- Dos mujeres están demandando a Apple por su dispositivo AirTag, alegando que exparejas usaron los rastreadores para acecharlas.
- En la demanda colectiva, presentada en San Francisco, una demandante dice que un AirTag estaba escondido en su automóvil.
- La demanda llama a las AirTags de Apple "el arma preferida de los acosadores y abusadores".
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Dos mujeres presentaron una demanda colectiva contra Apple alegando que exparejas utilizaron AirTags para acosarlas.
El controvertido producto fue diseñado para ayudar a las personas a rastrear sus pertenencias personales, como el equipaje. Sin embargo, los AirTags se han usado indebidamente, con ejemplos notables que incluyen uno que se deslizó en el bolsillo del abrigo de una modelo y otros que se usaban para seguir vehículos de lujo antes de robarlos.
En respuesta, Apple ha introducido actualizaciones desde su lanzamiento de 2021, cuando un medio informó que los AirTags eran «a prueba de acosadores». Apple nunca hizo oficialmente esta afirmación, aunque promocionó ampliamente el enfoque de AirTag en la privacidad.
Los usuarios de iPhone recibirán una notificación si han estado cerca de un AirTag durante un periodo de tiempo prolongado; mientras que a los clientes se les recuerda que el acecho es un delito cuando conectan el dispositivo por primera vez.
Los AirTags de Apple siguen siendo peligrosos
La demanda, que se presentó el 5 de diciembre en San Francisco, dice que el producto sigue siendo peligroso porque Apple estima que se necesitan de cuatro a ocho horas de seguimiento antes de que se envíe una alerta.
Y si tienes un dispositivo Android, debes descargar una aplicación separada que requiere que presiones un botón en lugar de escanear en segundo plano automáticamente.
“Con un precio de solo 29 dólares, se ha convertido en el arma elegida por acosadores y abusadores”, dice la demanda, que fue reportada por primera vez por Bloomberg.
La primera demandante, Lauren Hughes, dice que fue rastreada poco después de terminar una relación de tres meses. Su exnovio hizo publicaciones abusivas en las redes sociales, dejó mensajes de voz amenazantes y le entregó plantas en la puerta.
Hughes se mudó a un hotel para escapar del acoso, antes de recibir una notificación de iPhone sobre un AirTag cercano. Solo pudo hacer que el dispositivo emitiera un pitido una vez, antes de encontrarlo escondido en el hueco de la rueda de su automóvil. El personal de una Apple Store cercana no pudo decirle cuánto tiempo había estado allí.
Luego encontró un nuevo hogar; sin embargo, meses después su acosador compartió una publicación de Instagram en su nuevo vecindario. Incluía un emoji parpadeante y «#airt2.0», que según la demanda muestra su uso continuo de AirTags.
La segunda demandante, anónima, estaba pasando por un «divorcio contencioso» cuando su cónyuge comenzó a «acosarla, cuestionarla sobre a dónde iba y cuándo, particularmente cuando estaba con el hijo de la pareja».
Luego encontró un AirTag en la mochila del niño y se deshizo de él, antes de reemplazarlo por otro. Le pidió a un amigo que descargara la aplicación de seguimiento de Android, pero como vive en la ciudad de Nueva York, siempre hay muchos AirTags.
La demanda incluye casos de usuarios de iOS y Android, y señala que se presentaron más de 150 informes policiales hasta abril de 2022.
Dice que los ejecutivos y publicistas de Apple «buscaron activamente presentar el AirTag como un producto inofensivo; de hecho, «a prueba de acosadores», y por lo tanto engañaron al público.
Agrega que los beneficios del dispositivo no superan los riesgos y que su «defecto de diseño fue un factor sustancial» para causar daño.
Los demandantes buscan reparación de daños y perjuicios que se determinarán en cualquier juicio futuro.
Apple no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios de Insider sobre la demanda.
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