- Las compras online durante el Black Friday ascendieron a 9,800 millones de dólares en Estados Unidos, un 7.5% más que el año pasado.
- Muchos están retrasando pagar por sus artículos, y los programas de pagos a plazos esperan que noviembre sea su mejor mes.
- Esto podría generar problemas mayores en unos meses, cuando estas facturas comiencen a vencer.
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Los estadounidenses establecieron un récord de compras en línea en Black Friday. Una mirada más cercana a las cifras y tendencias sugiere que el gasto de los consumidores no es tan fuerte como parece; y puede estar enmascarando el problema mayor de acumular más deuda.
Según Adobe, que rastrea las ventas en línea, las compras en línea del Black Friday totalizaron 9,800 millones de dólares (mdd); un 7.5% más que el año pasado. Adobe estima que los compradores estadounidenses gastaron además hasta 12,400 mdd en el Cyber Monday.
Estas estimaciones pueden ser bajas, Mastercard dijo que las ventas de comercio electrónico aumentaron un 8.5% en Black Friday; y otro informe de Salesforce dijo que las ventas en línea en Estados Unidos crecieron un 9%, año tras año.
Por último, fue el black Friday más grande en la historia de Amazon, dijo a CNBC; el 27 de noviembre, Beryl Tomay, vicepresidente de la unidad de entrega dijo que les quedaba lo último en la compañía y eran artículos de logìstica.
Si bien se predijo un aumento en el gasto para la temporada navideña, lo preocupante es cómo los estadounidenses están pagando esos artículos.
Muchos pagan a través de plataformas de para comprar y pagar en plazos, como Klarna o Afterpay; que permiten a los compradores pagar a plazos cada semana o mes.
En comparación con Black Friday del año pasado, Klarna observó un aumento de casi 30% en las compras realizadas por compradores estadounidenses en artículos como batidoras, televisores y cafeteras; según datos compartidos por Business Insider.
Mientras los precios de las viviendas se mantienen en niveles récord y la inflación aún se mantiene por encima del objetivo del 2% de la Reserva Federal, muchos estadounidenses están preocupados por sus finanzas.
El fin de la pausa en los préstamos estudiantiles, el aumento de los alquileres y la deuda récord de las tarjetas de crédito han aumentado aún más la presión.
El tema impulsó a algunos compradores estadounidenses a depender más de los programas para pagar después y tener más flexibilidad cuando su presupuesto es ajustado.
Muchos no están pagando todavía y no planean hacerlo por un tiempo
Según Adobe, la financiación compre ahora y pague después aumentó 47% este Black Friday en comparación con el año pasado. En 2022, alrededor del 10% de las compras del día después del Día de Acción de Gracias utilizaron comprar ahora y pagar después; según el Banco de la Reserva Federal de Atlanta.
Hasta el viernes, el gasto total de noviembre en acuerdos de comprar ahora y pagar después ya había alcanzado los 6,500 mdd; según Adobe, y la compañía proyecta que alcanzará los 9,300 mdd, el mayor mes registrado.
Sin embargo, los estadounidenses en general no han dejado de gastar durante el último año, incluso cuando sus cuentas de ahorro se están agotando. El gasto del consumidor representa alrededor de 70% de la actividad económica estadounidense.
Sin embargo, esto llega en un momento en que los estadounidenses también tienen una deuda récord de 1.3 billones de dólares en tarjetas de crédito.
Mark Luschini, estratega jefe de inversiones de la firma de asesoría financiera Janney Montgomery Scott, dijo en Mornings With Maria Bartiromo que el mayor uso de los programas «comprar ahora y pagar después» es una señal de que el consumidor está en una situación adversa.
Luschini señaló que los programas para pagar después se combinan con los recientes aumentos, y la lentitud de las tarjetas de crédito y las cuentas atrasadas en los pagos lo hace más complicado.
Esta es una señal de que algunos consumidores (aquellos con deudas de tarjetas de crédito y préstamos para automóviles) están comenzando a ceder ante las presiones de la economía estadounidense.
Los beneficios al pagar después
Pagar después puede proporcionar crédito a algunos estadounidenses que de otro modo no calificarían.
Según Adobe, aproximadamente un tercio de los usuarios que compran y pagan después tienen un puntaje de crédito inferior a 620; también se les rechazó una solicitud de crédito, o estaban en mora con un préstamo en los últimos 12 meses.
Pagar después también permite a las personas pedir prestado a un precio menor, ya que obtienen el precio sin intereses si se cancelan a tiempo; de hecho, la «Encuesta 2022 sobre economía de los hogares y toma de decisiones» de la Reserva Federal encontró que 83% de los encuestados pagaron a tiempo sus artìculos.
Eso todavía deja 17% que no paga la deuda a tiempo y está agregando más intereses a sus libros de contabilidad.
La deuda puede acumularse como una bola de nieve
Además, un estudio de la Social Science Research Network encontró que algunos consumidores liquidan su compra ahora y eligen pagar después con tarjetas de crédito; lo que cambia una tasa de interés del 0% por tasas que son las más altas desde principios de la década de 1980, y que a menudo están muy por encima.
Luchar por pagar la deuda a tiempo, o cambiarla a tarjetas de crédito con intereses altos, podría deberse a lo que algunos llaman una «bola de nieve de la deuda». Es más fácil perder la cuenta del monto total de pagos mensuales que se están acumulando.
Esto podría generar problemas mayores en la primavera, cuando estas facturas comiencen a vencer.
«Los consumidores de gama baja están realmente agotados; entre el 40% y el 50% de la gente del país tiene problemas para llegar a fin de mes», dijo Michael Landsberg, director ejecutivo de Landsberg Bennett Private Wealth Management, durante una aparición el lunes en el programa «Power» de CNBC.
Almuerzo sobre los programas de comprar ahora, pagar después: «Eso no significa que no vayan a gastar en Navidad, pero creo que en enero, febrero y marzo veremos una verdadera desaceleración en el espacio minorista».
Para agravar el problema, las personas tienden a gastar más cuando utilizan programas de comprar ahora y pagar después, lo que sugiere un exceso de confianza en lo que pueden permitirse.
Un segundo trabajo de investigación de Social Science Research Network encontró que los consumidores gastaban 20% más cuando se les ofrecía comprar ahora y pagar después, especialmente en artículos minoristas.
El gasto bajó antes del Black Friday
Además, aunque las ofertas de Black Friday comenzaron mucho antes de noviembre, más personas de lo habitual esperaron hasta el viernes para realizar sus compras, lo que sugiere que se sienten presionados por encontrar las mejores ofertas posibles.
Kraig Foreman, presidente de comercio electrónico de la cadena de suministro de la naviera DHL, señaló el lunes en «Worldwide Exchange» de CNBC que las ventas antes del viernes fueron más lentas en comparación con años anteriores.
«De hecho, vimos ventas más débiles año tras año, llegando al viernes, lo cual fue sorprendente», dijo Foreman.
«Los compradores saben lo que quieren; saben lo que quieren comprar y estaban esperando la mejor oferta posible mientras intentaban ser realmente conscientes con su dinero», concluyó el experto.
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