• Meghan Markle se sintió “desprotegida” por la familia real británica ante los ataques mediáticos mientras estaba embarazada. 
  • La declaración forma para de una serie de documentos presentados como parte de una acción legal de Meghan contra la editorial Associated Newspapers. 
  • La demanda va en contra de artículos publicados en el Mail on Sunday en 2019, que incluyen una carta manuscrita que la duquesa envió a su padre en agosto de 2018. 
  • En dichos documentos, se determina que el Palacio de Kensington no dejó que Meghan se defendiera de las falsas acusaciones en los medios de comunicación. 

Meghan Markle, la duquesa de Sussex, se sintió “desprotegida” por la familia real británica ante los ataques mediáticos mientras estaba embarazada de su hijo Archie.

La declaración forma parte de una serie según documentos del Alto Tribunal de Londres presentados como parte de su acción legal contra la editorial Associated Newspapers por artículos que su periódico, Mail on Sunday, publicó el año pasado.

Estos incluyen partes de una carta manuscrita que le había enviado a su padre, Thomas Markle, en agosto de 2018.

Meghan y su padre no han hablado desde que este se ausentó de su boda con el príncipe Harry de Gran Bretaña, en mayo de 2018, después de someterse a una cirugía del corazón y tras las noticias de que había realizado fotografías con un paparazzi.

El equipo legal de la duquesa sostiene que la campaña mediática dirigida contra esta le causó “una angustia emocional tremenda” y “daño a su salud mental”.

“Sus amigos nunca la había visto en ese estado, así que no se equivocaron al preocuparse por su bienestar. Sobre todo, porque estaba embarazada y la Institución (familia real británica) la había dejado desprotegida prohibiéndole que se defendiera”, sostienen los abogados en la documentación del juicio contra Associated Newspapers, reportó Vanity Fair.

El Palacio de Kensington no dejó que Meghan se defendiera de las falsas acusaciones en los medios

Mail on Sunday justificó la publicación de la carta de Markle diciendo que cinco amigos no identificados de Meghan habían dado su versión de los hechos en entrevistas con la revista People en enero de 2019.

En dicho periodo, la duquesa se encontraba embarazada de Archie, quien nació el 6 de mayo de ese año.

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REUTERS/Toby Melville/File Photo

En el reportaje de la revista estadounidense, los amigos de la duquesa hablaron sobre la “complicada” relación de la duquesa con su padre. Esto habría molestado a Markle, quien finalmente habría filtrado la carta que su hija le escribió.

El equipo legal de la duquesa de Sussex dice que es mentira que ella hubiera autorizado o arreglado con sus amigos para que hablaran con People sobre la carta.

“La decisión de ‘no hacer comentarios’ fue escogida por el equipo de comunicación del palacio de Kensington sin la aprobación de la demandante, tal y como es común en las comunicaciones de la realeza”, detallaron los abogados, según Vanity Fair.

“Si a la demandante se le hubiera dado la oportunidad, habría pedido al equipo de comunicación del palacio de Kensington aclarar que no había participado en el reportaje de People”, añadieron.

La boda de Meghan y Harry habría traído ingresos por 1 billón de libras al turismo británico

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NEIL HALL / Pool vía REUTERS

De acuerdo con Vanity Fair, en mayo de 2019, el juez del caso desestimó parte de la demanda de Meghan contra Associated Newspapers, aunque la fecha del juicio se mantuvo pendiente.

En esta nueva documentación presentada por el equipo legal de Markle también se reveló información sobre los gastos de su boda con el Harry.

Según Meghan, el príncipe Carlos fue quien pago la boda, mientras que solo los gastos de seguridad fueron pagados con el dinero de los contribuyentes británicos.

Además, sus abogados sostienen que la boda generó ingresos de aproximadamente 1 billón de libras al turismo del país, reportó Vanity Fair. Dicha cantidad superaría el gasto que hizo por seguridad, aunque no se proporcionaron datos que respalden este hecho.

Actualmente, Meghan y Harry viven en Los Ángeles, Califormia, después de renunciar a sus deberes reales a fines de marzo.

A finales de junio, ambos firmaron con la misma agencia de oradores de lujo que trabajan con Barack Obama, ex presidente de Estados Unidos, y otros clientes de alto perfil.

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