• Hay diversas maneras de ejercer el liderazgo en tu empleo y en la vida.
  • Pero existe un tipo que ayudará a cumplir tus sueños, que es el de propósito.
  • Verónica Elizondo, founding partner de MERLO Capital, nos muestra este tema.
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El liderazgo es una de las habilidades más valoradas en el mundo laboral y un «ingrediente» que nos ayuda en nuestra vida personal.

Si bien hay muchas personas que lo poseen, pocas saben cómo enfocarlo hacia un objetivo en particular, lo que puede afectar desde colaboraciones entre compañeros laboral del mismo nivel hasta a una compañía entera.

Verónica Elizondo, founding partner de MERLO Capital, abordó este tema en la charla «Liderazgo con propósito», del evento Beyond Work Forum.

Lecciones para ejercer un liderazgo con propósito

1. Escucha con atención

Elizondo explicó que, cuando ya tenemos una amplia trayectoria o un ritmo de trabajo acelerado, debemos detenernos a escuchar verdaderamente a nuestros colegas o colaboradores.

«Tú puedes hacer una conexión real con la gente con la que trabajas cuando escuchas. No me refiero solamente a que te sientes a escuchar lo que están diciendo para que perciban que realmente estuviste ahí, sino (a poner atención a fondo)», detalló.

2. Aprovecha la retroalimentación

La experta señaló que la retroalimentación no se trata de ti, sino de quien la está proveyendo.

«Lo importante es que no tomemos esa información y la volvamos un juicio. Es muy distinto decir ‘me equivoqué’ a ‘soy un tonto’ (…). Debemos (recabar los datos, analizarlos) y cambiar de acuerdo con tus objetivos (…), pero no porque partas de que estás mal», indicó.

3. Círculos concéntricos

Para tener un liderazgo con propósito, es relevante saber discernir qué pensamientos tenemos sobre nosotros mismos en lo laboral y personal.

Si no lo haces, según Elizondo, puede generar una gran carga emocional que impactará en todos los aspectos de tu vida.

En este análisis, lo trascendental es quedarse con los rasgos positivos, los que nos impulsen a mejorar.

4. Adaptarse al cambio y la incertidumbre

La experta comentó que, una de las etapas más difíciles, pero mayormente enriquecedoras para tener un enfoque y liderar, es contar con flexibilidad ante los cambios y la incertidumbre.

«En lo personal o profesional, debemos aprender de los cambios y decir ‘vamos a ver qué pasa con esto’ y no ser rígidos. Que (la situación) no nos impida seguir aprendiendo y (evitar) cerrarnos la puerta», expuso.

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