hayao Miyazaki” también explora su relación con su hijo Goro, director y paisajista, y cómo ambos chocan cabezas mientras buscan trabajar juntos en medio de una terrible pérdida.
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