• Taylor Swift y Beyoncé estrenarán películas de conciertos de sus exitosas giras: The Eras Tour y Renaissance.
  • Se espera que la cinta de The Eras Tour, que estrenará este viernes, gane 100 mdd en su primer fin de semana.
  • Swift y Beyoncé ganarán muchos millones de dólares gracias a acuerdos comerciales inteligentes.
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Beyoncé es única. Sin embargo, cuando se trata de mover la aguja económica, quizá es una de las únicas dos estrellas musicales que puede lograrlo.

“Queen B” y Taylor Swift han demostrado su capacidad para impulsar las ventas de boletos, productos y estancias en hoteles este verano con las giras Renaissance y The Eras Tour.

La primera podría generar un impacto económico estimado en 4,500 millones de dólares (mdd); mientras que la segunda podría generar 5,000 mdd, de acuerdo con la firma de investigación QuestionPro.

Ahora, ambas artistas van a demostrar su poder en la pantalla grande.

En agosto, Taylor Swift anunció que una película del concierto de The Eras Tour estrenará este 13 de octubre. La preventa de la cinta rompió récords: los ingresos por entradas en las primeras 24 horas alcanzaron los 26 mdd.

Después de mucha especulación, el 1 de octubre, Beyoncé anunció su propia película del concierto: un largometraje de la gira Renaissance que estrenará el 1 de diciembre. 

Esto es algo que solo las más grandes pueden hacer, lo que lo vuelven tan impresionante.

“No todas las estrellas de la música pueden lograr esto”, dijo a Insider Paul Dergarabedian, analista sénior de medios de Comscore. “Taylor Swift encendió la chispa. Si hay alguien que tiene fans en todo el mundo de esta magnitud es Beyoncé”.

Este es un movimiento astuto por parte de ambas cantantes. Aunque hay una serie de artistas que están en la lista de “los mejores empresarios” —la multimillonaria Oprah Winfrey, Tyler Perry, Kim Kardashian y George Clooney, entre otros—, Taylor Swift y Beyoncé seguramente se unieron a las filas. 

En el pasado, las dos vendieron películas de conciertos a Netflix. El servicio streaming transmitió Reputation de Taylor Swift en 2018. Un año más tarde, pagó 20 mdd por Homecoming de Beyoncé, informó Variety.

Aunque se desconoce si el servicio streaming seguirá pagando esa cantidad de dinero por los conciertos —Netflix está controlando su gasto en contenido—, en realidad no importa, ya que las estrellas musicales ganarán mucho más dinero esta vez.

“Este es un momento único, y estas son artistas únicas que están reconociendo el poder de las salas de cine para generar expectación y generar ingresos”, dijo Dergarabedian.

Taylor Swift, a través de un acuerdo que sus padres negociaron con AMC, está financiando ella misma la producción de Taylor Swift: The Eras Tour. Ella podrá la cinta directamente en las salas de cines (en México tanto de Cinépolis como Cinemex), sin intermediarios de un estudio que se hagan cargo de los costos de producción y distribución, informó Matthew Belloni de Puck.

Con 273 millones de seguidores en Instagram, no se necesita una estrategia de marketing costosa, aunque la semana pasada se transmitieron comerciales de la película durante partidos de la NFL, liga en la que juega el nuevo interés romántico de Taylor Swift, Travis Kelce.

“Ella misma es la herramienta de marketing número uno que tienen”, dijo a Insider Shawn Robbins, analista jefe de Box Office Pro. 

Los cines obtendrán 43% de los ingresos brutos por boletos, mientras que 57% irá a la familia Swift y AMC, que actuará como distribuidora, informó Belloni.

Con el potencial de un fin de semana de estreno de 100 millones de dólares (mdd), de acuerdo con Robbins, eso son 57 mdd para compartir entre Swift y AMC. 

Incluso si lo dividieran por la mitad (lo cual es extremadamente improbable), la máquina Swift se iría a casa con casi 30 mdd en tan solo un fin de semana.

Después de pagarle al cineasta Sam Wrench y cualquier otro costo de producción —Belloni informó que ascenderán a entre 10 y 20 mdd—, las ganancias están prácticamente garantizadas.

Los detalles del acuerdo de Beyoncé aún no han salido a la luz. Sin embargo, es seguro decir que negoció un acuerdo similar al de Taylor Swift, ya que también es una asociación con AMC. 

AMC se negó a hacer comentarios más allá de un comunicado de prensa inicial.

Por otro lado, Beyoncé y Taylor Swift recibirán más dinero en el futuro, cuando ofrezcan sus películas en plataformas de video on-demand y las vendan a servicios streaming. Es probable que ese dinero vaya directamente a sus bolsillos.

“Estos se trasladan maravillosamente a la pantalla chica una vez que han tenido sus presentaciones en cines. Es genial para las salas de cine. Es genial para el artista”, dijo Dergarabedian.

Asimismo, los largometrajes también impulsarán las escuchas y descargas musicales.

“Se trata del efecto halo que esto puede tener”, agregó.

¿Qué hace que las películas de The Eras Tour y Renaissance sean tan únicas?

Las películas de conciertos no son nada nuevo, ya que se remontan a Woodstock de 1970.

Michael Jackson’s This Is It recaudó 262.5 mdd en todo el mundo en 2009; y Justin Bieber: Never Say Never recaudó 99 mdd en 2011, según datos de Comscore. 

Se espera que Taylor Swift y Beyoncé batan récords con sus largometrajes.

“No son las primeras películas de conciertos que se estrenan en los cines, pero la manera en que las estrenan y la audiencia a la que se dirigen es lo que es innovador”, dijo Robbins.

La película de The Eras Tour se estrenará en más de 4,000 pantallas en Norteamérica. La de Renaissance probablemente tendrá un lanzamiento similar. 

No hay duda de que ambas cintas funcionarán. Muchos fans que no pudieron asistir a los conciertos por los altos precios de los boletos o la falta de estos.

“Cuando hay un lanzamiento que aprovecha el espíritu cultural de la época, la gente habla de ello”, dijo Robbins, comparando la película de The Eras Tour con el fenómeno «Barbenheimer» este verano. 

“Todo el mundo sabe que la base de fans de Taylor Swift va a aparecer. Se ha creado esta conversación en la que tal vez algunas personas fuera de su base de fans quieran verla”.

Aún así, el verdadero ganador —o al menos el que más necesita la victoria— podrían no ser Taylor Swift ni Beyoncé. A pesar de un verano estelar con Barbenheimer, las salas de cine todavía están trabajando para alcanzar las taquillas previas a la pandemia de covid-19.

Las huelgas de guionistas y actores fueron otro duro golpe, ya que el estreno de películas como Challengers y Dune: Part Two se retrasaron hasta 2024.

No hay duda de que estarán felices de sacar provecho de estas dos estrellas musicales.

“Esto es música para los oídos de los propietarios de cines”, dijo Dergarabedian.

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