- Las claves para enfrentar las amenazas digitales son el uso distintos métodos y tecnologías y el involucramiento de todo el personal.
- Es necesario que las empresas trabajen en un plan de acción que abarque un análisis de su situación para así poder identificar sus áreas de oportunidad.
- Las empresas requieren un portafolio completo de soluciones y procesos para crear una primera línea de protección, advirtió Ricardo Hinojosa.
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En México, Latinoamérica y el mundo el mercado de la ciberseguridad va creciendo exponencialmente ya que de acuerdo con un análisis de IDC, en 2022 su valor en el país ha alcanzado los 22,145 millones de pesos. Sin embargo, siguen existiendo grandes retos para el sector debido a que cada vez existen más oportunidades y nuevos métodos de ataque por parte de los cibercriminales.
Si bien empezamos a ver que las empresas cada vez toman más en cuenta estos riesgos, aún tienen un camino por recorrer para protegerse de amenazas que van desde el secuestro de información o ransomware hasta la fuga de información buscando explotar el eslabón más débil, los colaboradores. Por eso, diferentes industrias necesitan contar con una buena higiene digital que les permita implementar soluciones y procesos que salvaguarden tanto su bienestar como el de sus clientes.
El involucramiento del personal clave para abatir las amenazas digitales
La clave para afrontar las amenazas digitales y fortalecer la seguridad se divide en dos partes principales ya que, si bien el uso distintos métodos y tecnologías es importante, lo es también el involucramiento total del personal para que vayan perfeccionando el criterio en cuanto al uso de la información. Este es un ejercicio que debe llevarse a cabo desde la dirección general hasta el personal recién ingresado.
Para esto, un aliado experto en soluciones de tecnología, que puede ir desde un proveedor, un partner o una consultora, puede aportar a las empresas herramientas que les permitan contar con un valor agregado para ellos y sus clientes al mismo tiempo que logran mantener la productividad y mejora continua de la compañía. En conjunto pueden crear un plan de acción que abarque, primeramente, un análisis de su situación para así poder identificar sus áreas de oportunidad, tomando en cuenta también elementos externos como lo son las regulaciones de cada industria.
Una vez teniendo un análisis completo, es importante crear un Smart Budget que sea visto como una inversión necesaria para cuidar del negocio ya que sin duda traerá beneficios a corto, mediano y largo plazo.
Las empresas deben crear una primera línea de protección contra las amenazas digitales
Aquí se abre todo un portafolio completo de soluciones y procesos que las empresas no pueden dejan pasar para crear una primera línea de protección. Como ya lo vimos, se puede empezar desde entrenamientos y asesorías para el personal de la compañía que ayude a crear una cultura de seguridad hasta lo más básico como la instalación y actualización de antivirus o software de protección de navegación.
También existen procesos más complejos como un EDR (Endpoint Detection and Response) con machine learning para aprender de nuevas amenazas y así contener ataques para proteger a los servidores o incluso un NDR (Network Detection and Response) que proporciona una visión completa de la posible superficie de ataque y las interacciones entre todos los dispositivos de la red.
¿Qué pasa, por ejemplo, si un virus logra entrar por una computadora y luego se envía por mail a todo el personal?
Esto puede detener una línea de producción, aunque sea por unos minutos, o incluso evitar la firma de un contrato, impactando enormemente al negocio. De ahí la importancia de contar con tecnologías y procesos culturales que permitan a la compañía anticipar y saber responder con tiempo a todo tipo de posibles amenazas.
De acuerdo con el mismo informe de IDC, actualmente el 30% de las organizaciones consideran la ciberseguridad como un factor de negocio y el principal impulsor para adoptar una estrategia de negocio centrada en la ciberseguridad es el mejorar la experiencia del cliente.
En definitiva, aún hay un camino largo por recorrer en cuanto a consciencia y uso de tecnología especializada para crear entornos digitales seguros ya que hay una relación directa entre la estrategia de negocio y la de ciberseguridad. Las empresas que logren capitalizar sus esfuerzos y crear un plan de acción pensado en la seguridad de la información de sus empleados, sus clientes y la misma empresa, serán las que logren liderar los sectores a los que pertenecen.
*Ricardo J. Hinojosa es director ejecutivo Alestra.
Las opiniones publicadas en esta columna son responsabilidad del autor y no representan ninguna posición por parte de Business Insider México.
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