- Almaya es una nueva aplicación gratuita que permite a las personas dejar un legado digital para generaciones futuras.
- Esta app permite grabar en audio y video para guardar "sabiduría familiar" que pueda llegar a distintas generaciones a lo largo del tiempo.
- Los mensajes grabados en la app también podrán ser programados para publicarse en un tiempo específico en el futuro.
- ¿Ya conoces nuestra cuenta de Instagram? Síguenos.
La idea de dejar un legado que perdure es algo que mueve a muchas personas en la actualidad, y ahora existe una aplicación para ello.
Ya sea una abuela cantando una canción de cuna que escucharán varias generaciones futuras; una tía que enseña a cocinar una receta que estuvo en la familia durante años; o un padre grabando un mensaje de cumpleaños para un nieto a quien tal vez no llegue a conocer, millones de personas podrán guardar todo tipo de recuerdos, consejos o mensajes en la aplicación Almaya.
Inspirado en «Coco» —el filme de Disney-Pixar que plantea que la existencia en el más allá depende de ser recordado— y en las apariciones de Obi Wan Kenobi ante Luke Skywalker cuando lo necesita en «Star Wars», esta app permite grabar en audio y video para dejar un legado de «sabiduría familiar» para conectar generaciones a lo largo del tiempo.
La idea de esta aplicación viene de la mente del emprendedor tecnológico argentino Martín Kogan, quien creó la app para conservar de manera ordenada, segura y privada lo más preciado de cada familia.
«Desde la ciencia ficción siempre tenemos esta idea de que toda la sabiduría de nuestros antepasados puede estar con nosotros, que nos puede ir acompañando», dijo Kogan, de 41 años, a Reuters.
«Mi visión, y lo que a mí me encantaría, es que todas las familias del mundo empiecen a armar un tesoro familiar que se va a pasar de generación en generación. Ese tesoro contiene la sabiduría de todas las personas de la familia y aspectos únicos; desde la historia de la familia hasta cuestiones culturales como canciones, comidas, recetas, frases célebres», agregó.
Para Kogan, la llegada de la digitalización y la amplia penetración de los teléfonos inteligentes permite «democratizar» el acceso a esta red social privada. Esta, dice, siempre ofrecerá un nivel de uso gratuito y más adelante tendrá un servicio pago con variables diferenciales como asistencia para construir el legado, acceso a videos editados o un nivel mayor de seguridad.
Un legado digital que trasciende el tiempo y el espacio
Para Lidia Raggi, una mujer de 78 años que hace reiki y trabaja como acompañante en el final de vida desde hace 10 años, la app es una herramienta para guardar recuerdos y mantener la conexión con sus hijas y nietos, quienes al principio mostraron resistencia porque les hacía pensar en su muerte.
«Cuando conocí Almaya me pareció que el futuro estaba acá conmigo. Tengo casi 80 años y me parece maravilloso», dijo Raggi a Reuters, quien incluyó en su red a su marido y tres hijas.
«Dejaré grabadas cosas como cuando conocí a su papá, hace 62 años que estamos juntos… esas cosas que me escucharon contar, que a mis nietos no me acuerdo si se las conté. Me gusta mucho eso de traer historias», concluyó.
La app, que comenzó a funcionar en enero, propone un recorrido con preguntas sobre distintos aspectos de la vida de una persona. Entre ellas están el origen de sus antepasados, qué es la felicidad y el sentido de la vida hasta consejos, chistes, canciones y recetas familiares.
«Es un hábito nuevo pero viejo. Lo nuevo es el uso de la tecnología, pero en la historia humana tenemos miles de ejemplos en los cuales personajes de la historia quieren hacer una transmisión cultural más allá de su propia vida», agrega Kogan.
La idea es que estas preguntas disparen conversaciones en el presente que perduren y permitan a las futuras generaciones conocer distintos aspectos de una familia.
Los mensajes grabados en la app también pueden ser programados para publicarse en un tiempo específico en el futuro
Una de las propuestas permite programar el envío de un video o audio en un momento futuro específico.
Estos pueden programarse para un cumpleaños o hasta una fecha desconocida, como el día del casamiento de un hijo. Aunque uno ya no esté, estos mensajes podrán llegar a su destino a través de la designación de un «protector de legado» que el usuario decida.
«Ahí empezamos a desafiar un poquito la idea de los viajes en el tiempo, es como que se produce un puente temporal porque si yo recibo hoy un mensaje de una persona que amo, pero que hace 15 años que no está, en el momento en el que estoy viendo el mensaje está (presente) y eso a mí me conmueve», dijo Kogan.
Con información de Reuters.
TAMBIÉN LEE: Humanidad 2.0: ¿Cuál es el futuro de los cyborgs en el mundo?
