- Los legisladores de Florida revocaron el estatus fiscal especial de Disney en respuesta a la batalla "Don't Say Gay".
- Bob Iger, recién nombrado CEO de Disney, podría enfrentarse a nuevas reacciones contra el contenido LGBTQ.
- Iger tiene que apoyar los derechos LGBTQ o arriesgarse a enfadar a los empleados y a millones de estadounidenses.
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Con su regreso como CEO de Disney, Bob Iger se enfrenta a decisiones difíciles sobre cómo impulsar los resultados de la compañía. Pero la manera en que gestione el siguiente capítulo de la lucha contra el «Don’t Say Gay» en Florida tendrá consecuencias de mayor alcance.
Iger se enfrenta a una decisión: ¿Doblar la apuesta por los derechos LGBTQ? ¿O intentar apaciguar al Partido Republicano de Florida para evitar más disputas legales o políticas?
Otra lucha podría ser contundente. A principios de este año, los funcionarios electos de Florida se opusieron a Disney después de que el entonces CEO, Bob Chapek, se pronunciara en contra de la ley de Derechos de los Padres en la Educación, respaldada por los republicanos, en el estado, donde Disney emplea a unos 60,000 trabajadores. Los legisladores de Florida votaron para rescindir el estatus fiscal especial de Disney World en Orlando.
Si Iger, que fue CEO de Disney entre 2005 y 2020, no apoya de manera decidida los derechos del colectivo LGBTQ, se arriesga a que parezca que no está a favor de un grupo que suele ser marginado y atacado.
Y Disney se arriesga a perder clientes, trabajadores y lealtad a la marca. De hecho, la respuesta de Chapek a la ley de Florida no gustó al público.
«Esto no va a desaparecer. Es la realidad actual», dijo anteriormente a Insider Martin Whittaker, director general de Just Capital, una organización de investigación y consultoría empresarial sin ánimo de lucro. «Si no creas una narrativa que esté arraigada en lo que realmente defiendes, entonces se creará una para ti».
El CEO de Disney Bob Iger tiene que entender que la mayoría de los estadounidenses apoyan los derechos LGBTQ
Para los dirigentes de Disney, perder el estatus fiscal especial de la compañía en el estado conlleva repercusiones financieras. Lo mismo podría ocurrir con nuevas batallas con los legisladores de Florida.
Pero el costo de seguir jugando a dos bandas en una cuestión de derechos humanos, aunque menos tangible de manera inmediata, sería mayor.
El 70% de los estadounidenses apoya el matrimonio entre personas del mismo sexo, según datos de Gallup de 2021. Y 64% apoya la protección de las personas trans contra la discriminación, según una reciente encuesta de Pew.
Más allá de molestar a algunos de los que claman por asientos en las películas de Disney o en sus parques temáticos, Iger se arriesga a alienar a sus empleados.
Muchos de los creadores de Disney son apasionados de la diversidad. No hay más que ver los comentarios de algunos de los principales creadores de Disney que han trabajado en películas recientes como «Strange World» o «Buzz LightYear», ambas con personajes LGBTQ.
«Su homosexualidad es una parte de él. También es audaz y tremendamente empático», dijo Don Hall, director de «Strange World», a Variety, hablando del personaje principal abiertamente gay de la película. «Creo que no podemos esperar a que el mundo lo abrace como lo hicimos nosotros».
El actor Chris Evans, que da voz a Buzz Lightyear, dijo a Variety en un reportaje separado que se sentía frustrado por la reacción al beso entre personas del mismo sexo de la película.
«El objetivo es que podamos llegar a un punto en el que sea la norma, y que esto no tenga que ser algo inexplorado, que eventualmente esto sea simplemente así. Que la representación en todos los ámbitos es la forma en que hacemos las películas», dijo.
Pero el beso entre dos mujeres del mismo sexo en «Lightyear» solo llegó a los cines después de que los empleados de Pixar enviaran a la dirección de Disney una carta en la que exigían que el estudio no censurara «casi todos los momentos de afecto abiertamente gay» en sus películas, según Hollywood Reporter.
Disney no respondió inmediatamente a la solicitud de comentarios de Insider.
Iger podría enfrentarse a la presión de adoptar una postura en este tipo de cuestiones. El Barómetro de Confianza de Edelman de 2022, una encuesta en línea en la que se preguntó a más de 36,000 personas sobre una variedad de líderes, descubrió que, entre los trabajadores en general, 60% espera que sus directores generales hablen públicamente sobre cuestiones sociales y políticas.
«Nunca ha habido un momento más importante para que las empresas lideren, para que den un paso al frente y llenen el vacío», dijo anteriormente a Insider el CEO de Edelman, Richard Edelman. «Las empresas tienen que hacer de las cuestiones sociales una parte fundamental de la estrategia empresarial».
Asumir esas cuestiones sociales podría dificultar aún más el trabajo de Iger como líder que regresa. Hay una parte de los conservadores estadounidenses que están en contra de los derechos LGBTQ. Pero, ¿debe un CEO ceder ante una minoría ruidosa? Para algunos fans de Disney, la respuesta es «no».
«Un saludo a la película ‘Lightyear’ por representar a la comunidad LGBTQ», tuiteó un espectador de Carolina del Norte. «Fue hermoso y me gusta que mis hijas puedan ver la representación de relaciones diversas y saludables».
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