- La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) mejoró su pronóstico de crecimiento para México en 2021 a 3.6% desde 3% anual.
- Por su parte los especialistas económicos consultados por el Banco de México (Banxico) también mejoraron su perspectiva, pero para 2020, a 9.1% anual.
- Sin embargo, ambas instituciones han insistido que se necesita más apoyo fiscal por parte del gobierno federal.
La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) mejoró su perspectiva de crecimiento para México el próximo año. Según este organismo con sede en París, que aglomera a países industrializados, la economía mexicana tendrá un repunte de 3.6% anual en 2021. Este pronóstico es una mejoría cuando se compara con el 3% que vaticinó en junio.
«El crecimiento económico será liderado por las exportaciones, particularmente de firmas integradas a cadenas de valor mundial», indicó en su reporte de Perspectivas Económicas de diciembre.
«El consumo privado se fortalecerá moderadamente, ayudado por un envío de remesas robusto, un mercado laboral que lentamente se recupera y un repunte en la confianza una vez que la vacuna (contra el Covid-19) sea distribuida», añadió.
En un reporte por separado, especialistas económicos consultados por el Banco de México (Banxico) mejoraron su perspectiva económica para 2020.
El Banco Central informó que la expectativa de contracción se ubicó en 9.1% anual en noviembre, una mejoría comparada con el 9.4% del mes anterior, y con respecto al 10% que se esperaba en julio.
Es necesario un estímulo fiscal del gobierno federal
Pero este crecimiento en 2021, será un efecto de rebote, aclaró la OCDE. El organismo advirtió que México aún está expuesto a rebotes focalizados de Covid-19 el próximo año. Además de que la incertidumbre continúa, por lo que se necesitan medidas de contención además de una política fiscal que impulse a la economía.
«A pesar del limitado margen fiscal, la gravedad de la recesión justifica que se intensifique el apoyo proporcionado por la política fiscal», indicó la organización.
«Entre otras medidas, podría incluirse un programa de ayudas y de formación para los trabajadores más afectados, tanto en el sector formal como en el informal, mientras que la reducción temporal de los impuestos sobre las nóminas podría ayudar a más pymes y respaldar la creación de empleo formal», añadió.
Por su parte, en su última decisión de política monetaria, Banxico indicó que es necesario más apoyo por el lado de estímulos fiscales.
«Perseverar en fortalecer los fundamentos macroeconómicos y adoptar las acciones necesarias en los ámbitos monetario y fiscal, contribuirá a un mejor ajuste de los mercados financieros nacionales y de la economía en su conjunto», señaló el Banco Central.
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