- Brooklen Farley es una masajista de 25 años de Texas que decidió no tener hijos.
- Al crecer, pensó que se convertiría en madre, pero la realidad del mundo la hizo cambiar de opinión.
- La economía y la crisis climática han hecho que ella se centre en su pareja y sus mascotas.
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Este artículo se basa en una conversación con Brooklen Farley, una masajista de 25 años que vive en Texas. Fue editado por su extensión y para tener una mayor claridad.
Cuando era más joven pensaba que quería ser madre, pero ahora que soy adulta no quiero tener hijos. Decidí que no quería ser mamá desde que estaba en la universidad, cuando me di cuenta de lo desesperado que se veía el futuro, desde la economía hasta el clima.
Tampoco creo en el sueño americano lo suficiente como para intentar perseguirlo mientras crío a otro ser humano. Mis amigos tampoco lo creen.
Los miembros de la Generación Z (Gen Z) que conozco tienden a creer menos en el sueño americano que las generaciones previas a la nuestra. La mayoría de mi grupo de amigos simplemente no ve un camino en el futuro en el que tengamos un trabajo bueno y estable, que nos permita tener una casa y una familia.
Hemos visto la crisis de la economía, como hay menos empleos que solicitantes y salarios que no son suficientes para alcanzar los niveles de inflación.
El cambio climático es desastroso y los precios de la canasta básica siguen subiendo cada vez más. ¿Qué pasa con esta situación que se supone que hace que los jóvenes quieran tener hijos?
Mi generación es diferente a la de mis padres
Mi mamá creía que si trabajaba duro, podría permitirse tener una casa para criar a dos hijos. Simplemente no es así como pensamos. Ni siquiera sabemos si el planeta nos sustentará hasta nuestra vejez, por lo que para mí no tiene sentido planear ampliar nuestras familias.
Mi mamá era madre soltera hasta que se volvió a casar cuando yo tenía ocho años. Mis padres saben lo que siento por los niños y su consejo es que espere para tomar una decisión hasta que esté segura.
Tengo 25 años, y aunque esa es una edad normal para quedar embarazada, si una de mis amigas me dijera que está embarazada en este momento, me gustaría felicitarla, pero solo podría pensar en la carga financiera que eso representaría.
Los Gen Z ni siquiera pueden permitirse el lujo de criarse a sí mismos, y mucho menos a otras personas.
No veo el sentido de tener hijos en el mundo tal como está
Mucha gente nos llama Zoomers, pero, sinceramente, muchos de nosotros somos fatalistas: nos sentimos pesimistas sobre el futuro y no queremos someter a nuestros hijos a ello.
Siempre pensé que tendría hijos porque parecía el siguiente paso en el camino de la vida. Simplemente pensé que crecería, iría a la escuela, conseguiría un trabajo, me casaría y luego tendría hijos. Sin embargo, eso fue antes de comprender la realidad.
Ahora mi objetivo es ganar suficiente dinero para mí, mi pareja y mis mascotas. Quiero que podamos vivir cómodamente, ahorrar, gastar en lo que queramos y pagar todas nuestras facturas.
Actualmente, nosotros rentamos una casa y planeamos hacerlo en el futuro cercano. También queremos casarnos.
Nunca sentí la “fiebre por los bebés”
La idea de la maternidad parece agotadora. No sé cómo las mamás logran que esto funcione, especialmente cuando ellas también trabajan. Mi mamá era ama de casa, así que los días que se me olvidaba el almuerzo o necesitaba algo, ella podía dejarlo todo, ir a la escuela y ayudarme. No puedo imaginarme con ese tipo de libertad.
Incluso si tuviera estabilidad financiera y pudiera contar con un trabajo que me mantuviera totalmente cómoda, no creo que pudiera equilibrar eso con la maternidad, que ya es un trabajo de tiempo completo.
En cambio, muchos de mis amigos se centran en intentar hacer del mundo un lugar mejor. Pasamos nuestro tiempo libre llamando a nuestros representantes para exigir cambios legislativos, asistiendo a protestas por la justicia climática o tratando de elevar las causas sociales en las que creemos.
A menudo pienso en el mundo que me tocó y en el tipo de mundo que dejaré a las próximas generaciones.
Podría estar más abierta a tener hijos si las cosas fueran diferentes
Mi horario ahora mismo es flexible. Como soy masajista, trabajo principalmente por las tardes y las noches, pero no sé cómo podría pagar el cuidado de los hijos mientras trabajo si fuera madre.
No hay suficiente tiempo en el día para que las personas puedan equilibrar sus vidas y sus trabajos, por lo que no me sorprende que las tasas de natalidad estén disminuyendo.
Lo que aprecio de la Gen Z es que estamos dispuestos a imaginar un mundo mejor y trabajar para lograrlo. Queremos un mejor equilibrio entre la vida personal y la laboral, además de un planeta centrado en solucionar la crisis climática.
A menos que las cosas cambien drásticamente (como que la gente se tome más en serio el cambio climático y mejoren la distribución de la riqueza), no me veo nunca cambiando de opinión.
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