- Los entrevistadores pueden dejar pasar un pequeño desliz o un momento embarazoso sin muchas consecuencias.
- Sin embargo, otras cosas que digas en una entrevista de trabajo, como malas palabras o mentiras descaradas, podrían acabar con tus posibilidades de inmediato.
Nadie es perfecto. Podrías ser un profesional en las entrevistas de trabajo, pero siempre existe la posibilidad de que digas algo un poco raro.
Especialmente cuando las personas que recién ingresan a la fuerza laboral y tienen que lidiar con entrevistas virtuales, pueden cometer errores y decir algo ligeramente poco profesional.
Esto no necesariamente hundirá tu candidatura. Eso es a menos que digas algo tan malo que arruines por completo tus posibilidades. Decir groserías, mentir o mostrar tu ignorancia sobre lo que hace la empresa puede no solo ponerte en una mala posición con tu entrevistador, sino que podrías terminar la entrevista allí mismo.
Aquí hay 15 «metidas de pata» en la entrevista de trabajo que podrían descalificarte automáticamente, a menos que tengas mucha suerte:
«¿Qué hace esta compañía?»
Preguntas como esta harán que parezca que ni siquiera te importa lo suficiente como para ejecutar una simple búsqueda en Google. Investiga un poco o tanto como puedas sobre la empresa, así como sobre tu entrevistador para poder dar lo mejor de ti.
«¿Para qué trabajo me estoy entrevistando?»
¿Cómo has llegado tan lejos en el proceso si no sabes para qué te están entrevistando? Si estás legítimamente confundido, intenta preguntar qué tipo de persona tiene éxito en el trabajo, de modo que parezcas comprometido en lugar de despistado.
«Quiero tu trabajo»
Ponte en el lugar de tu entrevistador. ¿Te gustaría contratar a alguien que suene amenazador para tu posición? Probablemente no. Concéntrate menos en el trabajo que tiene tu entrevistador y más en el que te estás postulando.
«Sé que no soy la persona más calificada, pero …»
Si dices esto, la respuesta adecuada del entrevistador es: «Oh, ¿no lo eres? Adiós entonces».
Claramente, el entrevistador cree que estás lo suficientemente calificado como para hablar contigo. Así que deja el autodesprecio. No es refrescante. Te hace sonar como alguien triste, y el entrevistador va a elegir alguien que no piensa que es la persona menos calificada.
«¿Estás casada? / ¿Estás embarazada? / Etc.»
Nunca le hagas al entrevistador preguntas personales ni nada que pueda resultar ofensivo.
«Mi—,» «Cab–» «Pu—madre», etc.
Hey, todos maldicen. Sin embargo, es mejor evitar las groserías en las entrevistas de trabajo. Dicho esto, soltar una palabrota o dos durante una historia divertida puede no ser un clavo en tu ataúd. Por otro lado, decir groserías con enojo a alguien (tu entrevistador o no), definitivamente te dejaría fuera de combate.
Cualquier cosa ofensiva, sexista, racista, etc.
Una entrevista de trabajo no es el lugar para estallar tus opiniones controvertidas o tu atrevido sentido del humor. Manténte alejado de los temas que podrían incomodar a tu entrevistador, si es posible.
¿Quieres cenar en algún momento? o ‘Guau, tienes una sonrisa tan hermosa’
No coquetees con tu entrevistador.
Lo diré de nuevo, no coquetees con tu entrevistador. Bien, felicitaciones por estar tan seguro de ti mismo que crees que puedes seducir para entrar en un trabajo, pero esta táctica probablemente terminará mal.
Hablar mal de tus trabajos o jefes anteriores
No importa cómo dejaste, o se te pidió que dejaras tu puesto anterior, es vital que nunca intentes arrojar una mala luz sobre tu antiguo jefe o empresa. No solo te hace parecer una persona poco positiva, sino que quejarte de tu trabajo anterior también puede llevar a tu entrevistador a pensar que eres poco profesional y amargado.
Siempre es mejor tratar de ser lo más positivo posible acerca de tu antiguo empleador y hablar sobre las habilidades que te enseñó ese trabajo y que podrías incorporar al que estás solicitando.
Cualquier cosa que indique que esta organización en particular no es tu mejor opción
Incluso si no puedes imaginarte quedándote en la empresa por mucho tiempo, es importante no expresarlo en voz alta. Tu entrevistador no responderá bien a alguien que exprese la intención de usar el puesto como un simple trampolín hacia algo más grande y mejor.
Lo mismo ocurre con la entrevista de trabajo con tu segunda opción. Es posible que tengas un trabajo de ensueño entre bastidores del que estés esperando recibir noticias, pero no hagas que el entrevistador sienta que no valoras su organización.
Cualquier cosa que parezca amenazante
Evita cualquier oración que comience con «Será mejor que consiga este trabajo o …»
Incluso si solo estás bromeando (ojalá que estés bromeando), parecerás espeluznante y demasiado agresivo.
Mentirle descaradamente a tu entrevistador
No mientas. Si tu mentira es obvia, no te llamarán. Si no es así, lo descubrirán más tarde. En el caso de una entrevista para un trabajo, la honestidad es siempre la mejor política.
No culpes al entrevistador
Cualquier entrevistador que se aprecie no permitirá que lo hagas sentir culpable por no darte un trabajo, así que guarda la triste historia. Es probable que a ellos no les importe lo difícil que fue para ti que te despidieran de tu último trabajo, o incluso lo mucho que necesitas este. Concéntrate en tus calificaciones y en lo que podrías hacer por la empresa, no en cuanto necesitas personalmente el trabajo.
¿Cuánto tiempo libre tendré?
Si bien las ventajas, los beneficios y las políticas de tiempo libre, como vacaciones, son importantes para la mayoría de los empleados, generalmente es mejor guardar este tipo de preguntas para más adelante en el proceso de solicitud, o incluso hasta que te hayan ofrecido el trabajo. En lugar de preguntar directamente sobre los beneficios, utiliza tu primera ronda de entrevistas para demostrar por qué serías un candidato valioso y un empleado que merece un buen paquete de beneficios.
«No tengo preguntas»
La mayoría de los solicitantes de empleo saben que no importa lo informativo que pueda ser su entrevistador, siempre deben tener algunas preguntas preparadas para hacer al final de la entrevista. Estas preguntas pueden revelar mucho sobre qué tan bien investigaste a la empresa, qué te atrajo del puesto y el deseo que tienes de tener éxito en el puesto que estás solicitando.
Rachel Gillett y Áine Cain contribuyeron a versiones anteriores de este artículo.
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