Obtener un préstamo personal es relativamente sencillo, tan sencillo que puedes acudir a cualquier banco a solicitarlo directamente, siempre y cuando cumplas con los requisitos y documentación necesaria, pero ¿sabes que debes tener en cuenta antes de solicitar un préstamo personal?
En ocasiones la necesidad que tenemos para contar con efectivo hace que corramos riesgos al solicitar un préstamo que genera inconvenientes a largo plazo o un sobreendeudamiento, ya sea por sus comisiones, intereses, plazos, entre otros factores. Por ende, es necesario tener en cuenta todas sus implicaciones.
El abc del préstamo personal ¿qué es?
Un préstamo es un producto de financiación donde una entidad financiera te presta cierta cantidad de dinero, la cual se deberá regresar en un plazo determinado junto con los intereses pactados.
Un préstamo es otorgado cuando se cumplen ciertos requisitos tales como los siguientes: ser mayor de edad, contar con un buen historial crediticio, tener capacidad y capital para pagarlo de regreso, etc…
Existen diferentes tipos de préstamos, en este caso nos enfocamos en el préstamo personal puesto que te permite financiar necesidades específicas como lo es la adquisición de un bien o un servicio.
El préstamo personal es una alternativa fácil para afrontar gastos sin muchos requisitos, ya que generalmente no se necesita un aval (persona que asume el pago de la deuda en el caso que el solicitante no pueda hacerlo) y son más rápidos de acceder, a diferencia de los préstamos hipotecarios o automotrices.
¿Qué debo tener en cuenta antes de solicitar tu préstamos personal?
Ahora bien, lo primero que debes de hacer antes de solicitar un préstamo es evaluar tus razones para hacerlo; te deberás preguntar si realmente lo necesitas o si implica una afectación negativa hacia tus finanzas. Toma en cuenta la “regla de oro”: no utilices préstamos para saldar deudas pendientes, puesto que eso implicaría que caigas en un ciclo de endeudamiento que nunca acabará.
En segundo lugar deberás conocer la tasa de interés del préstamo, para esto deberás saber que es el CAT (Costo Anual Total), esta es la tasa de interés que usan la mayoría de los bancos en México donde se calcula el monto total a pagar cada año, incluyendo intereses, comisiones (por ejemplo por apertura, modificación) y otros gastos que puedan llegar a existir, sin incluir el IVA. Esta información es fácil de obtener puesto que el Banco de México obliga a las entidades financieras a publicar su CAT.
Así mismo, al conocer tu tasa de interés deberás saber si esta es fija o variable, ya que en ciertas ocasiones a pesar de que una tasa fija pueda resultar ser más elevada, es más estable que la variable porque no depende de la situación económica del momento; el tipo de tasa que te conviene depende de tu posibilidad de pago y el plazo.
Lo anterior nos lleva a la tercera cosa que debes considerar al solicitar un préstamo, el plazo. En otras palabras, es el tiempo que tenemos para liquidar la deuda. Los expertos recomiendan pagar el préstamo en el menor tiempo posible, ya que de esa forma hay menos probabilidad de recurrir en mora (un retraso), reduciendo el costo total a pagar.
En conclusión, deberás tener cuidado antes de solicitar un préstamo, debes conocer el panorama completo para evitar el endeudamiento, ya que siempre pueden surgir situaciones inesperadas. Una vez que tengas clara tu capacidad de pago, revisa bien las condiciones que la entidad financiera te está ofreciendo antes de aceptar.
Recuerda que un préstamo puede ser un arma de doble filo, a pesar de que es una forma rápida y sencilla de obtener dinero, también puede ser una manera de endeudarse si no se adapta a tus necesidades.
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