- En 2030 se prevé que existirán “problemas hidropolíticos” en el mundo, debido a las tensiones por falta de agua.
- La falta de agua también provocará pérdidas económicas y la imposibilidad de ejercer actividades como la agricultura.
- Actualmente hay una explotación a mantos acuíferos, provocando más problemas como el hundimiento de ciudades.
- En México se estima que los mayores problemas serán en el norte y centro del país.
Desde hace una década especialistas afirman que el agua se convertirá en el nuevo petróleo, su distribución y uso desmedido provocarán disturbios, tensiones diplomáticas alrededor de ríos y mantos acuíferos, además de migraciones.
La Organización de las Naciones Unidas (ONU) espera que en 2030 exista un déficit de 40% en los recursos del agua.
Para 2050, el crecimiento del PIB podría disminuir en un 6% debido a los impactos del consumo de agua en industrias como la agricultura, ganado y salud, teniendo pérdidas de $4.5 billones, de acuerdo con el Banco Mundial.
Las causas de una guerra anunciada
Uno de las principales metas es entender cuánta agua usamos y en dónde. Esto ayudaría a tener una mejor distribución del recurso.
Sin embargo, el 70% del agua extraída de mantos acuíferos, ríos y lagos se usan para el riego, mientras que el 10% solo es para consumo humano.
La industria del ganado utiliza hasta 16,000 litros para abastecer un kilogramo de carne y se estima que su demanda aumentará hasta un 50% en cinco años.
Las centrales eléctricas de carbón es una industria que consume el mayor volumen de agua para abastecer de electricidad a mil millones de personas, por lo que se espera que en un futuro las plantas de energía se dupliquen, de acuerdo con Greenpeace.
Un ejemplo es el proyecto de la India para reducir la brecha de escasez de luz a 240 millones de personas, el cual consiste en crear plantas eléctricas que produzcan 400 gigavatios, lo que significa una gran cantidad de agua.
Respecto a la agricultura, el 70% del agua se ocupa para el riego de los cultivos y se prevé que en 2050 el costo por alimentar cerca de 9 billones de personas requerirá un incremento del 50% de la producción agrícola y 15% más en el uso del agua, de acuerdo con el Banco Mundial.
No solo el uso de la industria amenaza al recurso vital del hombre, también lo hace el cambio climático, a través de las sequías y el impacto en el ciclo hídrico.
Las sequías alrededor del mundo provocan la extracción de agua dulce de los mantos acuíferos, los cuales cuentan con el 30% del agua del mundo, ocasionando una explotación desmedida de ella y el hundimiento de las ciudades.
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Por ejemplo, en Siria 1.5 millones de agricultores abandonaron sus tierras en 2011, luego de cuatro años de sequías. Los desplazos ocasionaron que Isis tomará la cuenca del río Tigris-Éufrates como un arma.
¿Qué pasará con los países más pobres?
En el año 2010 se reconoció al agua como un derecho esencial humano “para el disfrute de la vida”. El recurso hídrico también se encuentra dentro de los 17 objetivos de desarrollo sostenible de la ONU para 2030.
Sin embargo, ya somos testigos de conflictos por el agua. El grupo Fulani de Camerún, forzado al desplazamiento por una sequía, se enfrenta con los agricultores de en la República Centroafricana por el agua.
Las proyecciones indican que los países y comunidades más pobres del mundo serán los más afectados. Además, de que los conflictos podrían incrementar debido a ríos transfronterizos, por ejemplo, 260 de ellos atraviesan más de un país.
Actualmente más de mil millones de personas en el mundo habitan regiones con escasez de agua y esa cifra podría llegar a 3.5 millones en 2025.
El Sistema del Acuífero de Arabia, el cual suministra agua a 60 millones de personas, es el más amenazado ante un posible conflicto. Seguido de la cuenca del Indo en noroeste de India y Pakistán y la cuenca de Murzul-Djado en el norte de África.
¿Qué pasa en México?
El investigador y exdirector del Instituto de Investigaciones Sociales (IIS), Manuel Perló Cohen, estima que cerca del 10% de los mexicanos actualmente no cuentan con agua potable. Mientras que, de las personas que tienen acceso a ella casi el 30% no la obtienen en calidad ni cantidad suficiente.
Además el consumo promedio de cada mexicano es de 322 litro por día y el 40% se pierde en fugas.
De los 653 mantos acuíferos que existen en el país, 105 están sobreexplotados, de acuerdo con datos de la Comisión Nacional del Agua (Conagua).
En el Valle de México también existen cuatro sectores que consumen más agua potable entre ellos: la elaboración de refrescos, bebidas no alcohólicas, fabricación de papel, industria cervecera y la elaboración de harina de maíz.
Respecto al futuro, los problemas de falta de agua se verán en el norte y centro del país, en particular la Ciudad de México, debido a su alta densidad poblacional, que ocasiona una mayor demanda.
Otros estados que pueden sufrir escasez son Baja California Sur, Guanajuato, Aguascalientes y Estado de México.
¿Qué tan preparados estamos?
El Foro Económico Mundial sostiene que para evitar el déficit de agua y los conflictos que están por venir se requiere de tecnología.
Las granjas verticales demandan un 95% menos de agua, por lo que el uso del recurso en cultivos disminuiría. Además, se está experimentando con la creación de carne en laboratorios para reducir costos y consumo de agua.
El Banco Mundial trabaja con el blockchain para la administración de las cuencas y asignar agua a agricultores de manera transparente, justa y eficiente. Mientras que la inteligencia artificial, ayudará a predecir el uso eficiente del agua subterránea.
En el día mundial del agua, la principal acción es entender cómo se distribuye el recurso y hacerlo de manera justa, transparente, eficiente para cada humano acreedor de este derecho por el simple hecho de ser humano.
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